Entrevista

Marc Sala y Silvia Intxaurrondo: “Ha llegado el momento de trabajar sin complejos lo que es la radiotelevisión pública”

“Vamos a contar la actualidad de forma rigurosa, entretenida, ágil y dinámica”. Tras hacerse oficial que estarán al frente, como codirectores y copresentadores, de La hora de La 1 en la nueva temporada televisiva de TVE, las voces de Silvia Intxaurrondo y Marc Sala suenan deseosas de arrancar esta nueva aventura.

Al otro lado del teléfono, juntos y con el altavoz del móvil activado, se presentan entre bromas como “un pack ya indivisible” y desde el primer momento dejan ver el buen ambiente que ha surgido entre ellos. Porque no se conocían de nada, como ellos mismos nos cuentan, pero no han tardado en conectar para preparar un matinal que estará siempre “pegado a la actualidad”, como inciden.

De 8:30 a 12:30 horas, de lunes a viernes, aspiran a que La hora de La 1 se convierta en un referente con dos marcas de identidad (la investigación y la conexión con la audiencia) y queriendo ir más allá del día a día con “contenidos que propongamos nosotros”. Y lo harán en solitario, puesto que sólo ellos estarán al frente del matinal, que suprimirá la parte de crónica social encabezada por Cristina Fernández. Un reto que afrontan sin miedo a las críticas, siempre que sean constructivas: “Estamos preparados para que la gente opine siempre, ¡si somos su tele!”.

A su labor, además, ahora se suma un nuevo “mandato” que recibe el servicio público de TVE: “Calmar un poco el ambiente, no estar cabreados”. Algo que para Marc Sala, por el contexto actual, “tendrían que incorporar en el estatuto de RTVE, por ley”. Para lograrlo, tienen claro el objetivo: “Aquí no hemos venido a gritar, no hacemos espectáculo de las ideas, sino que venimos a entender un poquito mejor lo que pasa”, y también la vía para lograrlo: “Vamos a sentar a periodistas y a expertos. Vamos a sentar a opiniones autorizadas, de tal manera que la espectacularización de la actualidad no se va a producir, se va a producir la profundización”.

Ambos demuestran tener muy presente la labor de servicio público que se le encomienda a TVE. Marc Sala, con mucha experiencia en la Corporación, asegura que este “es el momento en el que la radiotelevisión pública se va a encontrar consigo misma”, y pide valentía: “Quizás ha llegado el momento de trabajar sin complejos lo que es la radiotelevisión pública. Y creo que se puede conseguir”. Silvia Intxaurrondo, que regresa a TVE tras disparar las audiencias de los informativos de fin de semana de Telemadrid, también valora el cambio en la autonómica: “Sólo pediría que a mis compañeros en Telemadrid les dejen trabajar”. Para los políticos y sus partidos, que tan fuertemente criticaron a su antecesora Mónica López, sólo tienen un mensaje: “Que vean nuestro programa como un espectador”.

¿Cómo va a ser la nueva 'La hora de La 1'?

Marc Sala (M.S.): La hora de La 1 mantiene su nombre, mantiene en parte el plató, y estaremos de 8:30 a 12:30. Y a partir de ahí es un continuo de pasar cosas, muy vinculado a la actualidad y buscando también esas ganas que tenemos de cambiar un poco el enfoque, de contar las cosas y acercarnos a la gente. Obviamente habrá dos tramos, porque en el primer tramo será más político, y después entraremos en una fase en la que la actualidad se contará con más cercanía. Pero la unidad del programa vendrá marcada porque estamos Silvia y yo, porque es el mismo plató, porque es el mismo programa, y sobre todo por los contenidos. Queremos que sean contenidos que hagan que desde las 8:30 hasta las 12:30 los espectadores estén ahí, contenidos que propongamos nosotros, no tanto marcado por el día a día, que estará, y si hay que ir a Peñíscola porque se ha derrumbado un edificio ahí estaremos, obviamente. Pero a partir de aquí, en cuatro horas creemos que se pueden contar muchas cosas.

Seréis copresentadores, pero también codirectores. ¿Cómo vais a compaginar vuestros papeles, cómo os vamos a ver los espectadores?

Silvia Intxaurrondo (S.I.): Pues es la gran pregunta que nos está haciendo todo el mundo, y nosotros la verdad es que no lo vemos así. Nosotros coordinamos todos los contenidos, desde las 8:30 hasta las 12:30, es cierto que el programa lo va a arrancar Marc, que le va a tocar madrugar un poquito más, aunque sólo media hora con un tramo un poquito más político que tendrá su tertulia y su entrevista. Y luego, poco a poco, a partir de las 9:45-10:00, se virará a contenidos en los que a esa política se trasladen las cuestiones que nos interesan en el día a día, con dos marcas de identidad muy fuertes, que son la investigación y la conexión con la audiencia a través de las redes sociales y de un mecanismo de teléfono de WhatsApp, para que ellos nos cuenten su denuncia, lo que les interesa, y cómo no, sus grandes historias. Y nos vamos a reír también. Nos vamos a reír. Vamos a contar la actualidad de forma rigurosa, entretenida, ágil, dinámica... Yo creo que va a gustar lo que se va a ver.

Aún no sabemos nada sobre las secciones. ¿Seguirá por ejemplo la de crónica social con Cristina Fernández?

S.I.: De entrada al frente del programa estaremos Marc y yo. Nosotros apostamos por estar pegados a la actualidad. Hay un tramo con un acento más político, y luego un tramo más social, pero el programa sin duda estará pegado a la actualidad.

¿Cómo os llegó el ofrecimiento? ¿Fue distinto, ya que Silvia no estaba en TVE, y Marc lleva muchos años en RTVE, aunque estaba en la radio?

M.S.: Me hicieron la propuesta desde la Dirección de Informativos, Esteve Crespo [nuevo Director de Contenidos Informativos de RTVE], y y no lo dudé un instante. Bueno, lo dudé porque estaba disfrutando mucho la experiencia de la radio. Me lo he pasado muy bien este año, y me voy con la sensación de que me voy un poquito pronto, porque creo que el 24 Horas que estábamos haciendo molaba un montón, y además ha tenido el respaldo de la audiencia. Y me da rabia. Pero yo entiendo esto como un continuo. Es decir, yo he estado ya en cinco redacciones distintas, que ya sé que es un poco raro esto en RTVE, pero yo entiendo que esto es siempre sumar. Si aporto en el 24 Horas, lo hago para toda la casa, y si estoy en La hora de La 1 lo hago también para el 24 Horas de RNE. Yo lo entiendo así. Cuando nos va bien, nos va bien a todos; cuando nos va mal, nos va mal a todos. Y por tanto, por eso decidí que no tenía ninguna duda en que lo aceptaba.

S.I.: Está emocionado por despedirse de la radio, pero también se ríe eh [ríe]. A mí RTVE me planteó un reto tan grande, y además yo sabía que estaba incluido ese retomar, que la verdad es que no me lo pensé ni un solo instante. Es un formato fresco, distinto, pero muy pegado a la actualidad, muy riguroso. La verdad es que es un trabajo ingente, pero al final merece la pena y para hacerlo tenemos al mejor equipo.

Ambos decís que no lo dudasteis por la oportunidad que supone. ¿Pero al mismo tiempo, da un poco de miedo viendo las duras críticas que sin ir más lejos recibió Mónica López?

M.S.: Da vértigo siempre ponerte al frente de cualquier cosa. Afortunadamente, porque entiendo que es eso. Y yo siempre he dicho: yo estoy cara al público, y por tanto parte de mi responsabilidad también es asumir las críticas. Si no podría estar muy escondidito, y nadie se fijaría en mí.

S.I.: A ver... Muchas veces cuando se plantea un formato, un programa nuevo, mucha gente nos ha planteado el tema de: “¿Estáis preparados para la polémica?”. Madre mía, estamos preparados para que la gente opine siempre, ¡si somos su tele! La gente tiene que opinar, y tiene que decirnos qué les gusta, qué no les gusta. Pero esperamos críticas constructivas. Cuando se anunció oficialmente que íbamos a ser Marc y yo quienes nos pongamos al frente de La hora de La 1, recibimos una oleada de cariño tan grande, que sinceramente lo último que he pensado es en la polémica. Hay tanta gente remando a favor y esperando que hagamos algo distinto y apoyándonos, de verdad, que de momento sólo nos podemos sentir afortunados. Ha sido enorme.

Habéis dejado claro que 'La hora de La 1' va a seguir hablando y debatiendo de política. ¿Qué les diríais a los que piden que en TVE se haga un magacín más “blanco”, quejándose porque los tertulianos defiendan un lado u otro de la política?

M.S.: Lo que nosotros planteamos yo no sé si es blanco, o negro, o de otro color. Pero en el caso de la tertulia política, será periodistas que tienen información, y que la valoran. Y punto. Yo llevo ya unos años haciendo esto, y si hay algo de lo que rehúyo son de los gritos, de la polarización, de la crispación... Creo que esto es nuevo en el servicio público para RTVE, pero el calmar un poco el ambiente, el no estar cabreados, creo que lo tendrían que incorporar en el estatuto de RTVE, por ley. Porque tiene que ser un trabajo nuestro. Eso no significa que pueda haber opiniones encontradas, o que a veces se pueda subir el tono, por supuesto, pero aquí no hemos venido a gritar, no hacemos espectáculo de las ideas, sino que venimos a entender un poquito mejor lo que pasa. Y para entenderlo un poquito mejor, entre los muchos instrumentos que hay está una mesa de periodistas que trabajan en la información y que saben de qué hablan... Y yo diría que eso es blanco [ríe].

S.I.: Y luego, otro factor, es que en las mesas hay expertos, no sólo va a haber periodistas. Nosotros vamos a sentar como colaboradores a expertos. Es uno de los grandes cambios que se va a producir. Todos por supuesto tenemos una opinión de lo que sucede, pero nosotros vamos a sentar a periodistas y a expertos. Vamos a sentar a opiniones autorizadas, de tal manera que la espectacularización de la actualidad no se va a producir, se va a producir la profundización, y contar las noticias desde un punto de vista poliédrico.

M.S.: Es que hay muchos colores y muchos matices. Yo creo que eso es lo más importante, y quizás eso ahora es lo que no hay. Y por eso insistimos mucho en que esto es lo que puede llamar más la atención.

En ese poliédrico, en esos matices, ¿pensáis que para ser “plural” hay que dar voz a todas las opiniones, o que hay algunas que no merecen el altavoz? Un ejemplo próximo son los antivacunas.

S.I.: De verdad que creo que va a sorprender el formato porque son los expertos los que van a hablar de todo. Es decir, yo creo que se puede hablar de todos los temas, pero hay que ir a los expertos, y entonces ellos te dirán: pues mira, hay gente que se quiere poner la vacuna y hay gente que no se quiere poner la vacuna; y si te la pones vas a estar cubierto en este espectro sanitario, y si no te la pones vas a tener esos problemas. Y luego la gente que decida. Pero el experto que nos cuente qué es lo que sucede en ambos casos. Eso es lo que tenemos que clarificar.

Había pospuesto esta porque el buen ambiente es evidente, pero ¿os conocíais de antes, habíais trabajado juntos?

S.I: Nada, nada. [Los dos ríen].

M.S.: Nada. Creemos que los directivos de RTVE pusieron espías para estudiar si nos podíamos entender [ríen], porque de verdad, no nos conocíamos de nada. Bueno, sólo como dos profesionales que se admiran, que se han seguido y tal, pero nada.

S.I: Y luego hemos descubierto que tenemos amigos en común, que es muy bonito. Pero realmente es que vamos, yo no tenía teléfono de Marc, y Marc no tenía el mío. Porque a veces hay periodistas con los que más o menos te conoces, pero nada de nada. Yo le escuchaba a él en la radio, y de repente me encontré con él desayunando un día en el centro de Madrid.

M.S.: Sí, porque nuestro primer encuentro, que había mucha expectación obviamente por ver cómo era, decidimos que fuera nosotros dos en un desayuno tranquilo para ver... Y al final, ¿sabes qué pasa? Que nos encontramos dos periodistas más o menos coetáneos, que llevamos una trayectoria muy parecida, con unos entornos de crecimiento muy parecidos, y que entendemos que somos dos currantes.

S.I.: Tal cual. Venimos de la redacción, y nos apoyamos en la redacción.

M.S.: Hay mucha gente que se ríe de nosotros por eso. [Ríen]. Como que somos muy normales, y claro...

Hablábais de la redacción. ¿Cómo ha sido el recibimiento? Quizás en el caso de Marc ya conocía a compañeros, y Silvia al llegar de Telemadrid.

M.S.: No creas, es que hay muchos mundos aquí.

S.I.: El recibimiento ha sido muy bueno, sinceramente. Nosotros quisimos ir uno por uno presentándonos a los compañeros, porque creemos que es como hay que hacerlo cuando llegamos a un sitio nuevo. Y la verdad es que hemos visto cómo se generaba ilusión en torno a este proyecto. El equipo está remando a favor de forma impresionante. Nos sentimos muy arropados y muy bienvenidos. Es que hemos tenido suerte.

M.S.: La verdad es que sí, que estamos bien. Obviamente arrancar un proyecto tiene días de todo. Trabajamos mucho, y hay días que dirías: bueno... Pero en general creo que ya hemos llegado a un punto en el que días grises ya no habrá, sino que ahora ya hay muchas ganas de tirar adelante. Ya estamos tan metidos, ahora también en hablar con vosotros, en empezar a ensayar en el plató... Es que ese plató es la bomba. Ese plato es increíble.

Quiero preguntaros por vuestras cadenas pasadas y presentes. Silvia, ¿cómo valoras la nueva etapa de Telemadrid y el cese de toda su cúpula y responsables de informativos, con los que has trabajado?

S.I.: Lo cierto, lo objetivo, es que la nueva ley tiene mucho menos respaldo de lo que tenía la anterior. Yo en Telemadrid he vivido una etapa dorada. A mí se me permitió trabajar con libertad absoluta. Y yo me he ido muy emocionada y sabiendo que dejo ahí un equipo maravilloso. Yo he venido a TVE porque me han puesto el reto de mi vida delante. Y sinceramente, sólo pediría que a mis compañeros en Telemadrid les dejen trabajar. Porque un periodista, y todos los trabajadores de esa casa, conocen muy bien su oficio y saben lo que tienen que hacer. Y cuando a un periodista se le deja trabajar, un periodista hace un muy buen trabajo.

Marc, para TVE esta temporada también será la primera con su nuevo Presidente y Consejo. ¿Cómo ves el proyecto, y qué percibes de cara al futuro?

M.S.: Yo lo veo muy ilusionante. Fíjate, después de de estar un poco husmeando las ideas que hay por ahí, las conversaciones que hemos tenido, yo creo que es el momento en el que la radiotelevisión pública se va a encontrar consigo misma. Pero de verdad. Todo el mundo ha venido aquí con las mejores ideas del mundo, y todo el mundo ha remado a favor para que esto funcione, porque aquí tenemos una perla que es enorme, maravillosa y muy poderosa. Pero sinceramente, creo que ahora que es quizás uno de los momentos más complejos, porque para qué engañarse, tenemos algunos problemas de audiencia; el mundo audiovisual es tan complejo ahora que creo que repensarlo mucho es una maravilla. Y en eso estamos. Y creo que al frente de esto, y me voy a poner y nos ponemos nosotros también dentro, hay gente valiente. Quizás ha llegado el momento de trabajar sin complejos lo que es la radiotelevisión pública. Y creo que se puede conseguir.

Eso a nivel interno. A nivel externo, ¿qué le diríais a esos partidos políticos, que son todos, que utilizan políticamente TVE una y otra vez, con cualquier mensaje o con cualquier excusa?

S.I.: Que vean nuestro programa como un espectador. A todos: políticos, empresarios, ciudadanos de a pie... que vean nuestro programa como un espectador. Que van a sentirse informados y van a disfrutar.