Adriana Abenia: “Creo que gusto al público porque soy natural”
Adriana Abenia es una de las reporteras revelación de esta temporada. Aunque esta modelo licenciada en Turismo se inició en programas de Aragón TV y dio el salto a la televisión nacional con Telecinco y Fresa Ácida, los espectadores se han familiarizado con ella al ser “la reportera más loca y atrevida de Sálvame”.
Este verano, Abenia está entrevistando a numerosos políticos y siguiendo la agenda de la Familia Real. Retada siempre por Jorge Javier Vázquez y ahora por Paz Padilla, la maña ha llegado a preguntarle a Doña Letizia si le hace 'croqueticas' al Príncipe.
El nuevo fichaje de Sálvame nos ha hablado en esta entrevista, entre otros muchos temas, sobre su relación con Belén Esteban, las críticas que ha recibido desde el periódico 'ABC' o sobre cómo se ha hecho amiga de La Princesa de Asturias.
“Creo que gusto al público porque soy natural” y, además, “no soy tan ingenua como aparento en Sálvame”, comenta a Vertele.com siempre entre risas.
¿Qué le parece que gran parte de la audiencia de “Sálvame” la reconozca por “Adriana, la reportera más loca, maja, atrevida y deslenguada”?
¡Estoy encantada! (Risas) No me importa que me reconozcan así, aunque también hay algo de esta reportera que es un poco personaje. Además, el hecho de entrar en Fresa Ácida fue una gran oportunidad para mi carrera y poder acabar aquí. Debo agradecer a la 'Fábrica de la tele' su confianza total. Me ha permitido ser parte de un programa que, te guste o no, llega a la gente y tiene mucha repercusión. Los buenos datos de audiencia así lo demuestran.
¿Pero realmente está tan loca como aparenta en el programa?
(Risas) Como he comentado antes, 'La Adriana de Sálvame' se acerca más a un personaje. Es verdad que tiene mucho que ver conmigo, sobre todo en la espontaneidad y en la alegría, pero la ingenuidad que muestro ante la cámara es un añadido.
Entonces, ¿cómo es Adriana Abenia, la verdadera?
Debajo de todo maquillaje está el sentido común. Soy una persona bastante normal, de verdad. Obviamente en televisión, todo se exagera. Lo que suelo hacer en el programa es acentuar mi lado más loco e ingenuo. De esta manera, consigo destacar más y puedo acercarme a los entrevistados de una manera diferente al resto. Además, en el fondo, veo a Sálvame como un show y, por tanto, hay que divertir a la audiencia. Quiero despertar algo en la gente.
Es la reportera revelación, ¿se considera así usted también?
¿Revelación? (Risas) No sé cómo considerarme... Tampoco puedo saber qué repercusión estoy teniendo o no, porque fuera del trabajo no suelo ver mucha televisión. Realmente en el programa intento dar lo mejor de mí, hacer mi trabajo correctamente. Estar en Sálvame es como ir un centro de estudios, es como si estuviera haciendo un máster (Risas).
¿Cuál que cree que es la clave de su éxito con el público?
Creo que no soy una profesional al uso. Propongo una opción diferente a la hora de presentar o hacer reportajes. Apuesto por la naturalidad y supongo que ésa es la razón por la que puedo gustar a la gente. Además, no me gusta la manera que presentan otros compañeros, que se encorsetan más. Lo mejor es sentirse lo más cómodo posible para así contagiar la sensación a los espectadores.
¿Cómo se siente al formar parte de “Sálvame”?
Estoy muy contenta por la confianza que todo el mundo ha puesto en mí. En Fresa Ácida me movía en un papel muy fijo que no tenía nada que ver conmigo y, en los programas de Aragón TV, tengo que aparecer un poco más seria. En cambio, en Sálvame, no soy nada comedida y me dejan hacer con total libertad. Estoy comodísima.
Por otro lado, el programa te puede gustar o no, pero los resultados de audiencia lo dicen todo. A mí me gusta Sálvame porque el plató me recuerda a una charla de 'abuelicas cotillas' que discuten en la plaza del pueblo y hablan del todo el mundo. En el fondo, todos somos un poco así, ¿no? (Risas)
¿Qué tal es su relación con Jorge Javier Vázquez?
Fabulosa desde el primer día. He recibido mucho apoyo de todo el equipo y especialmente de Jorge Javier que me hace sentir como en casa. Además, me encanta la manera que saca la polémica entre nosotros dos, dándome mucho más juego. En general, es una persona que consigue sacar lo mejor de cada uno. Cada día se supera más en el programa.
¿Y su trato con Belén Esteban?
Buena. Yo siempre voy acelerada porque me toca en entrar en plató recién llegada de un reportaje y casi no me da tiempo a estar en maquillaje o en peluquería. Siempre entro con unos pelos al directo… (Risas) Así que cuando tengo “esos momentos de retoque” puedo charlar con ella. Belén me ha tratado como una más del equipo. Es una mujer que siempre es cordial con todo el mundo y conmigo siempre se ha portado genial desde el primer día.
Si Belén es 'La Princesa del Pueblo'. ¿Cómo quieren que la llamen a usted?
La reportera más dicharachera de Sálvame (Risas).
¿Cómo se prepara a la hora de plantar cara a políticos o la familia Real? ¿Tiene apoyo de un equipo de redacción?
Lo único que hago cuando me toca entrevistar a políticos y Casa Real es leer prensa y ver informativos todo los días para estar al tanto de las noticias y de la agenda de actualidad. ¿El resto? Soy una mujer con mucha imaginación. Me dan libertad total, no tengo redactor y nunca me hago un guión. Voy a verlas venir, a lo que pueda pasar. Llego, miro y me monto mi película. El resultado está ahí. No sé si lo hago bien o mal, porque nadie me ha dicho nada.
Además, el cámara que me acompaña es genial. Tenemos muy buen rollo. Se imagina cómo voy a actuar y el pobre siempre me tiene que perseguir corriendo (Risas). Y, bueno, siempre tengo la suerte de que Jorge Javier me da mucho juego. Es el mejor director de orquesta.
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¿Qué puede contar de la anécdota de las 'croqueticas' con Doña Letizia?
Justamente ocurrió en un día atípico. El Príncipe no estaba y sólo tenía que estar atenta a la Princesa. Soy de las que piensan que ellos son una pareja de lo más normal y con la pregunta quería demostrarlo. Letizia es muy cercana, amable, respetuosa, simpática... ¡Ella y Felipe hacen lo mismo que nosotros!
¿Cómo ha conseguido hacerse su “am iga”?
El primer día que tocó seguir a los Príncipes, me dijeron desde el programa que iba a ser imposible que me acercara a ellos por todo el tema del Protocolo. Pero, como yo no sabía ni entendía cómo iba todo esto, allí me planté y me dirigí a ella. ¡Y Doña Letizia me contestó! Desde entonces, cuando la Princesa me ve, siempre intenta venir a hablar conmigo. ¡Es un persona tan normal y encantadora! No obstante, he llegado a pensar que, como me siga acercando tanto a la Familia Real, me van a poner una orden alejamiento (Risas).
Se llegó a rumorear que podría haber sido 'La Letizia de Telecinco'. ¿Hizo el casting para la serie?
No, yo no hice casting y no he sabido nunca nada del proyecto. Amaia es estupenda y creo que habrá bordado el papel sin lugar a dudas. No obstante, mucha gente me comenta en mi Facebook que debería haber tenido un cameo en la 'tv-movie' como reportera entrevistando a “Letizia”. Muchos de mis fans me dicen, “Adriana, sin tí, la serie está coja”; y otros, “¡Te pareces mucho a la Princesa!”. Pero no lo veo yo tan claro… (Risas). De verdad, nunca he hecho el casting. Es cierto que soy ambiciosa y me atrevo con todo, pero tiempo al tiempo.
Ha sorprendido por sus actos espontáneos. Su “destape” en las playas de Girona fue muy comentado, ¿estaba pactado?
No, no estaba pactado. ¡Jorge Javier no tenía ni idea! Se suponía que en Girona íbamos a encontrarnos con los Príncipes, pero no pudimos, porque sólo vimos pasar el coche real de largo. Así que el cámara y yo nos fuimos a la playa “de vacaciones” todo el día. Cuando llegó el directo, le dije a mi compañero que me siguiera el rollo. Me imaginaba que Jorge Javier me pediría algo parecido, por lo que me quité la parte de arriba del bikini siempre pensando que no se me viera nada. Es más, cuando acabó la conexión, no salí del agua hasta que unas niñas me pasaron mi bikini. ¡Qué vergüenza! (Risas)
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¿Le han ofrecido ya un posado en “Interviú”?
Nunca haré una portada de Interviú. Nunca. No me gusta que se me vea el pecho.
Ha sido manteada por el público, ha peregrinado hasta Santiago de Compostela, se ha duchado en directo… ¿Qué será lo siguiente?
Lo que venga. Nada es premeditado y lo hacemos sobre la marcha. ¡Ni yo misma sé qué voy a hacer hoy! (Risas).Se atreve con casi todos los retos de Jorge Javier o Paz pero, ¿hay algo que no podría hacer delante de la cámara?
Tengo mis límites. Nunca haré nada que vaya contra toda ética o algo contario a mi forma de pensar. Y como te he comentado antes, nunca enseñaría el pecho ni haría un desnudo en prensa o en televisión.
Pasó vergüenza cuando se le cayó el vestido en “Sálvame”...
(Suspira) Fue uno de esos momentos “¡Tierra, trágame!”. Estábamos haciendo el bobo y me dí cuenta de que se me estaba cayendo el vestido y me tiré al suelo gritando que no me iba a levantar de ahí. No obstante, nadie me habría visto nada porque llevaba un sujetador de silicona de color carne antiglamour y antilujuria. (Risas)
¿Se enfada mucho con Jorge Javier por su piques?
Me gusta que se meta conmigo. Me da juego para que yo haga mi personaje. Así conseguimos divertir a la gente. Nuestra relación se basa en el respeto mutuo y es la clave para que yo me sienta a gusto.
De los personajes que ha entrevistado, ¿a quién le ha hecho más ilusión conocer?
Sí que es cierto que todo el revuelo de la Familia Real tiene mucho peso, pero el rollo de la política tampoco es un tema que me apasione demasiado. No obstante, si tengo que elegir a alguien, me declino por Esperanza Aguirre. Ella siempre tiene palabras para mí. Me ve en los actos, viene directa y es superamable conmigo en nuestras charlas. Sabe lo mediático que es Sálvame y siempre entra a trapo. Juega muy bien sus cartas.
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¿A qué famoso le gustaría entrevistar? ¿Y a cuál no?
En política, a Obama, pero está difícil… (Risas). Por otro lado, soy de esas personas que piensan que todo el mundo tiene algo interesante que contar. Aunque, a un “friki”, nunca. Me aburren.
¿Ha recibido disculpas por las acusaciones de Pedro Sardina en “ABC”?
No he recibido ninguna disculpa y tampoco hace falta. Como ya comenté en Sálvame la semana pasada, él tiene total libertad de opinión y lo respeto. Ese artículo fue fruto del aburrimiento. Estoy segura de que él no me conoce y ni creo que me haya visto en el programa. En mis reportajes siempre me baso en el respeto y prima la educación por encima de todo. Quiero que sepa todo el mundo que el trato con la Casa Real es muy respetuoso y ellos siempre nos han respondido con las mejores palabras y nos han tratado correctamente.
¿Le dolió que la calificara como 'barbie' y 'bufona'?
Si estás en televisión, estás expuesta a que hablen de tí. No me afectó para nada y que me llamara “bufona” es falso. No nos reímos de la Casa Real, es más, me quito el sombrero por la cordial relación que hemos entablado. Y sobre el concepto “barbie”, es arcaico que por tu apariencia física te juzguen. Él ya se calificó con sus palabras. No pretendo gustar a todo el mundo.
Tiene estudios en otras materias, pero al final ha terminado en televisión. ¿Era realmente su objetivo?
Tengo la diplomatura de Turismo, he cursado estudios de arte dramático y tengo trayectoria como modelo. También empecé la carrera de Derecho, pero me di cuenta de que estar en un despacho toda mi vida no iba a ser lo mío. No me veía en plan Ally McBeal (Risas). Mi aventura en televisión surgió a raíz de varios programas en Aragón TV, pero yo no tenía pensado nada de esto. Entré poco a poco y decidí continuar. Ahora trabajo en lo que me gusta y soy feliz, me siento llena con mi labor en Sálvame.
“Fresa Ácida”, con Cinta Méndez y Carmen Alcayde, fue su primera aparición en la televisión a nivel nacional...
Fue toda una oportunidad y aprendí mucho pero a marchas forzadas. Para mí, fue todo un reto, porque yo no sabía nada de tele. De Fresa Ácida estaré agradecida toda mi vida. Además, fue mi trampolín para acabar en Sálvame.
¿Qué fue lo que falló de este programa?
La televisión es caprichosa, hay programas que uno piensa que van a funcionar y se terminan cayendo. Realmente, no sé qué fue lo que pasó,
pero, a pesar de la cancelación, mi estancia en Fresa Ácida fue una experiencia muy positiva.
Su personaje era muy distinto al que realiza ahora...
Mi personaje de Fresa Ácida tuvo bastante eco y polémica, pero ese papel no tiene nada que ver conmigo. Lo desempeñé como si fuera una actriz. Quizás en Sálvame soy más yo pero llevada totalmente al extremo. De verdad, puedo tener un toque de locura pero no soy tan ingenua como aparento en pantalla.
“Dándolo todo” (Aragón TV) está teniendo éxito. ¿Terminará dejando la televisión autonómica?
Dándolo todo fue un programa que se grabó hace tiempo para quince emisiones. Lo hicimos con mucha ilusión y hemos tenido la recompensa de la audiencia. No sé si seguiremos adelante, no estaba previsto para Aragón TV.
¿En qué se siente más cómoda: de reportera en la calle o en un plató?
En la calle se aprende mucho, pero me gustaría compatibilizar el plató con los reportajes. Un programa es algo más sencillo y un reportaje te reta, es un trabajo mucho más duro. Quiero probar las dos cosas, a ver qué me gusta más.
¿Probará suerte en otros proyectos o seguirá en “Sálvame” una larga temporada?
Podría compatibilizar otros proyectos, nunca descarto nada. No obstante, ahora me quiero centrar en Sálvame y hacerlo lo mejor posible. Tiempo al tiempo.
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