'The Flash' 03x20 Review: ¡Savitar revela su identidad!

'The Flash' 03x20 Review: ¡Savitar revela su identidad!

Por Alberto Rodríguez

¡Por fin! Después de meses de agonía y de sabernos troleados por el maldito Savitar, el dios de la velocidad muestra su rostro sin ocultarlo detrás de su intimidadora máscara. ¡Hay que ver la de vueltas que puede dar la vida! Al inicio de esta aventura se nos presentó a Julian como el nuevo villano, Alquimia, y sólo resultó un entremés de lo que venía. Porque en verdad que este último enemigo ha sido, con diferencia, el que más lejos ha llegado en lo de traerle de cabeza a Barry y a los suyos. De hecho, en Estados Unidos el revuelo que ha generado este capítulo en torno a la identidad de Savitar ha llenado durante días blogs, wikis y portales especializados. Todo el mundo quería hacer su apuesta, y hay que decir que el resultado final no defrauda. Pero no queráis comeros este dulce caramelito tan corriendo. Primero hay que degustarlo, y para ello, lo mejor es que repasemos los principales acontecimientos de este estupendo episodio.

(Este spoiler es la clave de la tercera temporada. Si sigues es bajo tu responsabilidad)

Tracy, la chiflada

La brillante científica que conseguiría encerrar a Savitar en la Fuerza Veloz en esos momentos era una simple estudiante de postgrado. Cuando Barry, Cisco y H.R. la encontraron en la universidad, la joven era presa de un ataque de desengaño provocado por la falta de fe del decano de la facultad, el cual, le había acusado de malemplear los recursos de la institución en algo que sencillamente no tenía ni pies ni cabeza.

Poco podía imaginar la pobre Tracy las posibilidades de su trabajo. Pero no había tiempo para hacérselo entender porque Killer Frost fue enviada por Savitar para matarla. Tras frenar su ataque, Barry la llevó a comisaria. Aunque intentaron convencerla para ponerle escolta, la muchacha pasó de la idea. Así que enviaron a H.R. para vigilarla y éste decidió establecer contacto con ella en la cafetería. Mientras disfrutaban de una buena taza de café, entre los dos acuñaron un término desconocido para la científica: la Fuerza Veloz. Y justo en lo más interesante de la conversación –para entonces H.R. ya estaba coladito de ella–, Killer Frost apareció de nuevo para intentar acabar con la vida de Tracy. Ante esta segunda ofensiva, a la joven no le quedó más remedio que ir a los laboratorios S.T.A.R.

Allí, el equipo Flash le reveló su futuro. Estaba destinada a convertirse en una profesional brillante, acreditada con un sinfín de premios y reconocimientos internacionales, y con una misión especial: crear la trampa que encerraría a Savitar.

Esta avalancha de noticias fue abrumadora para Tracy, que huyó a su lugar especial para reflexionar sobre lo que le estaba ocurriendo. En frente de la estatua de Galileo, H.R. acudió a su encuentro para infundirle el valor que necesitaba. Realmente era la primera vez que tenía la oportunidad de hacer algo grande. Y eso, para una persona acostumbrada a fallar una y otra vez en la vida era una situación estresante. Pero la fe depositada por H.R. en ella hizo que sacara fuerzas de donde no había y se animara a ayudarles. ¡Ay, H.R. que te nos has enamorado!

Escrúpulos

Killer Frost era en ese momento la mayor baza de Savitar en contra de Barry, Julian y sobre todo Cisco. Sin embargo, el dios de la velocidad empezó a desconfiar de la lealtad de la metahumana. Al fin y al cabo, todavía no había asesinado a nadie. Y el primer fallo en la universidad no supuso una buena noticia para la deidad, sobre todo teniendo en cuenta que había prevenido a Killer Frost de la aparición de Barry y los demás. ¿Era posible que Caitlin desde dentro estuviera conteniendo las ansias de sangre de Killer?

Tal vez. Aunque de ser así, en la otra parte habría alguien en su misma situación. Cisco parecía indispuesto a la hora de usar sus poderes para noquear a su amiga. Y Julian se dio cuenta de ello. Pero el pobre estaba muerto de miedo, ¿qué le iba a hacer? ¿Y si se le iba la mano y la mataba? Esa era una idea con la que no podía lidiar.

Sin embargo, mientras él se debatía con esos escrúpulos, la cómplice de Savitar decidió mover ficha y consolidar el compromiso con su nuevo compañero de juegos. Se presentó en casa de Joe y secuestro a Cecile para usarla como moneda de cambio con Tracy.

¡Qué oportuna! Justo en el momento en que Joe había decidido cortar con ella. Como siempre pasa en las series, cuando la relación sube de nivel, la persona con algo que ocultar decide apartar de su lado a la otra porque cree que así la está protegiendo. Y efectivamente Cecile se encontraba en un gran peligro por ser la pareja sentimental de Joe. Ahora estaba a punto de comprobarlo.

Sin amor, ¿en qué nos convertiríamos?

El trato era sencillo. Barry tenía que llevar a Tracy a la dirección que le había proporcionado Killer Frost. Si no, mataría a Cecile. ¿Y qué podían hacer? Pues acudir a la cita, claro.

Además que Tracy se ofreció voluntaria a colaborar en todo momento. Pero es cierto que no podían arriesgar a su más preciado activo. Y menos ahora que la joven científica había empezado a asentar las bases del desarrollo para su trampa. Por sí sola había comprendido que Savitar necesitaba de la armadura para disipar la gran cantidad de energía que generaba con su supervelocidad. Si pudieran construir un instrumento con el que controlar todo ese poder y usarlo en su contra podrían, por qué no, encerrarlo en una prisión.

Pero eso tendría que esperar. La vida de Cecile estaba en juego y ahora tocaba un poco de trabajo de campo. En la típica nave industrial, de noche, la metahumana recibió a sus examigos con una sonrisa y una siniestra forma de predecir el futuro. Palabra por palabra, adivinó lo que Barry le dijo para intentar disuadirla y que recapacitara. Por lo visto, Savitar se lo había dicho. De igual forma también le había contado que Cisco aguardaba agazapado entre las sombras, en una de las celosías de la cubierta. Y por tanto, se había preparado para ello.

De repente un explosivo hizo saltar por los aires a Cisco, ataviado como Vibe, que cayó al suelo de manera estrepitosa. Acto seguido, Killer Frost neutralizó a Flash con una camisa de fuerza hecha de hielo. Parecía que esta vez sí tendría éxito en su empresa. Pero Vibe recuperó el conocimiento y decidió pararle los pies de una vez por todas.

Por muy amiga que fuera, no podía consentirle más fechorías. Y ahí fue cuando su visión de hace unos meses se hizo realidad: frente a frente, su amiga y él se estaban lanzando un haz de energía que acabaría con uno de los dos. Mientras tanto, Joe liberó a Cecile y junto a H.R. y Tracy abandonaron el lugar. Por suerte para Barry, Cisco consiguió dominar la situación y vencer a Killer Frost sin matarla. Aprovechando que descansaba inconsciente en el suelo, Cisco le tomó una muestra de sangre. Al mismo tiempo, Barry consiguió liberarse también. Con suerte, podrían llevarse a su amiga y volver a colocarle el inhibidor para que volviera a ser Caitlin.

Pero no. Savitar andaba cerca y no estaba dispuesto a perder a su aliada. Tan pronto como apareció, se la llevó consigo. No sin antes alardear de que su ascenso estaba cerca, y la caída de Barry también. La verdad es que este villano se ha caracterizado por una prepotencia constante durante todo su periplo.

Sea como fuere, el día había llegado a su fin. En casa, Joe fue recibido por sus hijos, incluido Wally, que había estado en Tierra 3 visitando a Jesse. En el sofá les contó que se había sincerado con Cecile y le había dicho toda la verdad. Que Barry era Flash, Wally era Kid-Flash, y todo a lo que se dedicaban dentro de los laboratorios S.T.A.R. Y justificó este paso tan valiente en su pensamiento de que el amor era lo mejor que podían tener en sus vidas. De no tenerlo, ¿qué sería de ellos? ¿En qué se convertirían?

Y esas palabras tuvieron un efecto resorte en Barry. En un flash, comprendió que la verdad había estado delante de él todo ese tiempo. Y como alma que lleva el diablo, salió pitando al encuentro de Savitar. Ya sabía quién era. En todo momento les había llevado la delantera, conocía lo que iba a pasar, e incluso le dijo que era el Flash del futuro. Pero ahora toda esa información cobraba sentido: él sabía lo que iba a pasar porque lo había vivido desde dentro. Porque Savitar era… Barry. Una versión futura malograda, al menos.

Tras quitarse la armadura, su rostro al descubierto no dejó lugar a dudas. Un Barry parcialmente deforme encaraba al Barry verdadero con una mirada de suficiencia y una expresión maligna. ¿Qué le habría pasado para acabar así? Está claro que le tocó vivir la muerte de Iris, con lo cual, es muy probable que la versión demacrada y depresiva que conocimos en el capítulo en el que Barry viajó al futuro acabara corrompiéndose y convirtiéndose en Savitar. Pero no tiene mucho sentido que convivan dos versiones de Barry en una misma época. Es una paradoja de manual. Tal vez sea un efecto secundario de Flashpoint, creado a principios de la temporada. ¿Sabéis qué? Lo mejor será esperar a la semana que viene. Aunque, eso sí, se nos va a hacer muy larga la espera.

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