Blue blood

“All the technology and where does it come down to? A couple of cops and some boxes” Danny Reagan, Blue bloods (CBS)

De la treintena de series que habrán aparecido cuando finalicen estos quince días de estrenos, y a parte, sobra decirlo, de Boardwalk Empire (HBO), Blue bloods (CBS) será seguramente la única que siga. La serie –cuyos derechos ha adquirido ya Telecinco para nuestro país- cuenta la historia de una familia de Nueva York entregada por completo al cuerpo de policías de la ciudad: abuelo, padre y tres hijos (uno de ellos recientemente fallecido en acto de servicio) son agentes mientras que la hija es ayudante del fiscal del distrito.

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Sobra decir que el cabeza de familia y jefe de la policía de la ciudad, Frank Reagan, cobra vida a manos de Tom Selleck, que, 22 años después de dejar de conducir el Ferrari 308 GTS de Magnum (CBS), vuelve a la misma cadena, para ejercer de vela mayor de un barco que, si la cosa no se tuerce, puede haber emprendido un largo viaje.

El piloto empieza con 20 minutos trepidantes. Se abre un caso al tiempo que vamos conociendo los personajes, se investiga al más puro estilo detectivesco tradicional (sin análisis de ADN, comparación de huellas digitales o seguimientos por satélite) y se cierra cuando todavía queda medio capítulo por delante. Cuando ya estamos enganchados, una derivada del caso nos mantendrá en vilo hasta el final, eso sí, con un ritmo más pausado y dando tiempo a los personajes para presentarse.

Los personajes son interesantes. Donnie Whalberg interpreta a Danny, el hijo mayor y detective responsable del caso. Cuesta imaginar unas facciones más adecuadas para el trabajo de detective que las de la familia Whalberg. Es el protagonista del capítulo y su interpretación está a la altura. Será interesante ver como afronta el stress post-traumático que –se intuye- se ha traído de Irak.

Tengo ganas de ver la evolución de esta serie –cuya estética recuerda en algunos momentos a Se7en (David Fincher, 1995)-, en la que, aunque los casos se resolverán probablemente en un capítulo, los personajes esconden secretos interesantes.