'Las tres puertas'

Antonia San Juan: “Los profesores de arte dramático me dijeron que me dedicara a otra cosa”

Paula Hergar

Las Tres Puertas volvieron a abrirse este 25 de enero para dar paso a una charla distendida entre María Casado y Macaco, Jero García y Antonia San Juan.

Presentadora y actriz coincidieron en que sus inicios en su carrera profesional no fueron fáciles. Y es que, aunque la intérprete logró el éxito y el reconocimiento con su papel en Todo sobre mi madre de Pedro Almodóvar, confesó que al arrancar su carrera tuvo que escuchar hasta en dos ocasiones que apostara por otra profesión.

“Cuando llegué a Madrid, el primer año que me presente a la escuela de arte dramático, leí un texto de Oscar Wilde y la junta de profesores me dijo que me dedicara a otra cosa”, lamentó.

Sin embargo, no perdió la ilusión: “Al año siguiente volví a presentarme, antes de entrar nos tomamos un copazo con una compañera y me tuve que sentar en el suelo para dar el texto. Me preguntaron si era la del año pasado y me dijeron que volviera a mi tierra, con un logopeda y que aprendiera a hablar”, recordó.

Con toda su experiencia, intenta no dar consejos a los jóvenes que se los piden, pero sí ha sido importante para ella apostar por “no esperar nunca a que me llamen, siempre generarme el trabajo. Cuando me llamaron para Todo sobre mi madre, abrí una productora para crear mis papeles. Por eso no tengo fecha de caducidad”, se enorgulleció.

La relación con Verónica Forqué y la psicología

Durante esos principios difíciles en la capital, a la que llegó con 19 años, explicó que tenía de vecina de edificio a Verónica Forqué y que fue ella quien la llevó al hospital: “Me habían operado de apendicitis a los 17 y me dejaron una gasa dentro. Con los años me moría de dolor. No sabían lo que era y al final ella me llevó, me operaron y estuve en la UCI como 25 días”.

Y han sido otros médicos quienes también le han ayudado con su salud mental: “Llevo 25 años de psicólogo, de psicoanálisis. El mejor viaje que he hecho en mi vida y me ha enseñado a vivir. He podido ser una mujer feliz y los soy a mis 62 años”, subrayó.