Sálvame ha entonado el mea culpa por haber “confundido” al público con una carta que atribuyó a Mila Ximénez a pesar de que no había sido escrito por ella.
Este jueves, el magacín de Telecinco quiso celebrar su 13 aniversario recordando a la tertuliana, fallecida el año pasado, para lo cual redactó esta carta que Mila “hubiera escrito al programa en su decimotercer aniversario”. Aunque se utilizó el condicional para dejar claro que el texto no era original, Sálvame jugó con la idea de que el manuscrito llevaba la firma de la periodista, tal y como se llegó a decir.
Los compañeros de Mila rompieron a llorar y el programa vivió otro momento emotivo recordando a una de sus tertulianas más conocidas, pero esta iniciativa no ha gustado a todo el mundo. Al parecer, su hija se ha molestado.
Las disculpas han llegado este viernes por boca de quien leyera la carta ayer: Terelu Campos. “La carta ha llevado a confusión, así que quiero aclarar que en ningún momento Mila Ximénez dejó un manuscrito con esas palabras”, ha dicho la presentadora.
Según Terelu, “el programa recogió manifestaciones de Mila a lo largo de su vida, a través de su bolg, de sus entrevistas, incluso de sus manifestaciones aquí en Sálvame, y las reunió en forma de carta”. “Queremos dejar claro esto porque me consta que ha provocado dolor a la persona más importante en la vida de Mila”.
Dirigiéndose a Alba Santana, hija de la tertuliana, Terelu ha mostrado su pesar por el comportamiento de Sálvame: “Alba, el programa quiere pedirte disculpas si, de alguna manera, y sin ninguna intención, hemos causado este dolor. Sólo queríamos que Mila estuviera presente con esa carta que hipotéticamente ella habría escrito (...) Alba, mi vida, te mando un beso de parte de todo el programa y nuestras disculpas”, ha concluido su rectificación la hija de María Teresa Campos.
Qué decía la supuesta carta de Mila Ximénez
En esta carta inventada, Mila empieza diciendo que se ha “retirado un momento junto al puesto de dirección para escribir tranquila mientras seguís discutiendo en plató no sé muy bien qué”.
En otros instantes sorprende porque da a entender que está hablando ya desde el cielo. En concreto, cuando le asegura a María Patiño que “aquí arriba he encontrado a una persona que me ha preguntado por ti”. Por lo que comenta sobre dicha persona, a la que sería un “hombre muy serio pero que tiene pinta de tener un gran corazón”, todo apunta a que se está refiriendo a su padre, fallecido en 2017.
En su desenlace, el texto concluye con la colaboradora afirmando que se siente “afortunada” por “haber trabajado en un programa que ha hecho que la vida de muchas personas sea más entretenida y mejor”.
El contenido íntegro de la carta
“Hola, siempre he sido muy consciente de la suerte que he tenido de tener a compañeros como vosotros en mi vida. Porque no sois solo eso, sois amigos, incluso os llamaría familia. Esta carta llega desde el pasado. Me he retirado un momento junto al puesto de dirección del programa para escribir tranquila mientras vosotros seguís discutiendo en plató por no sé muy bien qué. Al terminar esta nota la meteré en un sobre y la recibiréis por desgracia cuando yo ya no esté aquí.
Sé que mi tiempo se está acabando, pero he decidido regalarme otra vida. Una sin miedos y donde solo tenga espacio la esperanza y las risas. Ojalá dure mucho. Cada día, cuando me despierto, soy consciente de que puede ser el último. Por eso, mi primer recuerdo es siempre para Alba, mi hija. A la que le doy las gracias por haber estado en mi vida y haberme dado mucho amor. Incluso más del que me merezco como madre.
Siempre he intentado hacerlo lo mejor posible con ella, pero sé que he fallado y que he cometido errores. Y eso aún me duele. Todavía lo llevo en mi corazón, espero que Alba haya podido perdonármelo. Perdónamelo mi vida, porque yo voy a ser incapaz de perdonarme a mi misma. Mientras tanto sueño con jugar con mis nietos y pasear horas por nuestros parques. Volver a disfrutar de las barbacoas de mi yerno en el jardín, quedarnos en la muralla después de un día de curro... En fin. Echo de menos la vida. Os echo de menos a vosotros.
Jorge, tus consejos siempre han sido de vital importancia para mi. Sabes que te consultaba todo, hasta los retoques que me hacía. Siempre me recuerdas que el cansancio es normal al final de los procesos de la vida. Y que el dolor y los recuerdos te visitan más a menudo en los cuartos oscuros de fragilidad. Qué suerte tenerte conmigo en esos momentos de oscuridad.
Kiko, tú y yo hemos reído y sufrido mucho juntos. Hemos disfrutado con los cientos de mensajes que los espectadores nos mandaban dándonos gracias por la compañía. Y por hacerles la vida más llevadera. Te agradezco que hayas sido generoso conmigo, que me hayas enseñado tanto, que haya podido contar contigo hasta el final.
María, tú también has sido una grandísima amiga y cómplice. Por cierto, aquí arriba me he encontrado con una persona que me ha preguntado por ti. Es un hombre muy serio, pero que tiene pinta de tener un gran corazón. Me ha pedido que te diga que está muy orgulloso de ti, que lamenta mucho no haber tenido más tiempo para despedirse, pero cada día está a tu lado y en Navidad siempre se pone junto al árbol para proteger la estrella. Él dice que ya sabes a qué se refiere.
Esta carta está terminando y yo estaré ya viéndoos desde el cielo con una sonrisa y pensando qué feliz he sido en Sálvame y qué afortunada soy de haber trabajado en un programa que ha hecho que la vida de muchas personas sea más entretenida y mejor“.