'The Affair' 2x08 Review: “Un verdadero matrimonio” (visión masculina)

Por Jesús del ValleJesús del Valle

Se acerca el final de esta irregular temporada sobre amoríos y aventuras. Pero lo está haciendo por la puerta grande.

(Atención ¡Spoilers!)

Digo irregular porque le ha costado arrancar. Y lo explico: Narraciones innecesarias de tramas absurdas. Con un Pacey Cole medio borracho y desaparecido, y una Helen al alza, veamos que ha deparado este octavo episodio.

Parte uno: HELEN

Sucede algo extraño, que después de los títulos iniciales de crédito (esos tan horrorosos, con una canción que provoca hasta miedo), en vez de encontrarnos con la versión correspondiente, tenemos unas pinceladas de “futuro”. Ese “futuro” que en esta ficción lo tenemos de un color diferente, con unos peinados diferentes para los actores, y para no confundirnos.

En él, nuestra protagonista favorita (Helen) debe decidir si traiciona a su ex marido para meter a Alison a la cárcel. Si, si, a la cárcel.

Pero volviendo al pasado, Noah es un escritor de éxito. Muchísimo éxito. Su libro (un poco subidito de tono) triunfa entre el público femenino. Y esto le hace ganar cantidades incontables de dinero. Hasta el punto de ofrecer a su hija Whitney una suite de hotel para que comparta con su amiguita.

Centrándonos en Helen, que ya habrá tiempo de hacerlo de Noah, tenemos una madre preocupada porque su hija rechaza las mejores universidades porque quiere ser modelo. ¿Modelo eventual, o como trabajo?

Como buena madre, esa idea le parece una estupidez. Pero su hija (recordemos, en la edad del pavo) no entra en razón. Cosa que si hace Noah, que en su estado de fama provisional, no critica el razonamiento de su hija.

Si os dais cuenta, sin Alison de por medio, vuelve el matrimonio a su estado inicial. Y los dos parecen felices discutiendo aspectos como estos en un restaurante que visitaron hace la friolera de 20 años. A todo esto, ¿No pasa muy rápido el tiempo?

Parte dos: NOAH

Lo bueno de este episodio (que por cierto, me parece el mejor de la serie), es que tenemos los dos puntos de vista sobre un mismo tema que tanto nos gustó en los inicios de la primera temporada y que se estaba perdiendo entre borracheras de Cole.

Pues Noah tiene tanto éxito que hace lecturas de su libro, lo firma en tiendas y recibe teléfonos de fans empedernidas.

En una de esas lecturas, a la que asiste Helen, recibe pregunta poéticas sobre el amor, la vida… Y una mala noticia: El premio literario que esperaba recibir no lo ha ganado. Y esta mala noticia se la da un crítico muy crítico con su trabajo (perdón por la redundancia), que le pone de muy mal humor al señor Solloway.

Tan enfadado le pone, que en su visión de la cena con Helen que antes conté, tiene pensado decirle un par de palabras hasta que su exmujer se lo impide.

Lo que para Helen es una agradable cita entre dos amigos, para Noah es una sucesión de bronca tras bronca. Seguramente la verdad esté entre ambos pensamientos.

OTRO AFFAIR

El que casi tiene Noah con su asistente. Porque pasar tanto tiempo con la misma persona hace que luego no la veas de la misma manera, el afamado escritor Solloway se emborracha hasta el punto de casi pegar al crítico muy crítico mencionado anteriormente. Y digo “casi” porque lleva tanto alcohol en su cuerpo que el golpe lo lanza al aire.

Lo peor de todo esto es que es grabado con tanto Smartphone que le rodea. Las consecuencias de ser famoso…

Y cuando su asistente decide ir a contárselo, pasan de las palabras a los besos… Y hasta ahí. Porque la asistente decide cortarlo y dejarlo en ese punto. ¿Ha sido infiel con Alison? Este ya es otro debate.

Recordemos que Alison está muy embarazada, y que su única conexión con ella es vía web-cam. Ya veremos como acaba todo esto.

FUTURO

Con el final del anterior episodio, y con Alison como principal sospechosa, Helen reúne todo su valor para obtener el ADN del hijo de su exmarido y así ayudar al abogado a demostrar que Noah es inocente… en detrimento de su ahora mujer Alison. Un lío, ¿Verdad?

Pues solo nos quedan dos capítulos para deshilachar esta telaraña de culpas, atropellos y aventuras. Si Cole nos lo permite…

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