Blanca Portillo cumplió con su palabra y reapareció en 'La Resistencia' con su Goya, que usó de bate

Dos noches después de alzarse con el Goya a Mejor Actriz por Maixabel, Blanca Portillo acudía a La Resistencia para cumplir con su palabra y mostrar el premio. La actriz había visitado el programa de Movistar+ una semana antes y se había declarado fiel seguidora. Por lo que David Broncano y su equipo habían hecho hasta un “conjuro” para que ella fuera la ganadora. Y se cumplió.

Por ello, la intérprete reaparecía en el espacio nocturno entre vítores del público y aplausos: “Estoy súper feliz” confesaba y sacaba de una bolsa el Goya. Broncano le propuso que lo utilizara para batear una taza y así lo hizo Portillo: “No todos los Goya pueden decir que han roto una taza de La Resistencia”, bromeaba.

Ella, además, traía consigo un kilo de jamón de jabugo y unas lonchas, “especiales para Jorge Ponce por el Día de San Valentín”. Y es que en su visita anterior ella había declarado su enamoramiento por el colaborador. Al escucharlo, él apareció vestido de traje y dedicándole una canción en la que hacía un juego de palabras con su nombre:

“Blanca, por ti yo cruzaría un océano a nado con un bañador que me quedara pequeño. Blanca, por ti yo mataría a un montón de cachorros pero sería un detalle que me explicaras la razón. Blanca, por ti yo incluso vería la gala de los Goya pero tienes que decirme que lo nuestro va en serio. Blanca, por ti yo compraría una yegua embarazada para que cuando tuviera una cría poder llamarla Blanca Potrillo. Blanca, por ti yo bailaría en el tik tok de Pablo Motos aunque no tuviera muchas ganas, como les pasa a todos excepto a Pablo Motos” y así continuó bajo la mirada tierna de la intérprete.

Finalmente, y después de recuperar la estatuilla que había dejado encima de la mesa del programa, Blanca se marchaba con unos piononos de Granada que le había regalado Grison y unas carrilleras de Ricardo.