El tira y afloja de Évole y Granados en laSexta: “Cambia la teoría, que no cuela”
laSexta emitió este domingo una de las entregas más señaladas de la primera temporada de Lo de Évole: la entrevista a Francisco Granados. Una charla que hizo crecer la audiencia del formato de reportajes y que sirvió para conocer la versión del presunto cabecilla de la Operación Púnica.
Acusado de formar parte de una organización criminal dedicada al blanqueo de capitales, delitos contra la Hacienda Pública, falsedad documental, cohecho y tráfico de influencias, Granados pasó más de dos años en prisión preventiva. Sobre ello charló con Jordi Évole y el equipo de laSexta, a los que recibió durante una jornada en su casa.
Parte de la charla la dedicaron a hablar de la cuenta en Suiza del ex del PP, y de la libreta que encontró la Guardia Civil en su casa y que asoció a una supuesta contabilidad B del partido. Fue ahí donde más le rebatió el presentador, no dando por buena su versión.
Granados explicó que abrió la cuenta “en el año 92, aproximadamente”, y la cerró “en 2004”, cuando ya llevaba años teniendo un cargo público. “La cerraste con cuatro años de retraso, como mínimo”, le reprochó Évole. “¿Por qué no lo declaraste?”, preguntó después sobre su procedimiento al traer a España el dinero de esa cuenta. “Porque estaba en política y me pareció que no era presentable. Me arrepiento de este episodio”, lamentó el invitado.
Sobre la famosa libreta, el ex del Partido Popular explicó que en ella “ni aparecen cantidades ni dinero, ni tampoco nombres. Había un esquema de actos de campaña donde ponía las personas que iban a ir. No tiene nada que ver”. “Yo no sé lo que es. Pero cuando me dices que son personas... Yo ahí personas no veo”, le dijo incrédulo Évole. “Tú no sabes cómo funcionan los partidos”, le reprochó Granados. “Me parece muy pillado. Cambia la teoría, que lo de las personas no cuela”, concluyó el presentador de laSexta.
Entrevistador y entrevistado también recordaron momentos como la detención, que se produjo justo al dejar a su hija en el instituto. “Me dio un señor en el cristal. Lo bajé y me enseñó una placa. Me dijo: 'Guardia Civil. Está usted detenido'. Y vinimos a Valdemoro”. Después de registrar su casa, Granados recordó cómo le llevaron “a un cuartel, en Las Rozas”, donde le “tuvieron cinco días incomunicado en un calabozo”. El expolítico afirmó que fueron los peores días de todo el proceso: “Los guardias se portaron muy mal. Por la noche, me cantaban el himno del PP y me decían 'vota a Podemos'”.
Durante su estancia en la cárcel, dijo que estuvo los dos años y medio compartiendo celda. En una de esas etapas, estuvo con una persona acusada de asesinato. “Este pobre lo que le pasaba es que era un enfermo mental”, dijo, recordando que cuando se despertaba “lo encontraba en la oscuridad” mirándole.
Buena sintonía fuera de cámaras
Lo de Évole no solo mostró lo que ocurrió entre ellos delante ante las cámaras cámaras, también enseñó cómo se relacionaron cuando se apagaban los focos. Las bromas entre Granados y Évole fueron más que recurrentes, ironizando incluso sobre Vox. “Esto sin Pacharán, con Pacharán acabas cantando El novio de la muerte”, bromeó Évole sobre su buen rollo. “Como los mítines de Vox”, aportó el expolítico.
Durante la comida junto al resto del equipo, el ex del PP también habló de sus primeros pasos en televisión: cuando era tertuliano de Jordi González en Telecinco. “Lo echo muchísimo de menos, me gusta mucho la tele”, dijo. “Me ahorraba algún que otro pleno”, bromeó.
Antes de la entrevista, el anfitrión hizo un tour a Évole por su casa. “Para haber acabado como acabaste con Esperanza Aguirre, tienes bastantes fotos con ella”, dijo el presentador. El expolítico afirmó que “hay que valorar a la gente por un global”: “Yo a Esperanza le estoy muy agradecido, me ha enseñado muchas cosas y me lo he pasado muy bien con ella y le debo mucho”.
Ese momento lo aprovechó el rostro de laSexta para decirle que había hablado con Aguirre sobre la entrevista. “Le he puesto: Esperanza, hoy entrevisto a Granados, ¿algún consejo?”. La respuesta, eso sí, no le sirvió de mucho: “No se me ocurre ninguno, ¿cuándo lo emites?”, le dijo.
