Sara Escudero se estrenó en El Intermedio con una reflexión: “¿De verdad necesitamos tanta ropa?”
La nueva temporada de El Intermedio ha llegado cargada de nuevos fichajes que se están presentando esta semana. Al de Andrea Ropero se le suma el de Sara Escudero que, en la entrega de hoy, ha estrenado sección.
“A veces el ritmo de la actualidad nos impide tratar noticias con la profundidad que merecen” adelantaba el Gran Wyoming para dar paso a “Reality shock” el apartado en el que la cómica presentará sus reportajes.
El primero ha estado centrado en los preocupantes datos de la industria textil, la segunda más contaminante del mundo.
“La segunda industria más contaminante del mundo”
Escudero se ha estrenado en el programa de laSexta con un reportaje “tan intenso como divertido” sobre la industria textil. En él ha dado cifras dramáticas sobre lo que nos gastamos en ropa y lo que conlleva esa fiebre por no repetir conjunto.
“El modelo de industria textil tal y como lo conocemos empezó en 1970 con un fenómeno que llamaron deslocalización. Las grandes multinacionales para vender más ropa pensaron en trasladar los centros de producción a países sin derechos laborales, con salarios más bajos y sin sindicatos” empezó explicando.
Algo que ha desembocado en que las “grandes marcas de ropa dupliquen la fabricación de prendas. Amasar fortunas como la de Amancio Ortega, pero rebajando al máximo a sus trabajadores”.
La nueva colaboradora añadía que gracias a bajar tanto el precio de la ropa ahora podemos tener todo tipo de pantalones pero a costa de “aumentar residuos textiles que acaban en vertederos y que no genera un sistema sostenible, porque convierte a la industria textil en la segunda más contaminante después de la del petróleo”.
No solo eso, subrayó, sino que entre la mano de obra hay niñas menores, con lugares de trabajo precarios y accidentes laborales casi diarios. Para acabar el reportaje con la siguiente reflexión: “Cada vez que vayamos a comprar deberíamos recordar quiénes están detrás de esas prendas y sobre todo preguntarnos si de verdad necesitamos tanta ropa”.
