'MasterChef 11' expulsó a uno de los más queridos, tras la “canallada” del resto de compañeros

Tuki, Jorge Juan, Merce y Pilu en 'MasterChef 11'

Paula Hergar

La entrega de este martes en MasterChef 11 demostró que las decisiones grupales pueden tener graves consecuencias en el concurso de los aspirantes. Tuki se convirtió en el nuevo expulsado de la edición, tras haber sido salvado por sus compañeros y después, devuelto a la prueba de eliminación.

“Ha sido una canallada”, decía alguno de los concursantes. Pero el expulsado no lo tuvo en cuenta y aseguró que también podría haber actuado como ellos.

Todo eso en una noche en la que Ana se desesperó como capitana de los exteriores y Merce se vio saliendo de su talent favorito.

Prueba de exteriores con las lágrimas de Ana como capitana

Los aspirantes desembarcaron en Vejer de la Frontera para conocer la Fundación Montenmedio Contemporánea, un museo de arte contemporáneo al aire libre.

Allí, los jueces invitaron al chef Paco Doncel que presentó a los aspirantes unas tapas diseñadas por él que tenían que reproducir en 180 minutos, para servir a 80 personalidades del mundo del arte contemporáneo y hosteleros de la zona.

Todos ellos se dividieron en dos equipos: uno rojo capitaneado por Ana que se rodeó por Merce, Fray Marcos, Tuki, Jeremy, Pilu, Alex, Eneko y Jorge Juan. Y otro azul encabezado por Marta y formado por Camino, Luka, Leti, Jhota, Lluís, Sergio, Laura, David y Francesc.

A mitad de cocinado los jueces obligaron a las capitanas a prescindir de uno, dos y hasta tres de sus compañeros, para mayor dificultad. Y entre la tensión y las “meteduras de pata” que corrigió Jordi, Ana se derrumbó: “No paran de ponerme impedimentos”, lamentaba entre lágrimas, y sus compañeros corrían a animarle.

Los platos acabaron saliendo pero con una clara desventaja de los elaborados por los rojos, que acabaron con una capitana totalmente derrumbada. En la valoración de los jueces pidieron mayor velocidad, menos caos y más organización en la próxima prueba. Sobre los rojos señalaron que Ana no había ejercido “una buena capitanía por la falta de determinación y reflexión”. Mientras que los azules sí tuvieron “ a una buena directora de orquesta”.

Por todo ello, fue el equipo azul el ganador. Una noticia que celebraron Marta, Camino, Luka, Sergio, Laura, Leti, Jhota, Lluís, David y Francesc.

La prueba de eliminación despidió a Tuki

De regreso a las cocinas, a Ana, Merce, Fray Marcos, Tuki, Jeremy, Pilu, Alex, Eneko y Jorge Juan les esperaba una prueba de eliminación con los sabores del Japón más misterioso como protagonistas. Pero antes de conocer el reto, los delantales blancos tuvieron la oportunidad de salvar a uno: Tuki, acordaron todos. Seguidamente, los jueces pidieron que entonces escogieran a otro para ir a eliminación, y todos devolvieron al mismo a eliminación.

Por lo que, con Tuki de vuelta a la palestra, el chef Hideki Matsuhisa fue el encargado de mostrarles el secreto mejor guardado de la gastronomía nipona: el hongo Koji. Se trata de un hongo que aparece tras un proceso de fermentación del arroz, se utiliza para enmohecer determinados ingredientes y les da un sabor muy característico.

Tras conocer tal información, el reto consistió en preparar un plato con sabor japonés, que incluyera alguna elaboración en donde esté presente el Koji. Una prueba que “hundió” a Merce que nunca había experimentado con la cocina japonesa y no pudo contener las lágrimas.

En la cata, las valoraciones positivas se las llevaron el caldo “muy rico” de Eneko, los “sabrosos” pensamientos de Fray Marcos, el pescado “fino” de Álex, los fideos “correctos” de Ana, como también el tataki “aprobado raspado” de Merce y el “buen” sake de Jeremy . Mientras que las negativas las obtuvieron el caldo “tójunto” de Tuki, el arroz “seco, crudo y duro” de Jorge Juan y el tartar “raro y sin sentido” de Pilu.

Los jueces se marcharon a deliberar y al regresar, sentenciaron: “El aspirante que no continúa en las cocinas es Tuki”. Justo el concursante que podría haber sido salvado al arranque del reto. “Quería haber aprendido mucho más, pero ha sido un ritmo frenético. Me ha gustado el trabajo”, reflexionaba agradeciendo la oportunidad.

 

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