Televisión pública

Europa Laica denuncia la “abusiva” retransmisión de eventos religiosos en RTVE

Imagen de El día del Señor

La organización civil Europa Laica ha publicado en su web un texto en el que vuelve a denunciar la ruptura del principio de no confesionalidad del Estado por parte de RTVE.

La asociación, que en 2013 presentó una queja en la corporación “sobre la invasiva y evangelizadora programación católica en el ente público” recuerda la reciente polémica que llegó al Parlamento sobre las misas en RTVE.

Europa Laica denuncia el coste de estas emisiones y señala que “la Iglesia católica (también otras religiones) tienen sus propios medios de comunicación, incluso, en parte, financiados por el Estado”.

En esta ocasión, la organización también apunta a la proliferación de contenidos religiosos en la radio pública. Pone como ejemplo que el programa de los fines de semana No es un día cualquiera, de Pepa Fernández, tiene previsto emitir el próximo sábado 14 de octubre desde Ávila con motivo del inicio del “año jubilar Teresiano”.

“Anteriormente lo ha hecho con el ”año jubilar Lebaniego“ o el de Caravaca”, apuntan y añaden que ante el argumento de que son eventos de “interés general”, “una simple referencia a la noticia en sí, por parte de la emisora cumpliría con creces con el objetivo de informar”.

Europa Laica cita también al programa Esto me suena, de José Antonio García. La organización denuncia “que cada lunes, poco antes de las 17 h. y entreverado con una sección sobre música heavy metal que presenta un sacerdote experto en la materia, lleva a cabo una glosa del sermón dominical católico, hecho que entendemos improcedente e impropia para un medio de comunicación que se nutre de los impuestos de toda la ciudadanía, religiosa o no”.

La asociación insta a los partidos a no olvidar “el compromiso asumido de manera abrumadora por el Congreso el pasado 22 de junio, de llevar a cabo la renovación del Consejo de Administración de RTVE y de su presidente en un plazo de tres meses, próximo a agotarse”.

Aseguran que son “conscientes” de que el cambio en la ley “no asegura” que la televisión pública “deje de mostrar un perfil confesional o pluri-confesional”, pero creen que el cambio permitirá insistir en la necesidad de aplicar los “principios constitucionales de laicidad, es decir de neutralidad, en este ámbito de comunicación pública”.

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