Crónica Lunes

GH: Cupido mata moscas con el rabo

Si en Estados Unidos han prohibido la emisión de Speedy Gonzáles, en la casa de Guadalix se escuchan con atención sus opiniones. A la pregunta: ¿qué opina Eduardo de sus compañeros?, dictaminó que Candi elude los problemas; Carol, es fuerte en sus convicciones y la más sexy; Elba hace comentarios sabios; Javito es alegre aunque haga bromas pesadas; Jorge, un buenazo; Kiko es serio y dialogante; Óscar es un buenazo y Patricia es muy visceral.

Ness quedó exento de ser psicoanalizado porque continúa en la casa del Big Brother en el D.F. Ayer fue noche de nominaciones y de terror. Como hace unas semanas sucediera en el GH patrio, el recinto se transformó en la sede para una noche de Halloween memorable. La dirección del programa azteca, que comparte ideario con el director Robert Rodríguez, urdió una broma con Ness como cómplice. El alicantino realizó una sesión de espiritismo que sería la envidia de la mismísima bruja Lola. Las luces se encendieron y apagaron solas, se oían horripilantes gritos e inquietantes sonidos de ultratumba que llevaron a Vero, una de las concursantes, al borde del desfallecimiento.

Los concursantes han superado la prueba del vídeo-clip y, de paso, hemos descubierto a una estrella en ciernes: Jorge. Los responsable de la MTV ya han tomado nota de su memorable actuación. La hipótesis Yo, Claudio aplicada al gaditano toma fuerza. Se encargó de refutarla de nuevo durante una conversación con Eduardo, que preguntó acerca de los favoritos para ganar el concurso. La respuesta fue concluyente: “¿Para ganador aquí dentro?...Sinceramente, ¿Quieres sinceridad? Yo” . Para despistar, volvió a sembrar el desconcierto asegurando que “me estaba enamorando un poquillo de Raquel; Veía que era una persona que decía las cosas a la cara”. Las flechas de Cupido son realmente caprichosas.

Javito y Kiko creían que iban a pasar 24 horas en la suite, pero ha resultado ser la Mansión Playboy. En el jacuzzi esperaban unas chicas que hermanaban el programa de Telecinco con ese clásico contemporáneo que es Confianza Ciega. El canto de sirenas fue letal para Javito: “Bueno, ¿os animáis?, está calentita el agua”. Mientras el Ulises gallego se apresuraba en desnudarse, recordó a su compañero que su pareja asistía a la escena como espectadora por medio del circuito de vídeo: “Ahora está flipando una que yo me sé”. Kiko duda por unos instantes (“Ya, por eso... No sé...”) pero su cerebro, repartido por diferentes puntos de su anatomía, resolvió acompañar a Javito. Patricia, con ese don para la ironía sutil que la fortuna le ha otorgado, acudió a una de sus expresiones predilectas: “Iros los dos a tomar por culo” .

Etiquetas
stats