El Mundial vale 100 millones de euros
Por su interés reproducimos el siguiente artículo de Manuel de Luna y Xavier Hoste que publica hoy El Periódico: La venta de los derechos de televisión del Mundial de fútbol de Alemania puede reportar a Telefónica unos ingresos de unos 100 millones de euros (16.639 millones de pesetas). Ésta es la cantidad que ha ofrecido, en su última y agresiva oferta, La Sexta, nueva cadena en la que participan la compañía mexicana Televisa (40%) y el Grupo Gamp (60%), en el que están integrados productoras como Globomedia, Mediapro y El Terrat. La Sexta, que necesita un bombazo para darse a conocer en el duro mercado audiovisual español, es la mejor situada para hacerse con los derechos. El problema es su cobertura. Aunque iniciará sus emisiones a finales de marzo o principios de abril y ya estará en funcionamiento con el Mundial, es probable que para entonces llegue a poco más del 70% del territorio español. Para no dejar sin Mundial a una parte de la audiencia, podría compartir los derechos con otra cadena, como Sogecable (Cuatro y Digital +), cuya oferta también roza los 100 millones de euros, según fuentes del sector, y que es más del doble de los 45 millones que A-3 desembolsó por el Mundial de Corea y Japón del 2002.
OFERTA
GLOBAL La oferta económica que La Sexta ha hecho a Telefónica Contenidos (propietaria de los derechos y que debe decidirse en unos 15 días) se enmarca en la pretensión de que el evento deportivo de más seguimiento sirva de empuje para una rápida antenización de los hogares. Pero se orienta también para exprimir el Mundial, tanto en abierto como en PPV. La intención de Telefónica es vender los derechos en paquetes para sacar el máximo provecho y no tener problemas con la Comisión Europea, que se empeña en romper el monopolio de los derechos del fútbol. “Nuestra oferta es por todo el paquete del Mundial”, revelaron en La Sexta, que dejan, sin embargo, una puerta abierta a la posibilidad de compartir derechos si, llegado el caso, la interpretación legal de la cesión obliga a evitar el monopolio. En la cadena que preside Emilio Aragón consideran que su oferta “es la mejor”. La gran duda que marca la decisión de Telefónica es qué pasará con los partidos de España, obligados a ser emitidos en abierto al ser declarados de interés general. En la puja con La Sexta y Cuatro, la oferta de TVE resulta sensiblemente menor, rondando los 75 millones de euros. La cadena estatal se enfrenta así a la posibilidad de perder los derechos de un Mundial con horarios de máxima audiencia, no como el anterior Mundial del 2002.
“Mucho nos tememos que, al final, nos obligarán a recomprar el paquete de partidos de España por un precio muy superior”, apuntaron fuentes de TVE, descontentos con la decisión de Telefónica de solicitar una subida de la puja antes de anunciar la adjudicación, que ha incrementado un 15% las ofertas finales. Tele 5 y las teles autonómicas, también lejos de la oferta de La Sexta y Sogecable, deberán contentarse así con un resumen diario, “que es a lo que aspiramos”, reconoció un directivo de Televisió de Catalunya.
La rentabilidad del fútbol la intentó exprimir A-3, al convertirse, en el Mundial del 2002, en la primera cadena que rompía la dinámica de que fuera TVE quien emitiera los partidos de la selección española. Pese a realizar un balance positivo, los ingresos publicitarios estuvieron por debajo de lo esperado, con cinco millones de euros (831 millones de pesetas), y ha renunciado a la puja por este Mundial. El cálculo que se hace es que, como mucho, se pueden facturar en publicidad 30 o 35 millones de euros, menos de la mitad de lo que se pagará. Eso sí, lo que se pierde en dinero se gana en prestigio e imagen de marca. Pero, ¿a quién le interesa?
El panorama del fútbol televisado está en plena cambio, por la presión de la CE, el relanzamiento del cable y la televisión por banda ancha y el desarrollo del mercado de internet y los móviles. Infront, la empresa de la FIFA que comercializa los derechos del Mundial, ya sostiene que el 2006 “será el año de la cobertura por nuevos medios”. De hecho, Telefónica se reserva los derechos para América Latina.
