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Orange is the new black: otro ejemplo de que las series carcelarias (casi) siempre triunfan

Orange is the new black - Temporada 6

Marcos Méndez

Este sábado 28 de julio, a partir de las 09:50 horas, Movistar Series lanza en exclusiva la sexta temporada completa de Orange Is the New Black, el drama carcelario de Netflix doce veces nominado a los Premios Emmy.

La ficción creada por Jenji Kohan, que tiene firmada una séptima temporada, sigue contando con su habitual reparto femenino, encabezado por Taylor Schilling, Uzo Aduba (Ojos Locos), Kate Mulgrew (Galina “Red” Reznikov) y Danielle Brooks (Taystee), entre otras. Además, esta temporada se suma la actriz Rebecca Knox (Bulls) como Tina Swope, una nueva reclusa pequeña pero matona.

Así será la temporada 6 de Orange Is The New Black

Tras los intensos tres días de amotinamiento al final de la quinta temporada, gran parte de las reclusas fueron divididas en dos autobuses y trasladadas a otro lugar del que no saben nada. Piper, Alex, Frieda, Suzanne, Cindy, Taystee, Red, Nicky y Gloria esperaban la irrupción de los CERT en su improvisado búnker sin perder la dignidad.

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En los nuevos episodios las historias se dividirán en dos centros penitenciarios diferentes, algo que se verá más claramente en la trama de Flaca y Maritza, que han sido separadas. Mientras tanto, Lorna afrontará su embarazo.

El prestigioso trío actual de series carcelarias

La historia de la ficción televisiva siempre ha tenido prestigiosas representantes carcelarias. Y más concretamente, en torno a la vida en prisión de las mujeres.

En la actualidad hay hasta tres ejemplos evidentes de ficciones que han sabido profundizar en el juego que dan las tramas de una cárcel femenina. El primero de ellos es, evidentemente, Orange Is The New Black, que arrancó sus emisiones en el año 2013 y como decimos este sábado estrena su sexta temporada.

El segundo ejemplo es australiano, Wenworth. Como la anterior, también nació en el 2013, aunque emite actualmente su sexta temporada, que se estrenó el 19 de junio. Protagonizada por Kate Atkinson como la Comisionada y Subgobernadora de la prisión Vera Bennett, cuenta el día a día de la cárcel de Wenworth, repartiendo protagonismo a la visión tanto de las reclusas como de las funcionarias y funcionarios. Es el reboot de la clásica Prisoner Cell Block H, de la que hablaremos más adelante.

El tercer ejemplo es español. Vis a Vis nació en Antena 3 en el año 2015, y tras dos temporadas en la cadena de Atresmedia obtuvo una segunda vida en FOX España, que emitió su tercera tanda en este 2018 y prepara la cuarta para 2019. Las vivencias de Maggie Civantos (Maca), Najwa Nimri (Zulema), Berta Vázquez (Rizos) y Alba Flores (Saray), entre otras, han creado un enorme fenómeno fan conocido como “Marea amarilla” que las sigue cada capítulo en Cruz del Norte.

Najwa Nimri y Mª Isabel Díaz de Vis a Vis: "Estamos haciendo la serie que se quiere hacer" 360

Mujeres presidiarias, una tradición en TV desde 1974

Pese a existir hasta tres ficciones internacionales sobre mujeres diferentes conviviendo y triunfando en la actualidad -con seis, seis y cuatro temporadas respectivamente-, lo cierto es que este tipo de tramas no son ni mucho menos una “moda” pasajera y puntual.

Habría que remontarse hasta el año 1974, cuando se estrenó la ficción Within These Walls. Durante cinco temporadas, hasta 1978, esta serie británica protagonizada por Jerome Willis, Mona Bruce, Denys Hawthorne y Beth Harris comenzó a mostrar en la pequeña pantalla cómo era la vida en una prisión femenina.

Como si estuviera recogiendo el testigo de la anterior, en 1979 se estrenó Prisoner Cell Block H, una ficción australiana que se alargó durante nada menos que 692 episodios, hasta el año 1986. Protagonizada por Elspeth Ballantyne, Betty Bobbitt y Sheila Florance, se la considera una verdadera serie de culto. Se situaba en la prisión femenina de alta seguridad de Wentworth, y narraba cómo llegaron a prisión, cómo se desenvolvían y qué hacían al salir las reclusas y los funcionarios, así como las relaciones entre ellos.

Tras un tiempo de sequía sin ninguna serie de este tipo en televisión, en 1999 se produjo el lanzamiento de Bad Girls, una exitosa ficción británica que se alargó 8 temporadas hasta el año 2006. Encabezada por Kika Mirylees, Victoria Alcock y Helen Fraser, su acción se desarrollaba en la prisión de mujeres de Larkhall, y fue más transgresora al incluir con mayor crudeza la violencia, un lenguaje más carcelario y sobre todo tramas de contenido sexual, tanto entre las reclusas como con los funcionarios, lo que le permitió tocar contenidos como la homosexualidad o el maltrato.

Como si los creativos de televisión no quisieran dejar huérfana a la pequeña pantalla de estas historias, en 2008 se estrenó Capadocia, una serie de HBO Latin America que también narraba la vida en prisión de un grupo de mujeres, trasladando la acción hasta una cárcel femenina de México. Durante 3 temporadas, hasta el 2012, sus tramas sobre corrupción política, tráfico de drogas y violencia se mantuvieron en la cadena.

Esta especie de “tradición” televisiva fue seguida en el año 2013 por Wenworth y por Orange is the new black, y más tarde por Vis a Vis, que siguen demostrando que las ficciones carcelarias sobre mujeres suelen conseguir una amplia y exitosa trayectoria en la pequeña pantalla.

El gusto televisivo por “meterse” en las cárceles

Por supuesto, las ficciones carcelarias no sólo se han fijado en las mujeres. Distintas series en las últimas décadas también se han ambientado en un escenario tan recurrente y atractivo como una prisión para desarrollar sus tramas desde distintos puntos de vista.

Con más o menos éxito, estos son algunos ejemplos de series tanto nacionales como internacionales que también han explotado el mundo de la cárcel:

  • Porridge (1973-1977): Considerada una de las mejores sitcoms británicas de la historia, pese a alargarse 5 años apenas emitió 21 episodios en 3 temporadas en la BBC. Narraba con humor la vida en prisión de Norman Stanley Fletcher (Ronnie Barker) y su peculiar relación con su compañero de celda Lennie Godber (Richard Beckinsale). En frente, los funcionarios Mr. Mackay (Fulton Mackay) y Mr. Barrowclough (Brian Wilde). Ganó 4 Premios Bafta.
  • Oz (1997-2003): Para muchos, el principal exponente de las ficciones carcelarias. Este drama de HBO con Ernie Hudson, J.K. Simmons, Lee Tergesen, entre otros; sirvió casi como un ensayo para reflexionar sobre el sistema penitenciario de los Estados Unidos. Corrupción, violencia, crítica a la pena de muerte y la imposibilidad de rehabilitarse eran algunos de los temas tratados por su creador, Tom Fontana.
  • Prison Break (2005-2009): La ficción creada por Paul Scheuring, y protagonizada por Wentworth Miller y Dominic Purcell, se convirtió en un fenómeno en FOX. El elaborado plan de Michael Scofield para sacar a su hermano de la Penitenciaría Estatal Fox River, encriptado en sus tatuajes, sorprendió a público y crítica y se ganó muchos reconocimientos. Su desarrollo posterior no fue tan emblemático, pero el recuerdo del público fue tal que en 2017 regresó con una quinta temporada.
  • Alcatraz (2012): Pese a nacer con el prestigioso sello de J.J. Abrams y estar protagonizada por dos rostros conocidos como Sarah Jones y Jorge Garcia, esta serie de FOX sobre la desaparición de más de 100 prisioneros y 40 guardias de la famosa cárcel de Alcatraz no convenció a crítica ni a público, por lo que fue cancelada tras una única temporada de 13 capítulos.
  • La Fuga (2012): En España también ha habido ficciones desarrolladas en cárceles, como la que protagonizaron María Valverde y Aitor Luna en Telecinco. Ambientada en un futuro distópico bajo una dictadura fascista (similar al de ahora en El cuento de la criada), las tramas revolucionarias y de resistencia de sus protagonistas no lograron el apoyo del público, y se despidieron después de una sola tanda de 12 episodios.
  • El Marginal (2016-2018): Aunque menos conocida que Orange is the new black, esta serie argentina de Netflix tiene rendida a la crítica y gana seguidores gracias a la proyección de la plataforma. Su gran atractivo es plantear otro punto de vista, ya que su protagonista Miguel Palacios (Juan Minujín) es un expolicía que ingresa en la prisión de San Onofre para tratar de acabar desde dentro con una banda de presos y funcionarios que ha secuestrado a la hija de un importante juez. Su éxito hizo que Netflix hiciese una segunda temporada como precuela, que se lanzó el 17 de julio de este año.
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