Crítica Vertele

Así llegan hoy 'Alaska y Mario' a MTV, más locos y divertidos que nunca

Así llegan hoy 'Alaska y Mario' a MTV, más locos y divertidos que nunca

Si quieren despedir el fin de semana con una buena dosis de carcajadas, 'Alaska y Mario' serán su opción esta noche en el mando. La cuarta temporada del reality de MTV afronta desde hoy su apuesta por el pago, y Vertele ya pudo ver su primera entrega en el FesTVal de Vitoria, además de su rueda de presentación.

Vaquerizo y su hermana, Alaska, Juanpe, Topacio Fresh y otros tantos rostros conocidos del programa trasladaron su locura primero a las calles y después al Teatro Principal de la localidad alavesa, dando paso a la proyección del primer capítulo que dejó al público con agujetas en las mejillas de tanto reir.

Una libertad temática que da alas a la nueva temporada

A diferencia de otros años, con la re-boda de ambos o el cumpleaños de Alaska, en esta ocasión nada más que nos ofrecerán “su vida”. Nada más, y nada menos. El propio Vaquerizo ya adelantó durante la rueda de presentación que “no esperéis nada nuevo, no somos American Horror Story y no hemos fichado a Lady Gaga ni Naomi Campbell. Sólo es nuestra vida”. Pero es que eso es mucho decir.

Precisamente esta libertad de temática, sin ceñirse a un punto final importante de la temporada como la boda o el cumpleaños, permite que El Terrat y MTV nos ofrezcan una desternillante sucesión de los momentos más divertidos de la semana de la pareja y su peculiar “familia”.

“Rodamos muchas horas, y lo que véis es una selección de los 'highlights' de nuestra semana”, explicó Alaska. Y lo cierto es que no hay mejor definición para explicar los 40 minutos de risas casi sin pausas con el que arrancan su nueva temporada.

Lujosos invitados en el estreno de hoy, que elevan aún más las risas

Aunque es mejor verlo que leerlo, y sabiendo que con su paso al pago muchos lo tendrán más difícil, un programa que junta a una Tamara Falcó más metida en su personaje que nunca al no entender el permiso que Alaska otorga a Mario para darse “besos sociales”, una concienzuda explicación sobre por qué no puede haber androides cardados y la loca visita a Alejandro Amenábar y su novio antes de su boda configuran una mezcla que no permite parar de reir.

Si a lo anterior le sumamos a los grandes protagonistas del capítulo, la cerdita Mari Carmen y su genial dueño Juanpa -que en un momento ejemplifica la brutal sinceridad de este formato con una broma escatológica (sabrán a cuál nos referimos)-, no queda más que desear un exitoso paso de 'Alaska y Mario' al pago. Aunque solo sea porque las risas y el entretenimiento sigan muy vivos en nuestra televisión.

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