En 'Todo es mentira'

Risto, ante un exorcista que defiende la “subyugación demoníaca” del obispo de Solsona: “Saludos al siglo XV”

Risto ante el exorcista

Redacción

El caso del ya exobispo de Solsona, Xavier Novell, está siendo uno de los temas más destacados y amortizados en las escaletas de los programas de actualidad desde el inicio de temporada. El prelado, acusado con anterioridad de promover y participar en 'terapias de conversión' de homosexuales, renunció al episcopado a finales de agosto para iniciar una relación con una escritora especializada en novelas eróticas satánicas, ha provocado el enésimo escándalo para la Iglesia Católica en España, algo que ha dado pie a debates y entrevistas tan atípicas como la vista este martes en Todo es mentira.

En el segundo programa de su cuarta temporada en Cuatro, Risto Mejide tuvo a bien dar la palabra a Manuel Adolfo Acuña, obispo luterano y exorcista, para que hablara en calidad de experto sobre el caso. Lo cierto es que la experiencia distó de ser agradable, como era de esperar. Tanto Mejide como Pilar Rahola se enfrentaron vivamente al invitado, de quien se cuestionaban sus méritos.

Adolfo, de 49 años, aseguraba haber realizado millares de exorcismos durante sus 18 años de carrera. “Perdí la cuenta en el 1.200”, decía, algo que pusieron en duda en el programa. Más aún cuando, a juicio de este clérigo, el caso de Novell puede tener implicaciones demoníacas.

Consideraba que no era una “posesión”, sino una “subyugación demoníaca” para doblegar su voluntad. “Cuando uno se enamora no lo hace de alguien que esté totalmente en las antípodas de sus criterios, principios y valores”, continuaba.

Rahola: “Tengo la impresión de estar en la Edad Media”

Tengo la impresión de estar en un programa de la Edad Media, escuchando conceptos que me parecen deplorables”, comentaba Rahola. “Lo siento por usted, señora”, replicaba el entrevistado. Esta reacción llevó a la tertuliana a ironizar con la supuesta posesión de Novell: “Está claro que el obispo Xavier estaba poseído, sobre todo cuando intentaba curar la homosexualidad o condenaba el placer sexual… ¡entonces si que era el demonio!”.

“Con todo el respeto, señor obispo luterano, creo que se ha definido perfectamente”, tomaba la palabra Celia Villalobos, que también cuestionaba la idea de la demonización que defendía el invitado. “¿Usted cree que una señora que escribe de temas demoníacos es que está poseída por el demonio y tiene mucha imaginación?”. “Si ella escribe de esas cosas, ahí tiene su corazón”, respondió él, insistiendo en que era “un tema muy serio”. “Aquí hay un hombre de dios que gravemente acaba dejando su ministerio y si fuera una buena mujer, le diría que siguiera en su obra”.

Llegados a este punto, Mejide decidió finalizar la conversación con estas palabras: “Yo lo siento por todos los creyentes porque con ejemplos como el suyo realmente dejan en muy mal lugar a la fe”. “Yo lo siento por ustedes”, replicó el obispo enfadado, proclamando que defiende “la tradición de la iglesia”. “Cuídese y recuerdos al siglo XV”, terminó Risto. “Recuerdos a usted de los dueños de la ignorancia”, culminó el entrevistado, antes de un corte abrupto a la conexión.

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