Conectamos con la casa...

Después de un tiempo de sequía, ¿qué mejor para inaugurar 2012 en este blog que la review de uno de los momentos televisivos más importantes del año? Sí, hablo de la Gala 0 de 'Gran Hermano', donde año tras año tiene lugar una master class de narrativa audiovisual y se derrocha creatividad por doquier en los (ya) míticos “vídeos de presentación”, la razón por la que no desintonizo Telecinco de mi televisor. Aunque este año, para qué engañarnos, han sido un poco decepcionantes; austeros, en lo que a provocar vergüenza ajena se refiere. No así, la audiencia: más de 3,5 millones de espectadores, según informa hoy vertele!

Y es que durante las últimas semanas, se nos ha vendido esta nueva edición como un ejemplo de austeridad televisiva en tiempo de crisis económica y como un proyecto de vuelta a los orígenes del formato: autenticidad, compañerismo, humor... De lo primero, no acabo de convencerme después de ver el tinglado que han montado en Guadalix: un arca de Noé (no sabemos si será otra superstición de la Milá, convencida de que se cumplirá la profecia de los Mayas), un jacuzzi del tamaño de una piscina olímpica y una casa full equipe, que en nada recuerda a aquel escenario tan modesto de la primera edición, aunque aseguran que el presupuesto era más ajustado que otros años.

Parecidos razonables

En cuanto a la autenticidad y el anonimato de los concursantes, he de decir a su favor que es un alivio que este año no los hayan sacado de la cantera de 'Mujeres, Hombres y Viceversa'. Aunque mi idea de lo anónimo no se corresponde con la hija de una leyenda del heavy español o un ex futbolista del Milan. Conocidos o no, lo cierto es que creo adivinar en alguno de ellos ciertos roles que ya desempeñaron otros ex concursantes. ¿O no tiene Ochoa todas las posibilidades de ser la nueva Laura, y Rubén el nuevo “El Orejas”, un futurible cornudo?

Y no es que yo sea una mal pensada, es que la sombra de la guionización es muy alargada: de todas las combinaciones posibles, a la futurible novia le tocó compartir minihabitación con el futurible bombero y ganador del Pelo Pantene 2012 y se les pidió, literalmente, que se desnudaran, se pusieran el pijama y se metieran en la cama. Sí, cada uno en la suya. Pero hasta la Milá insinuó lo que todos pensábamos haciendo una alusión a Rubén, de Rubén y Chari, aquella parejita tan mona que cortaron después de pasar un tiempo juntos en Guadalix, acechados por “El Feroz”.

¿Y acaso no es Mary Joy la extranjera exótica que siempre cae (Conrad, Anup, Andalla, Natacha, Tatiana, Liz, paradme cuando queráis) además de la doble oficial de Usun Yoon? ¿Acaso no es Alessandro el nuevo Piero y Zulema la nueva Indhira? ¿Será que después de trece ediciones ya lo hemos visto todo o que ya no queda gente auténtica?

Un cura motero, un policía local (¡y en paro!), una persona que clasifica su vida en cajas, otra que desayuna lentejas, recoge #mondarinas y le pone banda sonora de Camela a su vida parecen, a priori, muy originales. Pero al final, todos se granhermanizarán: pasarán por el tamiz de la convivencia, sufrirán en sus carnes la magnificación y sacarán al gran hermano (estratega/discutidor/neutral/propenso al edredoning) que lleven dentro. Y es que Gran Hermano, es Gran Hermano, por mucha vuelta que intenten darle.

Las novedades de esta edición

En cuanto a lo realmente novedoso: ayer se desveló el secreto del “+1”: no sólo se trata de una manía de la presentadora, sino que a los doce concursantes habrá que sumarles uno nuevo cada semana. Habrá una plaza disponible para el que ofrezca más por ella en la subasta organizada en eBay (cuyos beneficios irán a parar a Cruz Roja). El precio de salida era de 12+1 céntimos y aquí viene lo más grande: en este momento, la puja alcanza los ¡10 millones de euros! No sabemos si será obra de algún bromista o de un lunático, pero lo cierto es que la apuesta, como explicó Mercedes, es vinculante. O sea, que si te niegas a pagar rastrean tu IP y echan tu puerta abajo a lo Corcuera (vale, esto último es cosecha propia).

La otra gran novedad será el compañerismo. O al menos, en la medida en que tratará de fomentarse: todos deberán comer juntos, y no se podrá separar ni guardar comida. En la organización intentan acabar con las polémicas y promover el buen rollo, aunque todos sabemos que muy pronto, esa casa tan bonita estará sucia, llena de moscas y de puñales volando por el aire. Eso sí, todo podremos conectar con la casa en directo y a cualquier hora del día, gracias a la plataforma mitele.es. De hecho, yo ya he podido ver a Zulema meditando con gafas de sol. Muy zen.

El detalle de la gala: descubrimos que no se les permite entrar en la casa ropa interior con marcas visibles. Es decir, que ya dan por hecho que la enseñarán, a pesar de las reticencias de Mercedes Milá a ver a los hombres pasearse en calzoncillos ante las cámaras. ¡Qué mujer más maniática!

Sobre este blog

Etiquetas
stats