Primer contrato firmado y declaración de amor en The Wall

La séptima entrega de The Wall ha traído consigo la primera firma de contrato por parte de las concursantes. Esperanza y Mari Paz acudían al programa con el objetivo de ganar dinero para abrir una escuela para niños disléxicos, y podrán llevarla a cabo su objetivo pese a acabar con menos dinero del que habían obtenido en el muro.

Mari Paz, aislada durante el concurso, tuvo que tomar una difícil decisión: arriesgarse a tomar el dinero recaudado hasta el momento por su hermana, sin saber la cantidad; o aceptar la cifra que le daba el programa. Aceptó esta última.

“Te cuento lo que teníamos: Noventa y tantos mil euros”, le reveló Esperanza. La cantidad exacta era 94.646. Su hermana se derrumbó al escucharla, y ella no tardó en consolarla. “Yo te entiendo, que ahí se está muy sola y tienes que tener decisiones importantes”.

En cualquier caso, Carlos Sobera les dio una buena noticia: el acuerdo con el programa les dejaba un premio nada desdeñable, de 34.115 euros. “¡Podréis montar vuestra escuela!”, proclamó.

Más allá de eso, el programa vivió un momento más cercano al otro espacio presentado por Sobera en Mediaset, First Dates. El vasco se acercó a las parejas de las dos participantes. José Ramón, marido de Mari Paz, y David, novio de Esperanza. A este último el comunicador le preguntó por qué no se había casado ya con su pareja. “Es solo un trámite... Pero con decirte que llevamos seis años viviendo juntos...”, respondió él.

“Pero tú la quieres, ¿no?”, insistió Sobera. “Claro, si no no estaría aquí”, contestó David. “¡Pues demuéstraselo!”, vociferó el rostro de Telecinco, que conminó al muchacho a declararle su amor a la concursante con la rodilla hincada en el suelo.