Regañó a un cocinero como en su otro programa

Chicote emula su 'Pesadilla' en 'Top Chef' con una bronca

Alberto Chicote abronca a Filippetti en Top Chef

La nueva entrega de 'Top Chef' en Antena 3 deparó una escena más típica de 'Pesadilla en la cocina', el otro programa de Alberto Chicote en laSexta.

El jurado del talent culinario de Atresmedia decidió tomar cartas en el asunto al ver que Filippetti no cogía las riendas del equipo que lideraba, y acabó regañándole como tantas veces hace en su otro espacio.

Chicote se dirigió hasta el equipo y abroncó a Filippetti, que le plantó cara. Pero el juez le hizo ver que él mismo le había reconocido que se había rendido, y ese era el motivo de su enfado.

Al final, el propio Filippetti lamentó no haber podido liderar a su equipo y haber perdido las formas.

Julio, tercer expulsado de 'Top Chef'

El chef madrileño tuvo que recoger sus cuchillos y marcharse tras imponerse Melissa. “El plato de Julio ha tenido errores más importantes que el tuyo (Melissa)”, dijo Alberto Chicote.

Tras conocer el veredicto de los jueces, Julio explicó que sabía que ese no era su día: “Sabía dónde quería llegar pero he cometido los errores técnicos. Sé dónde he fallado, dónde tengo que mejorarlo y sé que haré ese plato”, dijo a los jueces. “Me voy contento. He aprendido muchas cosas”, confesó antes de despedirse.

El 'orgasmo gastronómico' de Melissa

En la prueba de la última oportunidad, Melissa y Julio debían realizar un helado salado empleando nitrógeno líquido para acelerar la congelación de los productos.

El manejo del nitrógeno líquido requiere mucha precaución porque si entra en contacto con la piel puede producir quemaduras. Melissa pidió ayuda a Julio ya que explicó que le provocaba miedo al no haber hecho nunca nada con este producto.

Al ver que el helado se iba haciendo, la granadina ha reconocido que para ella es un “orgasmo gastronómico”, algo “placentero porque me está saliendo”.

Los niños se revelan con los concursantes

La prueba grupal de 'Top Chef' consistía en cocinar en un colegio para 30 niños. A pesar de ser un público exigente, los concursantes llevaron la prueba con descontrol mientras Susi Díaz ya dejaba claro que si la comida no estaba preparada cuando los pequeños llegasen, tendrían problemas.

Ante la mirada de desesperación de Alberto Chicote, los niños del colegio se revelaban y pedían la comida al grito de “queremos comer”.

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