‘Jane The Virgin’ 4x01 review: Un regreso por todo lo alto

Por Betty M. Martínez

‘Jane The Virgin’ se fue de vacaciones el pasado mes de mayo dejándonos con un cliffhanger menos espectacular que en otras ocasiones, pero eso no ha impedido que su regreso haya sido espectacular. En este primer episodio de la cuarta temporada hemos tenido absolutamente de todo: citas románticas, encuentros inesperados, discusiones, malos entendidos, intrigas, humor… En resumen, ha sido un compendio perfecto de todo lo que representa ‘Jane The Virgin’. ¿Lo vemos con detalle?

¡¡CUIDADO SPOILERS!!

Señales confusas

Comencemos, obviamente, por nuestra querida Jane. Nos la hemos encontrado justo igual que la dejamos. Hecha un lío. Los fieles integrantes del TeamRafael hemos estado conteniendo la respiración durante todos estos meses esperando para ver si, AL FIN, este romance se concretaba. Y, señores guionistas, déjenme decirles que han sido muy crueles con nosotros.

Ya sabemos que esta relación nunca ha sido fácil y, desde luego, no es para nada normal, pero esta vez se les ha ido un poco la mano. Que si Jane todavía siente algo por Rafael, que si él le lanza señales de que busca un acercamiento, que si una copa de vino con un post it estratégicamente colocada… ¿A alguien le extraña que Jane interpretara lo que interpretó? A mí desde luego que no porque yo hubiera reaccionado igual que ella. Si alguien pensó lo contrario, por favor, que me lo explique porque yo sigo sin entenderlo.

En fin, no voy a dar más detalles (ya sabéis, eso de los spoilers). Solo diré que en este capítulo el TeamRafael recibió un jarro de agua fría sin previo aviso. Es más, casi me atrevería a decir que con premeditación y alevosía. Por favor, si ya casi estábamos aplaudiendo de la emoción cuando nos llevamos el bofetón. Sólo hay una razón por la que no voy a montar en cólera y es porque Justin Baldoni nos ha alegrado la vista de tal forma que soy incapaz de describirlo con palabras.

De lo que pasó después del “momento confusión” no voy a comentar nada porque habrá que ver cómo evoluciona la relación. Ha sido desagradable, pero hay que reconocer que el cajón de la basura llevaba mucho tiempo acumulando residuos y era evidente que tenía que explotar en algún momento. Ha sido triste ver discutir a Jane y Rafael, pero va a ser interesante comprobar cómo lidian a partir de ahora con sus discrepancias educativas porque me da la impresión de que la diplomacia ha llegado a su fin y cada uno va a pelear por aquello en lo que cree. Solo espero que esos desacuerdos no afecten a nuestro Mateo.

El pasado siempre vuelve

En medio del ‘sí pero no’ o ‘no pero sí’ de Jane y Rafael ha llegado Adam. Mejor dicho, ha regresado Adam, el primer gran amor de Jane con el que casi se casa cuando tenía 19 años. Adam es el pasado de Jane, pero ha llegado pisando fuerte a su presente y no descartemos que pueda ser su futuro.

Es evidente que todavía se gustan y su relación del pasado no fracasó por ellos mismos, sino que fueron “elementos externos” los que boicotearon su boda. Esperemos que esta vez esos “elementos externos” remen a favor de la pareja y no intentan volcar el barco. Por cierto, no me esperaba yo algo así de esos “elementos externos”.

En fin, démosle una oportunidad a Adam. ¿Quién sabe? ¿A lo mejor resulta que el primer amor de Jane es también su amor definitivo? Tengo mucha curiosidad por ver como Babe Adam lidia con los hombres que hay ahora en la vida de Jane. Adam, un consejo de bienvenida: ten muy presente que gran parte del éxito de tu relación con Jane va a depender de cómo te lleves con Mateo, Rogelio y Rafael. Por ese orden.

¿Tres son multitud?

Decía más arriba que “elementos externos” boicotearon la relación de Jane y Adam. Pues bien, Rogelio y Xiomara deben estar muy atentos porque otros “elementos externos” también pueden darles un disgusto. De hecho, a Xiomara ya le han dado uno. La han dejado sin su soñada luna de miel en Hawaii. ¿A quién me refiero? A Darci y al bebé que espera.

La primera crisis ya la vimos en la pre-boda de Xiomara y Rogelio, pero en estos primeros días de post-boda Darci ha sido la palabra más repetida por el nuevo matrimonio. Soy muy fan de Justina Machado y su personaje en esta serie es fantástico, pero, Darci, cuidadito con lo que haces con Rogelio.

Por cierto, impresionante la capacidad expresiva de Jaime Camil reaccionando a todos los ataques de Darci y mi aplauso a los guionistas por sacarse de la manga unas respuestas tan ágiles y convincentes. Nunca creí que vería a un Rogelio de la Vega tan contenido ante tanta provocación. ¿Cuántas tilas se habrá tomado antes de ir a ver a la madre de su segunda hija?

Y hablando de contención, ¿os habéis dado cuenta del profundo cambio que ha dado Xiomara desde que la conocemos? Es increíble lo mucho que ha madurado el personaje interpretado por Andrea Navedo. Aquella Xiomara un tanto inconsciente del principio es hoy una mujer serena, madura, reflexiva, capaz de sosegar los arrebatos de Rogelio y de darle los mejores consejos. Veremos si la paciencia también es una de sus nuevas virtudes porque le va a hacer falta.

El club de las villanas

Y si Darci va a ser un dolor de cabeza para Xiomara, vayamos con quienes han sido, son y probablemente serán un dolor de muelas para todos nosotros. Podríamos llamarlo ‘El club de las villanas’, aunque habría que hacer matices.

Por un lado, tenemos a Luisa, que ingresó en este club por la puerta grande en el mismo segundo en el que echó a Rafael a la calle. Siempre he dicho que a Luisa le debemos mucho porque sin ella no habría serie, pero este cambio le ha hecho perder muchos puntos.

Por otro lado, tenemos a Anezka, que de pobre y desvalida hermana ha pasado a hacer todo lo posible para despojar a la hermana guapa de todo cuando tiene. Petra siempre fue una villana bastante light y es el personaje que siempre camina sobre la cuerda floja. Hay momentos en que se comporta como la mejor amiga de Jane y en otros momentos parece que quiera acabar con ella. Ahora creo que ha dejado atrás su pasado en el lado oscuro, pero no hay que perderla de vista.

Y la gran villana: Rose-Sin Rostro. La verdad es que con ella pequé de confiada. Creí que al encerrarla nos habíamos librado de ella, pero me equivoqué. Sigue ahí. Maniobrando. Planificando. Intrigando. Y estoy casi segura de que de su maquiavélica cabeza no va a salir nada bueno.

Para terminar. Si alguien no ha visto este capítulo, que se salte el siguiente párrafo si no se quiere enterar antes de tiempo de la gran novedad de la temporada de ‘Jane The Virgin’.

Atención. Va spoiler de los fuertes. ¡¡¡Habemus narradora!!! Si el señor narrador era uno de nuestros personajes favoritos, su alter ego femenino ha sido toda una revelación. Es muy interesante ver cómo nuestro querido Anthony Méndez la pone al día de personajes y trayectorias. Es como cuando nosotros le intentamos explicar quién es quién a alguien que no ha visto nunca ‘Jane The Virgin’. De verdad, no puedo dejar de aplaudir esta idea. Además, por momentos hay una cierta rivalidad por llevar la voz cantante de la historia y eso nos puede dar grandes momentos y muy divertidos. Ha sido toda una sorpresa y de las buenas. Señores productores, una pregunta, ¿ha llegado para quedarse o viene sólo de visita? Sea como fuere, señora narradora, sea usted bienvenida a la comunidad ‘Jane The Virgin’.

Los que se saltaron el párrafo anterior ya pueden seguir leyendo.

En fin, el primer capítulo de la temporada no ha estado nada mal. Como dije, hemos tenido de todo, pero, además, han conseguido lo más importante. Que sigamos teniendo curiosidad por saber qué va a pasar ahora. ¿Adam será un personaje de transición o ha llegado para quedarse? ¿Podrán Xiomara y Rogelio gestionar un matrimonio casi de tres? ¿Está seguro Rafael de lo que siente? ¿Para qué quiere Sin Rostro cien millones de dólares? Las respuestas… En las próximas semanas.