Entrevista VERTELE

Cristina Pardo se adentra en los ERE con Malas Compañías: “La corrupción en Andalucía es un poco más sibilina”

Cristina Pardo en una imagen de archivo

Pedro Zárate

En las promos habéis señalado que la trama de los ERE no está teniendo tanta atención mediática como otros casos de corrupción. ¿Por eso le habéis dedicado vuestro propio especial en 'Malas compañías'?

Había una vieja reivindicación que era “y los ERE, ¿qué? Que habláis todo el rato de otros casos de corrupción y parece que el que afecta al PSOE no interesa”. Creo que, en parte, podía haber algo de razón ahí porque al final te centras en casos como los de Comunidad Valenciana, que eran mucho más estrambóticos y pintorescos, o Madrid, donde hay cierta ostentación y que pueden ser mucho más escandalosos, aparentemente. Pero ahora que he grabado este programa creo que era muy necesario, y creo que es el mejor que hemos hecho.

¿Por qué lo crees?

Yo he descubierto cosas que no sabía. Por ejemplo, es verdad que la corrupción tiene algunos patrones comunes, pero también tiene sus particularidades. En la Comunidad Valenciana había mucha ostentación, casi muy cutre, y en Catalunya, de alguna manera, se utilizó el asunto de la independencia por parte de algunas personas para tapar la corrupción.

En Andalucía estamos ante una corrupción un poco más sibilina. Creo que es mucho más “bueno, yo tengo dinero público y en vez de crear empleo lo destino a la paz social, a que la gente no me proteste y pueda, más o menos, llegar a fin de mes”, aunque sea cometiendo, según la justicia, algunas irregularidades. Creo que esa parte queda muy bien reflejada en este programa y, además, tenemos a tres de los cabecillas de la trama de los ERE según la juez. Tener a esas tres personas y que hablen es muy interesante.

¿Qué dificultades os habéis encontrado para hablar con ellos?

Con el abogado laboralista Carlos Leal ninguna porque nos concedió una entrevista, pero el conseguidor de los ERE, Juan Lanza, y el exdirector general de Empleo, Javier Guerrero, nos dijeron que no, entonces les hicimos un asalto. A Juan Lanza en el bar de su pueblo, donde estaba desayunando, y a Javier Guerrero en el bar de Sevilla donde desayuna. Aparecimos allí con las cámaras y se pusieron a hablar, afortunadamente,

¿Cuál fue su reacción cuando os presentasteis allí?

El realizador del programa dice que Juan Lanza se rindió a los cinco segundos, y es verdad que empezó a contestar, aunque me termina llamando gilipollas. Con Javier Guerrero la entrevista fue un poco más accidentada porque aparece su abogado y se monta un pifostio en la puerta del bar de mucho cuidado. Pero lo importante es que hablan, que dan nombres y que fue muy emocionante e interesante lo que dicen.

Tras haber realizado esta entrega, ¿qué conclusión sacas del caso de los ERE?

Saco la conclusión, y no es que lo diga yo sino que lo dicen andaluces, de que hay algo de clientelismo en Andalucía, que no es bueno que un partido gobierne durante tantísimos años y que muchas veces, para tener suerte en sitios como esos, lo que hace falta es ser militante o familiar. Es una corrupción mucho más sibilina, que no se ve.

Por ejemplo, nosotros hemos hablado con un extrabajador de Delphi y el hombre te cuenta: “Bueno, a nosotros nos echan y nos dicen que hagamos unos cursos de formación que eran una mierda con respecto a lo que nosotros sabíamos hacer”. Entonces, les pagan durante años 1.600 euros por ir a esos cursos. O sea, les dan un salario mucho mayor que otros muchos trabajadores por ir a unos cursos que no servían para nada. Y encima durante años y en lugar de incentivar el empleo. Creo es mucho más sibilino y me parece una forma de administrar la vida ciertamente lamentable.

En uno de los avances también vemos a un grupo de universitarios hablar de la imagen que se da de Andalucía. ¿Qué nos vamos a encontrar en esa secuencia?

Los universitarios lo que hacen es ver las entrevistas que nosotros hemos hecho y las comentan. Nosotros hemos entrevistado a un alcalde, y él te cuenta que es la mayor empresa de contratación del pueblo, el Ayuntamiento. Entonces, claro, tú no vas a votar en contra de tu jefe. Probablemente no, y él te dice: “Nosotros contratamos a gente seis meses”. ¿Por qué seis meses? Porque pasado ese tiempo tienen derecho a una prestación estatal. Como ya tienen derecho a la prestación les echan y contratan a otros durante seis meses.

A mí esto, como política de empleo, me parece ciertamente acomodada y muy cuestionable. Como gobiernan tanto tiempo los mismos son ellos los que al final te dan el trabajo, el sustento, la prestación o el sueldo. Es una manera también de garantizarte el voto. Y no es que la gente sea nota, porque no quiero decir con esto que la gente sea tonta y vota al PSOE porque es tonta. No, ni muchísimo menos. Pero lo que digo es que, desde el punto de vista del partido, sí creen que eso es posible.

Y se aprovechan

Yo creo que un poco, sí.

¿Dónde podrían situarse las próximas entregas de 'Malas compañías'?

Yo creo que en Madrid habría un 'Malas compañías' segurísimo, pero tendría un inconveniente. En estos momentos todo está muy abierto y corres el riesgo de grabar una entrevista y que a los 10 días se te quede vieja porque cada día imputa a uno, declara uno, dicen una cosa distinta y aparecen personajes que de momento no están imputados pero no saben qué papel han tenido...Todo está demasiado abierto como para hacer un 'Malas compañías', pero materia hay para no parar.

En Madrid, la actualidad pasa por Cristina Cifuentes y su obtención de un máster mediante notas falsificados. ¿Cuál es tu opinión con respecto a esta noticia?

Me parece que [Cifuentes] ha dado unas explicaciones muy malas y ha reaccionado de una manera muy torpe. Las explicaciones que ha dado son insuficientes y creo que tiene muchos enemigos dentro del Partido Popular.

¿Crees que alguien de su partido anda detrás de este asunto?

No tengo muchas dudas.

Hace unos días anunciaste que abandonabas 'Al rojo vivo' para afrontar nuevos proyectos en laSexta. ¿Qué nos puedes contar sobre tus próxima aventura televisiva?

Voy a hacer un programa [Liarla Pardo] para el fin de semana que empezará después de Semana Santa. Habrá cierto cambio de registro, será muy divertido y espero hablar menos de Puigdemont.

¿Qué enfoque tendrá?

Habrá de todo un poco. Será un programa desenfadado.

¿Cómo se ha producido tu marcha de 'Al rojo vivo'?

A mí no me gusta llegar a los sitios a mesa puesta, y tenía que ponerme a preparar mi proyecto. Necesitaba unos días para estar con el equipo e ir haciendo cosas. Te puedo garantizar que he apurado al máximo [su marcha de 'Al rojo vivo']. Al final la vida son etapas y ésta ha sido así. Me da mucha pena pero tampoco me voy muy lejos porque informativamente voy a seguir vinculada a 'Al rojo vivo' y a laSexta para cuando pasen cosas.

¿Qué reacción esperas del público ante este nuevo programa con cambio de registro?

Nunca he sabido augurar las reacciones ante nada de lo que he hecho, así que no tengo ni idea. Lo único que espero es que a la gente le guste y que se divierta, que para mí es muy importante. También espero que el equipo se divierta y que vaya todo bien. Si va bien pues bien, y si va mal pues mal. Uno tiene que arriesgar para saber lo que puede y lo que no puede hacer.

Con respecto a otros asuntos, ya han pasado dos semanas de la huelga feminista del 8M. ¿Crees que servirá para que, a partir de ahora, los esfuerzos se encaminen en conseguir una mayor igualdad?

Creo que quedan muchísimas cosas por hacer, y todo lo que se haga está bien, pero creo que necesitamos la complicidad de mucha gente para que eso se plasme en progresos concretos. Ojalá sirva porque todo lo que se haga, suma.

PSOE, Ciudadanos y Podemos han llegado un acuerdo para renovar el Consejo de RTVE. ¿Crees que servirá de cara a mejorar nuestra televisión pública?

Ojalá. A mí lo que me parece es que los trabajadores de TVE tienen que tener margen suficiente para hacer su trabajo como consideren, más honestamente y con toda la dignidad posible. Los jefes de Edición a lo suyo y los trabajadores a lo suyo. Tienen la suerte de tener muchos medios para poder llevar a cabo unos despliegues informativos espectaculares. Y, mientras tanto, ahí está laSexta, que creo que ha hecho algo muy difícil, que es encontrar su sitio y que la gente ponga laSexta cuando pasa algo. Eso es muy difícil de conseguir y yo estoy muy orgullosa de que haya sido así. Lo que hagan los demás mejor para ellos.

Etiquetas
stats