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El show de Aguirre en su vuelta a Telemadrid: llama “podemita” a la presentadora, pide la hora y se va porque son “antiPP”

Verónica Sanz y Esperanza Aguirre, durante su encuentro en Buenos días, Madrid

Pedro Zárate

Esperanza Aguirre ha vuelto a pisar un plató de Telemadrid después de tres años sin hacerlo. La última vez que visitó la cadena autonómica, todavía estaba controlada por su partido. En su retorno, ha seguido su estilo, dando guerra tanto a los tertulianos como a la presentadora de 'Buenos días, Madrid', Verónica Sanz y dejando claro que no comulga con esta nueva etapa que dista de lo que fue en su día 'TeleEspe'.

Ya fuese porque desde el programa se habían pasado de tiempo o por las preguntas, a su juicio, impertinentes que le estaban realizando, lo cierto es que la expresidenta madrileña ha mostrado en todo momento su malestar por lo que estaba viviendo en el matinal de la cadena autonómica. Hasta el punto de que, pasados 15 minutos de la hora pactada, se ha levantado y ha abandonado el plató por voluntad propia.

Aguirre solo se ha encontrado en su salsa al inicio de la entrevista, cuando ha sido preguntada por la situación en Catalunya. Una vez que se han ido poniendo sobre la mesa temas relacionados con el Partido Popular, la incomodidad de la entrevistada ha ido en aumento. Sobre todo cuando se ha empezado a hablar de asuntos como el máster de Pablo Casado o el supuesto agujero económico que ha dejado la Ciudad de la Justicia, uno de los macroproyectos de su etapa al frente de la Comunidad de Madrid y que la Audiencia Nacional está investigando actualmente.

Para ella, preguntar por estos hechos era un sinsentido porque “hemos venido a un programa de actualidad”. Y éstos, bajo su punto de vista, no eran de actualidad.

Aguirre llama “podemita” a Verónica Sanz

En cualquier caso, ésta ha sido solo una de las diversas críticas que ha hecho al formato de Telemadrid, al que ha acusado de tener una escaleta “antiPP”, poniendo como ejemplo el abandono que el exdiputado del PP Antonio Martín Beaumont protagonizó en el programa esta misma semana. Además, ha llamado “podemita” a Verónica Sanz por preguntar únicamente “por las denuncias contra el Partido Popular” y “por cuestiones que solo pueden molestar” a la formación conservadora.

Ante tales acusaciones, la presentadora ha defendido los “criterios” del programa y que a ella nadie le ha preguntado a qué partido vota para conseguir un trabajo en Telemadrid. Además, ha lamentado que Aguirre haya sentido que asistía a un “combate dialéctico antiPP”, como así ha definido la expresidenta la entrevista.

Para entonces, la propia Aguirre ya había advertido que su paso por el matinal estaba durando más de lo pactado: “Oye, son las 9:10. A mí me han dicho de 8:35 a 9”. La entrevista así en sus últimos compases, teniendo Aguirre tiempo para decir que “este programa va contra el PP”, que no ve Telemadrid y que tampoco sintoniza 'Buenos días, Madrid' porque “tengo que llevar a mis nietos al colegio”.

Además, ha llamado a Manuela Carmena “abuela bonachona” y ha reprochado al programa que no le hayan hecho preguntas más amables como, por ejemplo, de qué se siente más “orgullosa” de sus años como presidenta de la Comunidad de Madrid.

Finalmente, y como ya hiciera en otros programas como 'Salvados', Aguirre ha puesto fin a la entrevista cuando ella ha creído oportuno, levantándose y despidiéndose de los allí presentes, incrédulos ante la actitud “guerrera” de la que fuera líder del PP madrileño.

De esta forma ha acabado su regreso a un plató de la cadena autonómica tras tres años de ausencia. En aquel ya lejano 2015, Aguirre seguía en política y Telemadrid se veía envuelta en multitud de acusaciones por manipulación, al favorecer los intereses del PP, mientras los trabajadores se alzaban en pie de guerra bajo el paraguas de la plataforma “Salvemos Telemadrid”.

En la nueva etapa tras la elección del director de Telemadrid Jose Pablo López por mayoría y acuerdo parlamentario en la Asamblea (con los votos a favor de PP, PSOE-M, Ciudadanos y la abstención de Podemos), el PP ha acabado ejerciendo una oposición contra la cadena porque no ha evitado informar de polémicas como el caso Cifuentes.

En este sentido, Aguirre ya acusó a la nueva Telemadrid de manipular informaciones sobre el caso Pablo Casado, mientras que el mencionado exdiputado popular Antonio Martín Beaumont se marchó de 'Buenos días, Madrid' porque se hablaba más del máster del actual presidente popular y de la exhumación de Franco que de otros asuntos ajenos al PP.

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