La relación forzada que nadie se creía en el “Gran Hermano” de parejas

Este fin de semana, María Jesús Ruiz ha cortado la relación amorosa que acababa de empezar con Antonio Tejado dentro de GH Dúo.

La presión que la modelo había sentido por parte de él por no querer intimar, le hizo tomar tal decisión: “Estoy aquí para apoyarte, para ser tu compañera, para reírnos juntos pero no me voy a acostar contigo”

Tejado, a María Jesús: “No te acabas de liberar aquí”

Ambos habían iniciado una relación de besos y abrazos que, tras una noche de bodas ficticia y sin relaciones íntimas había llevado a Tejado a presionar a Ruiz para “soltarse más”. Con ello, él se refería a tener sexo en el programa, a lo que ella se ha negado de todas las formas posibles, hasta que la incomprensión de Antonio le llevó a cortar con él.

Así se lo hacía entender ella: “Siento que me gustas y me atraes mucho pero una relación necesita conocerse más. Estoy cerrada, lo sabes, pero yo no necesito nada más. Estoy aquí para apoyarte, para ser tu compañera, para reírnos juntos pero no me voy a acostar contigo. Mi estilo de vida contigo no cuadra en la vida normal. Me quiero enamorar pero contigo no siento eso, siento atracción física. Y como solo es eso no lo quiero hacer en público”.

Él, por su parte, le aseguraba que no se refería al sexo cuando pedía que ella se dejara llevar: “No te acabas de liberar aquí. Yo no me refiero a eso, me refiero a normalidad. Si nos damos besos y abrazos hay momentos en los que tú lo cortas. Yo solo pido estabilidad”. A la vez que le llamaba “mentirosa”, por asegurar que solo sentía por él “una atracción física”.

María Jesús Ruiz: “Quiero estar bien con él pero no tener nada”

Minutos más tarde, la modelo entraba al confesionario para explicar su decisión: “En realidad la culpa es mía porque me vengo arriba y luego digo que no. Quiero estar bien con él pero no tener nada. De amigo bien pero de pareja es un sufrimiento. A mí me gusta sobre todo el respeto. Si digo que no es no”.

A lo que añadía que sobre esto hasta se podía generar un debate: “Puedo ser la mala o puedo tener todo el derecho del mundo a parar la situación. Antonio quiere tener una relación pero yo no quiero eso, quiero conocer a alguien y si se da una relación pues que se dé, pero si solo es atracción física no quiero”.

Y acababa aclarando: “Me puedo divertir pero no quiero hacer nada que me vaya a causar más dolor de consciencia que otra cosa porque no estoy de sonajero de nadie. No quiero forzar algo que no siento de verdad. Es el típico hombre que no me conviene para nada. Es una fuente de sufrimiento”.