'The Magicians' 2x03 Review : La divina tragedia

Por Sabrina Rodríguez

Esta temporada de 'The Magicians' empezó con un ritmo trepidante, sí, pero es que este tercer episodio tiene incluso sabor a season finale. Si hacen esto ahora, no quiero imaginar lo que harán para el final de temporada, aunque eso también me lo pregunté después de ver el primer episodio de la serie.

Hemos sufrido y hemos llorado, mientras comíamos helado para calmar las penas. Es imposible hablar del episodio sin descubrir acontecimientos importantes así que, antes de seguir leyendo, primero mira el capítulo. Un consejo: ten pañuelos a mano.

A partir de aquí: ¡SPOILERS!

Maldiciones que matan

Volvemos con los chicos al castillo de Fillory y la maldición de Martin surte efecto. Lo que podría parecer un ataque de celos por parte de Eliot, al haberse perdido aventuras mientras tenía que hacer de monarca responsable, resulta ser algo más. Los reyes humanos siempre acaban por matarse en Fillory por paranoia, codicia, envidia o una mezcla de todo.

La escena, aunque parezca que no, por la gravedad de que nuestros héroes quieran matarse los unos a los otros, es el toque cómico de este episodio. A partir de aquí, y quitando alguna aparición divina haciendo chistes escatológicos, el capítulo se vuelve oscuro y triste. Pero dejemos las lágrimas para luego. Ver a Margo en plan reina destroyer no tiene precio. Tan en serio se lo toma que cuando todos los reyes han muerto, y no queda a quien matar, se suicida (para alivio de Penny y Fen).

En realidad, a parte de divertirnos viendo a los personajes fuera de sus casillas, la escena sirve para que todos menos Quentin se deshagan de sus demonios y así no puedan usarlos contra la Bestia, para que recordemos que Fen es mucho más que una mujer florero y que Penny es un tipo inteligente y capaz, a pesar de su mala actitud. También nos recuerda hasta dónde llega la sombra de la Bestia. Martin maldijo el trono de Fillory hace mucho tiempo y su poder sigue siendo inquebrantable.

Una vez todos están muertos, son devueltos a la vida con pinchazos de adrenalina y aquí no ha pasado nada. Todos se dirigen a realizar su plan, más centrados y unidos que nunca, sin pensar en aquello que comenté la semana pasada. ¿Por qué no se juntan con Julia y todos se ayudan en su lucha contra el mal? El estar cegados, cada uno en lo suyo, irá en su contra. Se masca la tragedia.

Quentin madura

El corazón del episodio gira en torno al helado. Un helado con ositos de gominola y todo el azúcar del mundo. Quentin parece que quiere distraer a Alice de lo que viene pero luego lo gira para hacer lo que siempre hace: hablar de sus sentimientos y lo que él quiere. Pero Alice no le sigue la corriente. Esta vez no. No está ahora para hablar de los sentimientos de Quentin y el mundo no gira en torno a él. Quentin por fin lo comprende y se pone a hablar del helado más dulce del mundo que le hará a Alice cuando todo esto acabe. Preciosa y sincera escena. Una pena que todo lo que podrán degustar después sea amargura.

Mal momento

Tampoco le van las cosas de maravilla a Julia. Después de por fin convencer a Marina de invocar a la diosa que en realidad es Reynard, la Bestia le juega una mala pasada. Ya nos había quedado claro que aunque Martin esté obligado a ayudarla, eso no quiere decir que tenga que hacer exactamente lo que ella quiere. Marina tendrá que enfrentarse sola al dios asesino y lo hará con mucha actitud, pero Reynard es más de lo que ella podría soportar. La escena en que mata a su gato y acaba por arrancarle un dedo de un bocado a Marina es difícil de ver. Los dos actores están soberbios y hacen que temas por un personaje que, en principio, no tendría porque contar con tu simpatía.

Cuando por fin pueden entrar en casa de Marina, Martin y Julia controlan la situación. Todo está preparado: la Bestia domina a Reynard, Marina está a salvo y Julia tiene la daga mágica para terminar con el dios come corazones de una vez por todas. No contaban con que lejos, muy lejos, los chicos de Fillory tenían todo preparado para atraer a Martin hacia ellos. En el peor de los momentos, cuando Julia iba a matar a Reynard, Penny aparece y se lleva a Martin (y a Julia por error al intentar impedirlo). Reynard y Marina se quedan solos. La daga en el suelo. Luchan por ella. Sabemos que Marina no tendrá oportunidad.

¿Recuerdas que es un niffin?

Eso parece que nos dijeron al principio del episodio. Anteriormente en 'The Magicians'... El hermano de Alice. Un niffin. Todo aquello. ¿Te acuerdas? Con eso nos revelaron lo que estaba por llegar, especialmente a los lectores de las novelas de Lev Grossman. Porque si este episodio tiene sabor a season finale es porque esta lucha entre Alice y la Bestia se produce al final de la primera novela de 'Los Magos'.

Alice vuelve a tener que enfrentarse a Martin y decide que la única manera de ganar es pasarse, que su magia sea tan potente que se convierta en otra cosa, pero con la suficiente voluntad para no olvidar su objetivo de terminar con la Bestia. El problema es que un niffin es imparable y una vez que ha terminado con Martin, quiere terminar con todos los demás. Un malherido Quentin tendrá que impedirlo con el demonio que le queda y no sabemos si las palabras de libertad se las dice al ser de su espalda o a lo que queda de la humanidad de Alice.

Maravillosa Olivia Taylor-Dudley, la actriz que interpreta a Alice. Siempre ha parecido tan buena, tan dulce, tan mosquita muerta. En el momento que se transforma, su expresión y su diseño corporal es otro. Ayuda el que no lleve puestas las gafas pero el cambio en la interpretación está ahí, haciendo muy creíble que nuestra dulce Alice ahora sea un ser letal al que hay que detener.

Unidos en la tragedia

El final del episodio es desgarrador. Alice ha muerto y ha sido Quentin el que ha tenido que matarla. Tan cruel como cuando Eliot tuvo que terminar con Mike, su amante, porque estaba poseído por la Bestia. Margo, por una vez, no sabe qué decir y se limita a llorar acurrucada. Quentin está destrozado y Eliot intenta consolarle. Él sabe por lo que está pasando. ¿Cómo superar lo ocurrido?

¿Y Julia? Vuelve a estar sola. Vuelve a no tener nada. Marina ha muerto, ya no tiene el poder de la Bestia y Reynard ha huido con la daga mágica, sabiendo que ella era la que iba a por él. ¿Irá él ahora a por ella? ¿Seguirá matando? ¿Dónde está Kady, por amor de dios?

Penny está fuera de control y no sabemos qué le pasará. Tanta crueldad y tanto sufrimiento me van a tener en vilo hasta la semana que viene. Me acurrucaré en un rincón a comer helado con ositos de gominola. Por Alice.