¿Se ha colado un topo en el 'Factor X' británico? La concursante más atípica

Por PérfidaTVPérfidaTV

El Factor X británico cuenta este año con un peculiar personaje del que nadie saber qué pensar. Se hace llamar Honey G y es una rapera atípica, pero sobre todo tremendamente mala.

Honey G comenzó siendo el elemento cómico de todos los años, el personaje puesto para la broma, el “color” del espectáculo. Pero algo no encaja. Anna Georgette Gilford, o sea Honey, es en su vida diaria una emprendedora que dirige con éxito su propia empresa de selección de personal. A sus 35 años ha destacado además como deportista, lo que hace difícil imaginar que una persona así pueda tomarse en serio a ella misma, sobre todo cuando son tan evidentes sus carencias como artista.

La teoría del topo infiltrado

Esto alarmó a muchos, que vieron en ella a una “infiltrada” que lo que pretendía era poner en evidencia el concurso. Se creía que las carcajadas que provocaba las acabaría dando ella cuando descubriera su verdadera identidad (siempre va con gorra y gafas oscuras) y contara lo fácil que le había resultado colarse en un megaformato como 'X Factor'. Pero esto, tras cuatro semanas de concurso, sigue sin suceder.

La teoría del topo se desinfla por momentos porque precisamente los que deberían desconfiar, Cowell y su gente, lejos de hacerlo, muestran públicamente, cada semana, cómo van en aumento sus simpatías hacia ella; hasta el punto de haber levantado envidias entre los otros participantes que aseguran que la rapera recibe trato preferencial: camerino individual y ayudantes de producción a su servicio.

La falta de una verdadera estrella en esta edición parece haber hecho a los responsables del formato apostar por el carisma de Honey; y el público se ha sumado a ello. Al menos de momento. A ver cuánto dura. A fin de cuentas al espectador de un talent le gusta que triunfe precisamente el talento, y Honey no lo tiene en la música.