Flechazos y bodas a ciegas que normalizan: así llegaron los nuevos Casados a Antena 3
Casados a primera vista estrenó su cuarta temporada en Antena 3 con su esencia de siempre y novedades en la composición de parejas. Para esta primera entrega, el dating show se reservó su primer matrimonio entre dos mujeres y la boda de un soltero “recurrente” al que ya hemos visto en otro programa de citas.
Este es Julián, un pensionista y modelo de Santander al que los espectadores recordaron por su paso por First Dates. El cántabro dio su tercer 'sí, quiero' a Maria José, con quien mostró complicidad desde el principio. “Es ella, no hay que darle más vueltas”, dijo el protagonista.
La primera impresión de ambos fue “espectacular”, según confesaron. También fue así entre los invitados de ambos bandos, que contaron una vez más con la presencia de exparejas. Fue el caso de María José, que estuvo acompañada por su exmarido Domingo.
La química entre la nueva pareja se hizo evidente ya en la sesión de fotos del enlace, en la que Julián no ocultó su deseo. “Me estoy poniendo malísimo”, dijo a las cámaras de Antena 3. Ya en la noche de bodas, María José quiso poner distancia y prudencia. “Vamos a ir despacio, no somos dos chiquillos. No voy a pasar a mayores”, aseguró.
El 'Sí, quiero' de ensueño de Sheyla y Carolyne
El otro enlace de la noche fue el de Carolyne y Sheyla, el primer matrimonio entre dos mujeres en el programa. Ambas protagonizaron una boda emotiva que dejó atrás las dudas iniciales por sus diferencias de mentalidad.
“Deseo adentrarme en un sueño mágico contigo. Sé que no soy una princesa de cuento pero hoy me siento como una de ellas, así que deseo y quiero darlo todo para que nuestras sonrisas puedan durar para siempre”, dijo Carolyne en el altar a su mujer.
“Te prometo quererme más a mí misma para quererte a ti más y mejor, cambiarte lo tacones y hacer que te duela la boca de reír todos los días de mi vida”, replicó Sheyla.
El sexo tampoco fue protagonista en la noche de bodas de Carolyne y Sheyla. Mientras que la primera estaba dispuesta a dejarse llevar, la segunda no vio que hubiera surgido “el fuego” en su primera noche juntas.
