Así volvió 'Zapeando' en versión “de batalla” y sin público: “Qué triste es aplaudirse a uno mismo”
Zapeando ha regresado este lunes 27 de abril en versión “de batalla”. Dani Mateo ha vuelto al plató, sin público, debido a las medidas de protección contra el contagio de coronavirus, y con cuatro colaboradoras -Maya Pixelskaya, Anna Simon, Valeria Ros y Miki Nadal- en la mesa.
“Ya estamos aquí. Como si no tuvierais bastante con lo que tenéis ya, ¡hemos vuelto!”, proclamaba el presentador del magacín de Globomedia, que hacía alusión al confinamiento decretado por el gobierno para aplacar las consecuencias de la pandemia. “Si de algo estamos seguros en Zapeando es de que no podemos rendirnos ante esta situación. Hay que aguantar como sea, igual que aguantamos a ese vecino que se hizo medio curso CCC de guitarra pero que sale al balcón cada día a darle la turra a sus vecinos”.
Los gajes de estar sin público: “¡Qué triste!”
Como ese cantautor amateur, los que componen Zapeando tampoco están preparados, dicen Mateo, “pero también salimos”, antes de plantear la nueva disposición que el programa mantendrá durante las próximas semanas y a los “aliados” con los que cuenta en plató. “Se irán incorporando unos sí y otros no”, advirtió, antes de anunciar al cuarteto con el que partía esta edición 1.581 del programa.
La primera gran consecuencia de la ausencia de público fue el hecho de que tuvieran que aplaudirse los unos a los otros cuando les dio paso Mateo. “¡Qué triste es aplaudirse a uno mismo! Es como reírte de tu propio chiste”, comentaban, antes de pasar a los contenidos preparados para la jornada.
Un mes de parón por el coronavirus
De cara a este retorno, laSexta ya informó de la elaboración de “un minucioso plan de acción para que los espectadores puedan seguir disfrutando del programa de siempre mientras que en el interior del plató todo esté milimétricamente esterilizado y el contacto entre todos los que forman del programa sea nulo”. Dentro de ese protocolo se incluían la orden de que presentador y colaboradores llegaran al plató maquillados y vestidos desde sus respectivos hogares, así como de las pertinentes pruebas para evitar contagio entre todos los miembros del equipo.
Todo para posibilitar el regreso de un programa que ha estado un mes sin entregas nuevas, desde el 27 de marzo. Durante los días previos, se probó a producir una edición casera, como ya habían emprendido otros programas de Atresmedia como El Intermedio y espacios de humor como Late Motiv.
