Lista completa Eurovisión

Diez millones y medio de personas siguieron las votaciones de Eurovisión

La fuerza televisiva del Festival es impresionante: Convocó delante de la pantalla a 8.790.000 espectadores, con un 58,4% de cuota. Las votaciones, que duraron prácticamente una hora, fueron seguidas por el 65,8% de la audiencia española, un total de 10.588.000 espectadores, colocándose así como la emisión más seguida de la temporada. Los doce minutos finales, presentados por Carlos Lozano, de Operación Eurovisión, aguantaron con 5.986.000 espectadores y un 46% de share. El programa previo de apoyo a Beth, desde las seis de la tarde hasta las ocho y media de la noche, fue seguido por 2.621.000 televidentes y un 30,1% de cuota de pantalla. El minuto de oro de la noche llegó a las 00.01 horas con 12.842.000 espectadores y una cuota del 82,3%, momento en el que Eslovenia otorgaba sus votos. Por otra parte, en Catalunya, comunidad natal de Beth, la gala fue seguida por el 63,3% de la audiencia y las votaciones por el 70,4%. Con respecto al Festival de Eurovisión celebrado el año pasado, en el que Rosa obtuvo el séptimo puesto, la gala (80,4% y 12.755.000 espectadores) del certamen anotó 22 puntos menos de share, mientras que las votaciones (85,2% de share y 14.380.000) perdieron 19,4 puntos. Con motivo del Festival y del partido de Liga Valencia-Real Madrid en la FORTA, que fue seguido por más de 4 millones de espectadores, Salsa Rosa en Telecinco obtuvo su peor dato de la temporada, un 16,2% y 1.957.000 espectadores, mientras que la película de Antena 3, Brubaker, se quedó con un 8,3% y 1.187.000 seguidores.

En el cómputo global por cadenas, TVE-1 ganó el sábado con un 35% de media, y dejó a Telecinco con un 17,4% y a Antena 3 con un 16,9%. Tras ellas, las Autonómicas cosecharon un 16,4%, Otras un 7,2%, La 2 un 5,6% y Canal Plus un 1,4%. La historia del 48º Festival Turquía obtuvo un total de 167 puntos, mientras Bélgica, que disputó duramente la victoria, se quedó con 165; las polémicas t.A.T.u., de Rusia, rozaron el éxito con 164 puntos. A continuación se clasificaron Noruega, Suecia, Austria y Polonia, y en octava posición la representante española, Beth, con 81 puntos.

Turquía será el país organizador de la 49 edición del Festival, a celebrar en 2004. Sus representantes no sólo se llevan el Premio, sino también la polémica a su país al cantar en inglés, una lengua que no forma parte del patrimonio cultural turco. “Este triunfo no tiene por qué ayudar a la integración de Turquía a la Unión Europea. Eurovisión es sólo música”, aclaró la cantante Sertab Erener en la rueda de prensa posterior. Su país vendió una imagen aperturista y moderna con su rap oriental. Del grupo destaquemos especialmente la coreografía, recreada en la sensualidad y la estética de “Las mil y una noches”, que fue una de las mejores de la noche. Bélgica quedó en segunda posición con sabor español, puesto que una de las cantantes solistas del grupo “Urban Trad”, Verónica Codesal, es gallega. Esta mujer llena de ternura no se cortó un pelo al decir: “Gracias a España por los doce puntos que nos han dado”. Los belgas recibieron el premio al atrevimiento porque cantaron una canción de neo folk, “Sanomi”, en onda Hevia o Carlos Núñez y dicha en una lengua inventada, que representó lo menos festivalero que oyó en Riga.

La sorpresa de la noche fue la pésima acogida a la canción del Reino Unido, “Cry Baby”, interpretada por Jemini, que obtuvo 0 puntos. Tres golpes de efecto iniciales

La Gala, producida por la televisión letona, se desarrolló sin sobresaltos y con una buena factura, exceptuando la realización, que adoleció de planos cortos y medios y que estuvo sobrada de planos generales, que impedían ver detalles de las actuaciones. A destacar tres golpes de efecto iniciales: el saludo en directo de los astronautas americano y ruso que están en estos momentos en misión espacial en una estación que está orbitando sobre la tierra; la petición de Elton John para ayudar a niños enfermos y la presencia de la primera ganadora de un Festival de Eurovisión, una cantante chipriota, que se llevó el primer premio en 1956.

El “freak” Alf Poier El intérprete austriaco Alf Poier quedó sorprendentemente en un quinto puesto. ¿Fue el auténtico triunfador de la noche? Interpretó un tema que se acercaba a la estética de “Las vacas del pueblo se han escapao” e hizo méritos para entrar inmediatamente en “Hotel Glam”. Parece que sus compatriotas estaban muy cabreados por la elección de la canción, pero no nos extrañaría, tal como está la tele, que Alf Poier se convierta inmediatamente en tertuliano de “Crónicas Marcianas” y que se le invite a “Tómbola”. Su canción incluía una orquesta zoológica y dos surrealistas coristas/go-gós que parecían escogidas por Gurruchaga en sus mejores tiempos. Su tema, 'El hombre es la medida de todas las cosas', se reclamaba hijo de la tradición del punk-rock bufo a lo Toy Dolls, así que no hay que sorprenderse por su buena clasificación.

Impagable Uribarri e Igartiburu

Las perlas de José Luis Uribarri fueron numerosas en la Gala de ayer. No nos dejó escuchar las votaciones con tranquilidad, porque no paraba de realizar comentarios tópicos, pero ha jugado permanentemente a la confusión. Empezó refiriéndose a la televisión eslovena cuando la Gala era producida por la televisión letona. Cuando intervenía el representante islandés, nos lo ha presentado como austríaco, asegurando que hablaba desde Viena, cuando lo hacía desde Reikjavik. En otra ocasión le daban diez puntos a Polonia (Polland, en inglés) y ha asegurado que iban a Holanda (en realidad, Nederland, no Holland). Mientras Portugal votaba, los comentarios de Uribarri aseguraban: “No hay manera, no nos votan, a pesar de ser nuestros vecinos”. Han acabado dándole a España 12 puntos. De todas maneras, de vez en cuando acertaba la tendencia de las votaciones, lo cual no parece un mérito extraordinario después de mil años comentando los Festivales. Es nuestro Alf Poier particular.

Cuando acabó el Festival fue incapaz de realizar una recopilación de votos y de recordar la clasificación de los distintos países, porque aseguró “que le habían retirado las votaciones de la pantalla”, con lo cual España se quedó sin enterarse de la definitiva octava posición de Beth. Le quedó tiempo, sin embargo, para citar unas palabras de su jefe inmediato, Jordi Bosch: “No tenemos nada que reprochar a nuestros muchachos” (a Beth y compañía, aunque a los coros habría que tirarle de las orejas)

Tampoco tuvo precio el patinazo de Anne Igartiburu, que solo tenía que cantar las votaciones recogidas vía telefónica -nos sigue quedando mosqueo con los votos y la forma de recogerlos- y se equivocó al intentar dar nueve puntos -que no existían en las normas- a un país. Junto con la representante de la televisión de Bosnia Herzegovina, le damos el premio al despiste.

Beth, correcta

¿Por qué “los favoritos” a la victoria acaban quedando octavos? O se equivocan los adivinos de pega, o se equivoca el público. Más bien los primeros, creo. ¿Por qué tanto triunfalismo? Resulta que el duelo era entre Beth y t.A.T.u., pero mientras que las rusas se han quedado en un honroso tercer puesto, rozando las mieles del triunfo, con auténticas posibilidades de ganar, Beth se ha descolgado del liderazgo desde los primeros momentos.

Beth ha hecho un trabajo correcto, aunque nuestra sensación es que las coreografías y los coros no la han acompañado. “Dime”, a la vista de los otros 25 que hemos escuchado la noche del sábado, tampoco era para ganar. Los que se merecen un reconocimiento son sus colegas de Suria, en Barcelona, que demostraron ser los más guerreros de la noche. A Beth hay que felicitarla por ser “profeta en su tierra” y tener el apoyo de su gente.

Oído lo oído, no nos queda sensación de injusticia. Nos hubiera gustado que ganara Bélgica, porque han buscado la calidad en su pieza neofolk y el tema ha sonado bien. Sin embargo, queda claro, una vez más, que los europeos votan por vecindad, por afinidad, por simpatía, por cercanía. Con teléfono o sin teléfono, los nórdicos votan a los nórdicos; los eslavos a los eslavos y los del sur de Europa a los europeos del sur. Parece que las calidades de grupos y canciones están en un segundo plano.

La votación definitiva 1. Turquía 167 puntos 2. Bélgica 165 puntos 3. Rusia 164 puntos 4. Noruega 123 puntos 5. Suecia 107 puntos 6. Austria 101 puntos 7. Polonia 90 puntos 8. España 81 puntos 9. Islandia 81 puntos 10. Rumania 73 puntos 11. Irlanda 53 puntos 12. Alemania 53 puntos 13. Holanda 45 puntos 14. Ucrania 30 puntos 15. Croacia 29 puntos 16. Bosnia-Herzegovina 27 puntos 17. Grecia 25 puntos 18. Francia 19 puntos 19. Israel 17 puntos 20. Chipre 15 puntos 21. Estonia 14 puntos 22. Portugal 13 puntos 23. Eslovenia 7 puntos 24. Letonia 5 puntos 25. Malta 4 puntos 26. Reino Unido 0 puntos Países que pasan directamente al Festival de Eurovisión: Los 10 primeros más los cuatro grandes fijos: Turquía, Bélgica, Rusia, Noruega, Suecia, Austria, Polonia, España, Islandia, Rumanía, Irlanda, Alemania, Francia y Reino Unido .

Países que deberán ir a la semifinal del día antes del Festival: Holanda, Ucrania, Croacia, Bosnia, Grecia, Israel, Chipre, Estonia, Portugal, Eslovenia, Letonia, Malta.

Esta lista está sujeta a que estos países quieran participar o no. Añadir también que en la final también pueden participar los países “pasivos” cómo son Andorra, Albania, Yugoslavia, Bielorrusia, Finlandia, Suiza, Lituania, Macedonia, Dinamarca, etc.

Etiquetas
stats