Jane The Virgin 4x10 Review: Directed by Gina Rodríguez

Por Betty M. Martínez

Sobran las razones para sentarse cada semana a ver Jane The Virgin, pero en esta ocasión hay tres motivos de peso. Uno, este capítulo ha sido dirigido por Gina Rodríguez, con lo que la actriz ha tenido doble trabajo. Dos, porque la serie ha recibido la visita de Brooke Shields. Y, tres, porque el TeamJafael sigue captando nuestra atención.

¡¡CUIDADO SPOILERS!!

La primera cita

Como recordaréis, la semana pasada dejamos a Jane y Rafael explorando sus sentimientos… en secreto. Pues bien, la pareja sigue a lo suyo: explorarse. Solo que ahora han decidido explorarse el uno al otro. Me explico, ¿verdad? Y aquí llega lo divertido.

La nueva Jane, la que ya asume con naturalidad su sexualidad, ha decidido que ya va siendo hora de que ella y Rafael pasen a mayores y considera que “aquí y ahora” es el momento. Sin embargo, nuestro galán ex descafeinado ha decidido vestir el traje de caballero y cree que es necesario que antes tengan una cita. Claro, eso y que quería tener “capacidad motriz total”. Es lo que tiene tener más cafeína en la sangre, que también aumenta el orgullo del macho alfa.

En fin, que entre idas y venidas, entre ahora no y después no se puede, Jane y Rafael han tenido su primera crisis de esta su nueva etapa romántica. Y es que lo de llevar una relación en secreto no es fácil y menos en una familia como la Villanueva.

Resulta que Alba consiguió una cita con Ronaldo (aviso: no es futbolista, es compañero de iglesia de la abuela), pero con la trampa de que es una cita doble, dado que el nieto de Ronaldo sería “ideal” para Jane. Y la verdad es que Chris era todo un partidazo, tanto que vimos a Rafael en modo celoso. Y, la verdad, lo entiendo. Rafael, nosotros te queremos y sabemos que quieres a Jane, pero, tienes razón, tú nunca serás “poco complicado”.

Menos mal que Jane le dejó claro que a ella le gusta así. A fin de cuentas su historia ha sido de todo menos “poco complicada”. Lo importante es que cada uno de vosotros asuma con naturalidad como es y que acepte al otro tal cual es. Rafael es complicado, sí, pero a Jane también hay que saber llevarla con su don para el juicio permanente.

¿Qué pasó al final? Pues que el TeamJafael es mucho más fuerte de lo que ellos mismos se creen y han conseguido llegar a esa fase en la que todo se puede hablar y casi todo se puede arreglar. Por cierto, no voy a hacer spoiler, pero, POR FAVOR, que nadie se pierda los últimos minutos del capítulo. ¿Por qué? Porque vamos a ser testigos de un momento que los leales y fieles integrantes del TeamRafael llevábamos esperando desde hace 74 capítulos. Y ya he hablado de más. Así que ahí lo dejo.

La sombra de Petra

Si la parte emocional de Jane va más o menos encaminada, la parte profesional ha sido un tanto complicada. ¿Por qué? Porque ahora su rol de escritora está íntimamente ligado a Petra y ya sabemos que la relación de las madres de los hijos de Rafael es un tanto compleja.

Han empezado a abordar la cuestión del libro y ha sido un caos. Primero, porque Jane no sabe qué clase de libro quiere Petra, aunque esta lo tiene muy claro. Quiere una combinación de autobiografía, libro de estilo y colección de historias. ¿Cómo se escribe eso? No tengo ni la más remota idea. Y lo peor es que Jane tampoco lo tiene claro.

Visto que estaban en un callejón sin salida, han intentado otra cosa. Jane se ha convertido por unas horas en la sombra de Petra. ¿El objetivo? Que Jane comprendiera la intensidad de la vida de Petra, después hacer una descripción de la personalidad de la checa que no gustó nada a la dueña del hotel Marbella. Y aquí he de decir que Petra ha sido muy injusta porque Jane fue muy generosa con los sinónimos que utilizó para definirla. Yo no lo hubiera sido tanto y eso que últimamente me resulta más simpática.

En fin, a lo que iba, que lo de la sombra tampoco funcionó por lo que decía antes: el don para el juicio permanente de Jane. Petra la soporta como brújula moral de vez en cuando, pero lo lleva fatal cuando es permanente.

Así pues, tras algún que otro choque más, tomaron la decisión más sabia. Petra es una gran empresaria y sabe dirigir un hotel, pero la que sabe escribir es Jane, así que será esta última la que decida qué y cómo lo escribe. Ahora tengo mucha curiosidad por saber cómo transmite Jane eso que dijo Petra de que le había costado mucho llegar a dónde está. Petra, querida, nosotros sabemos perfectamente cómo llegaste a la dirección del Marbella. La pregunta es ¿quieres que todo el mundo lo sepa?

Pero Petra ha tenido otra sombra acechándola. Jane Ramos. Que, lo reconozco, sigo sin saber cómo catalogarla (sí, Jane me ha contagiado su espíritu juzgador). Creo que en algún momento intentó ayudar sinceramente a Petra, pero también creo que la amenaza de Desconocido ha podido afectarle. De hecho, cuando va a ver a Petra dice que “la he librado”. Pero, ¿eso qué quiere decir en realidad? Que ha librado a Petra de las sospechas de la Policía o que se ha librado ella de Desconocido. Estoy hecha un lío y con lo que pasó aún estoy más desconcertada.

Una nueva coprotagonista para Rogelio

¿Y Rogelio? Pues sigue muerto de aburrimiento cuidando a Baby, que es una preciosidad, pero su agenda de actividades es bastante limitada. Pero, que nadie se preocupe, Rogelio ya se ha autodiagnosticado del mal que padece. Y no es aburrimiento. No. Es depresión postparto masculina. ¿Eso existe? La verdad es que yo no lo tengo nada claro, pero él dice que sí. Y tanto lo cree que se ha ido a un programa de debate en televisión a discutir el tema con River Fields (Brooke Shields), que, entre otras muchas cosas, es ‘La novia de América’. De hecho, toda la familia ha intentado convencer a Rogelio de que no se enfrente a ella porque, si lo hace, puede despedirse de su carrera americana.

Pero, ya conocemos todos a Rogelio. Lo de actuar reflexivamente no es lo suyo. Me pregunto de dónde habrá sacado Jane esa cualidad porque ninguno de sus padres la poseen. En fin, a lo importante, Rogelio fue al programa a defender su condición de afectado por depresión postparto en un debate donde todas eran mujeres menos él. Rogelio, hay que saber qué batallas no hay que emprender.

Sin embargo, lo peor no fue eso. Lo realmente grave vino cuando en plena discusión con la protagonista de El lago verde (no es una errata), Rogelio cometió el gravísimo error de decir la palabra “ataca” justo cuando había un lobo salvaje en el plató y, claro, ¿qué hizo el pobre animal? Lo que le ordenaron. Atacar. Y hubo dos consecuencias. Una mala y otra buena. ¿Consecuencia mala? ‘La novia de América’ ha perdido un dedo de un pie.

¿Consecuencia buena? El impacto de la secuencia ha sido tal que el estudio ha dado el visto bueno a la versión USA de La pasión de Santos. A ver, examen para las Rogelifans, os acordáis, ¿no? El gran proyecto que tenía Rogelio, pero que ha tenido que ir aplazando. Pues parece que ahora sí que va para adelante. El único problemilla que puede haber es que la condición sine qua non para hacerlo es que River Fields sea la coprotagonista.

Así que, pregunta para el próximo capítulo, ¿aceptará “la novia de América” trabajar con el hombre por el que ha perdido un dedo? Si es un poco rencorosa, rechazará la oferta. Pero, si es verdad que lo último que ha hecho es un anuncio de desodorante, tal vez no diga que no. Sea como fuere, va a ser interesante ver cómo se las ingenia Rogelio para convencer a River.

Pero el próximo capítulo tiene otros puntos de interés. Primero, ¿seguirá Rafael el consejo de Jane de buscar a sus padres biológicos? Yo espero que sí lo haga. Mateo ya ha mostrado curiosidad por conocer a la familia de papá y peor que la adoptiva no puede ser. Segundo, ¿se convertirá Alba en clienta asidua del sex shop? ¡Quién nos iba a decir que llegaríamos a ver a Jane y su abuela hablar con total normalidad de sexo! Tercero, ¿alguien me explica lo de los tornillos? Es que soy malísima con el bricolaje.

En fin, que no me pienso perder el próximo capítulo y que nadie se despiste que Jane The Virgin se va un par de semanas de vacaciones y vuelve a principios de marzo.