La alerta amarilla declarada en la Comunidad de Madrid por las fuertes lluvias ha acabado teniendo su efecto en la programación televisiva. Todo es mentira ha tenido que acabar tirando de un generador este 1 de junio tras haberse quedado sin luz en mitad de la emisión.
A poco más de media hora para que acabara la emisión, en mitad de un monólogo cómico de Virginia Riezu sobre Macarena Olona, el plató quedó completamente a oscuras. “¡Se ha ido la luz!”, exclamó ella. Ante el desconcierto evidente por el apagón, que por momentos parecía un juego con la iluminación desde realización para acompañar el gag, Risto tuvo intervenir: “Está tronando ahí fuera y se acaba de ir la luz”.
Pasados veinte segundos, todo pareció volver a la normalidad, mientras cundían las risas entre unas y otros: “¡Que tengo tendido!”, exclamaba Marta Flich. Eso sí, Mejide desvelaba que estaban bajo mínimos cuando Riezu trataba de continuar con su alocución: “Date prisa que no sé cuanto dura el generador”.
“Y si nos quitan, ¿pondrán a Ana Rosa?”
De hecho, luego añadiría: “No nos alarguemos mucho... Os cuento: son las cinco y cuarto de la tarde, en estos momentos estamos haciendo el programa gracias al grupo electrógeno que tiene Mediaset. Es decir, en cualquier momento nos quedamos ya sin luz. La luz ha dejado de funcionar, no tenemos suministro eléctrico”.
“Perdona... Y si nos quitan, ¿pondrán a Ana Rosa?”, reaccionó con rapidez Antonio Castelo, aludiendo al futuro salto de Quintana a las tardes para comandar el programa que sustituya a Sálvame a partir de septiembre. “Ella tendrá su propio grupo electrógeno”, puntuó Riezu. La broma pasó, eso sí, desapercibida por parte de Risto, que se limitó a pedir brío a su equipo.
“Vamos a correr, a ver si nos vamos antes”, añadió Flich. Todo es mentira, pese a todo, pudo acabar con tranquilidad, y con luz, la emisión.