Kira Miró: “Grabar Gominolas es un cachondeo continuo”

Tras dejar su labor como presentadora del programa Cuatrosfera, a Kirá Miró podremos verla próximamente en Gominolas, una ácida comedia producida por Globomedia para Cuatro que protagonizará junto a Fernando Tejero y Arturo Valls.

Nacho García-Velilla, responsable de éxitos como Aída y 7 Vidas, será el encargado de dirigir un reparto que se completa con Lluís Homar, Mariona Ribas, Fernando Otero, Fernando Albizu, Gorka Lasaosa y Borja Sicilia.

Gominolas narra la historia de un grupo de treintañeros que en su infancia alcanzaron un gran éxito con su grupo musical y, desbordados por la fama, se reencuentran veinte años después como cuatro grandes perdedores que intentarán rehacer sus vidas.

¿Cómo es su personaje en la serie?

Una mujer superficial, vanidosa y presumida cuyo sueño era casarse con un millonario. Sin embargo, a pesar de haberlo conseguido, ha acabado siendo una infeliz porque tiene un marido sospechosamente amanerado que ni si quiera la toca. Vive en contradicción entre el lujo y el cariño que le falta hasta que aparece Bruno (Arturo Valls).

Pero Bruno no es precisamente un angelito...

-No, ni mucho menos, eso también le hace sufrir. Susana acaba enganchándose a Bruno y él no es hombre de una sola chica.

¿Qué le atrajo de la serie?

Todo, es la primera vez que se lleva a la pantalla una historia como ésta y la dirección de Nacho García-Velilla es siempre una garantía. Compartir reparto con profesionales como Fernando Tejero, Lluís Homar o Arturo Valls es todo un lujo. La serie tiene mucha calidad, la historia es nueva y los guiones son ácidos y divertidos... Lo tiene todo.

¿Qué tal se encuentra rodeada de tanto chico en los rodajes?

Esto es un cachondeo continuo, Fernanado y Arturo están todo el día de broma. Nos estamos enfrentando a muchísimos ataques de risa, especialmente por nuestro vestuario, pero también trabajamos mucho.

¿Qué tal se le da eso de cantar y bailar?

Bueno, cantar no canto, sólo le echo morro, pero bailar me encanta.

¿Se pasa mucha vergüenza vestida así?

Al principio sí, pero en seguida te metes en el papel y lo vives.

¿Era seguidora de alguno de los grupos infantiles de los ochenta?

Onda Vaselina me encantaba, todavía con dieciséis años fui a verles a uno de sus conciertos.

¿Tenía ganas de enfrentarse al reto de protagonizar una serie en televisión?

Unas ganas locas. Haciendo Cuatroesfera aprendí mucho y tenía mucha química con mis compañeros, pero tenía ganas de afrontar un personaje de ficción y defenderlo. La televisión es una gran escuela de interpretación y hasta ahora sólo había hecho papeles secundarios.

¿Va a compaginar la serie con algún otro proyecto?

El diecinueve de octubre estreno Quiéreme, un peliculón de Veda do Campo en el que comparto reparto con Ariadna Gil. Después, nada más, quiero centrarme en la serie, al menos de momento.

¿Cómo se ve dentro de diez años?

Trabajando como actriz, con mi familia y mi hombre a mi lado, y mis niños... Sobre todo me gustaría eso: tener mi casita, mi hogar, mi centro bien puesto y seguir trabajando.

Mucha gente la define como una sex symbol, ¿cómo vive eses título?

Con naturalidad, no me pongo una etiqueta. El que quiera que me ponga la etiqueta, pero no le doy mayor importancia. No hay que creerse ni más ni menos.

Cuando era una niña, ¿imaginaba que iba a estar donde está ahora?

De pequeña bailaba mucho Madonna, me pintaba... Pero soy super tímida, a muerte. De chiquitita quería ser peluquera, veterinaria, profesora de equitación. Cuando terminé C.O.U. me pregunté qué hacer con mi vida, entonces vi a mi hermano que estaba estudiando interpretación, decidí probar y descubrí que era mi pasión. Ya no me veo haciendo otra cosa.