Entrevista
Susi Caramelo sigue cumpliendo deseos en Movistar+: “Si me quitan la espontaneidad me quedo en nada”
El verano de 2020 ha sido para Susi Caramelo, literalmente, un 'veranito'. A principios de septiembre anunció que había dado positivo en coronavirus. Lo hizo con su humor característico, que siempre viene bien para digerir las malas noticias, pero lo cierto es que la pandemia ha trastocado el estreno de Caramelo, su programa en solitario para Movistar+, un espacio en el que la humorista hace realidad algunos de sus sueños.
“Ha sido duro por estar confinada y haber tenido que retrasar el programa, pero no me he enterado de nada”, explica la presentadora en una entrevista con Vertele. Finalmente, la segunda entrega del programa –la primera se estrenó con motivo del Orgullo LGTBI– llegará a Movistar este lunes 28 de septiembre a las 22:30 horas. Bajo el título Veranito Caramelo, en este segundo capítulo la reportera saldrá a la calle para citarse con una “conocida influencer” que le explicará qué es eso del lifestyle. Tras escuchar sus consejos, Susi los pondrá en práctica y acabará con sus amigas en la playa, donde una conocida banda ha adaptado sólo para ella la canción El final del verano.
La pandemia ha empeñado, en cierto modo, la esencia de los célebres reportajes con los que se metió en el bolsillo a la audiencia de Las que faltaban. En su nuevo programa, producido por Movistar+ en colaboración con El Terrat, la humorista ya no puede 'intimar' con sus entrevistados tal y como acostumbraba a hacer. “No me puedo lanzar al cuello de nadie, no puedo tocar a la gente, llevamos mascarillas y hay unas medidas que hay que respetar”. No obstante, añade Susi, el programa ha comprado una bola de plástico gigante para que su protagonista esquive, en la medida de lo posible, el antifaz que a todos nos cubre la mitad de la cara. “Hemos recurrido a la bola porque no queríamos perder ni un ápice de mi expresividad y yo no quería ir todo el rato con la mascarilla puesta”, confiesa la presentadora.
Susi Caramelo está de vuelta. Promete mucho “cachondeo” y nada de 'turra': “Soy cero profunda”, asegura la humorista, que reconoce en su espontaneidad el principal valor de lo que hace: “Si me quitan eso me quedo en nada, como cuando bañas a un perro y se queda hecho polvo”.
Estrenas el lunes 28 de septiembre a las 22:30, a todas luces una muy buena hora. ¿Te sientes respaldada por la cadena?
Por delante y por detrás. Por delante tengo a Ángel y a Patria [Dar cera, pulir 0] y por detrás a Buenafuente [Late Motiv], así que es un horario cojonudo. Estoy respaldada por la cadena y por los compañeros que me preceden y me siguen.
De tu lista de deseos... ¿cuáles nos puedes avanzar?
Hay deseos que no sabía ni que tenía. También te digo que he adaptado mis deseos al presupuesto del programa, porque tenía deseos muy grandes y al final me han dicho: “¿Estás mal de la olla? ¿Qué quieres, contratar un helicóptero? ¡Eso no puede ser!”. Son ilusiones, fantasías... y puedo avanzar alguna cosita.
Tenemos muchas ideas, entre ellas hay un viaje de carretera que haré acompañada de una persona que me parece muy graciosa; en el siguiente programa me intento pegar un fin de semana de la hostia porque este verano no he podido hacer vacaciones; tengo mucha ilusión por tocar un mono y voy a intentar conseguirlo, aunque puede ser que cuando lo tenga delante me acojone y me vaya sin tocarlo. Son caprichos, fantasías, ilusiones, todo dentro de nuestras posibilidades, y va a estar muy guay.
En la primera entrega dedicada al Orgullo LGTBI entrevistaste a José Manuel Parada, ¿veremos a más personajes conocidos como él?
Sí, de hecho vais a volver a ver a Parada en algún próximo programa, pero apareció por sorpresa porque ni yo lo sabía. Sí, vamos a ver muchas caras conocidas y voy a dar envidia a muchas chicas porque tenemos a grupos muy molones. Va a venir un grupo de cantantes que nos vuelven locas a las nenas y he tenido la suerte de que me canten al oído, como cuando Pablo Alborán lo hizo en los Goya. En la próxima entrega tenemos a un grupo que me encanta y que ha hecho un cover especial para el programa, es un grupo muy divertido, muy conocido, y le gusta mucho a la gente. En cada programa tenemos invitados; además, os vais a sorprender con la mezcla que estamos haciendo, porque tenemos una mezcla de invitados bastante loca.
En esta aventura en solitario, ¿has tenido que sentarte para reposar bien qué vas a hacer, o la espontaneidad sigue siendo el 100% del trabajo?
Hay que sentarse para ver qué se va a hacer porque tenemos un equipo de producción que tiene que ir preparando cosas, no puedo salir a la calle y hacer lo que me dé la gana porque tenemos que tener cosas previstas, pero la espontaneidad es la base del programa y estamos intentando mantener la esencia de cuando yo estaba en los reportajes. Ahora es distinto porque no voy a eventos y no hay photocalls, pero la esencia es la misma: soy yo, asalvajada, yendo a sitios en exteriores. Por supuesto prima la espontaneidad porque si me quitas eso me quedo en nada, como cuando bañas a un perro y se queda hecho polvo, le quitas todo el pelito. A mí me pasa lo mismo. Yo tengo que ser espontánea, no me sale ser de otra manera.
Con la situación que estamos viviendo por la pandemia, ¿notas que se pierde parte de esa espontaneidad? ¿Es la gente más reticente, incluso tú misma, a entablar contacto? ¿Se pierde la esencia de lo que eran tus entrevistas?
Tenemos que ser prudentes por la situación en la que estamos. Es evidente que no me puedo lanzar al cuello de nadie, no puedo tocar a la gente, llevamos mascarillas y hay unas medidas que hay que respetar. Pero, dentro de eso, nosotros en el programa estamos tomando las medidas necesarias y siempre que tenemos que interactuar con algún grupo o invitado se toman las medidas pertinentes. Me vais a ver entrevistando con la distancia de seguridad... y sin ningún problema. Tenemos una bola gigante en la que yo voy metida. Es mi burbuja, mi mundo, y con ella me puedo acercar a la gente. Se nota en el ambiente que la gente va con cuidado, pero estamos haciendo todo lo posible para que siga siendo lo más natural posible, cumpliendo las medidas y todo lo que hay que hacer.
Precisamente, esa bola a la que hacías mención aparece en los vídeos promocionales del programa como una especie de “óvulo” que te acompaña a todas partes. ¿Vas a estar metida en ella en todas las entregas?
Todo el rato no puedo estar dentro de la bola porque hay un tiempo y se acaba el aire. Eso es la muerte. Si llego a saber que hacía tanto calor no la pido. Y, además, se electrizan los pelos. La bola la vamos a utilizar en varios programas porque ya la hemos comprado, hay que usarla y nos va muy bien para algunas cosas que tenemos que hacer. Me vais a ver dentro y fuera de la bola, pero no me puedo tirar todo el programa dentro de la bola porque me muero de calor. Hemos recurrido a ella porque no queríamos perder ni un ápice de mi expresividad y yo no quería ir todo el rato con la mascarilla puesta. Entonces, hay momentos en los que recurrimos a la bola y así me puedo mover libremente dentro de mi burbuja.
En las promociones dices que utilizarás la bola para no contagiarte de coronavirus, pero al final acabaste contagiada. ¿Cómo te encuentras y cuál ha sido tu experiencia enfermando de Covid-19?
Yo he tenido mucha suerte porque he sido asintomática totalmente. No he sentido nada, pero ha sido un coñazo estar encerrada todo el día porque vivo en una casa muy pequeñita y no es agradable estar encerrado. Pero he tenido mucha suerte porque no he tenido ningún síntoma; no he perdido el olfato o el gusto, no he tenido fiebre... no me ha pasado absolutamente nada. Ha sido duro por estar confinada y haber tenido que retrasar el programa, pero no me he enterado de nada. Yo trabajo mano a mano con uno de los directores del programa, hacemos juntos el guión, y nos contagiamos los dos.
Volviendo al programa, ¿habrá algo de 'turra', de contenido profundo y mensaje, o va a ser solo comedia?
No, no. Yo profunda no soy. Va a ser todo cachondeo. Soy cero profunda, turra no va a haber. Además, es que es súper divertido el programa. No paran de pasar cosas locas todo el rato, tiene mucho ritmo. Yo creo que va a ser de esos programas que cuando acaban la gente se queda con gana de más porque se pasan volando. Es media horita y no paran de pasar cosas todo el rato, así que de turra nada.
