Estreno en EE.UU.

El “Gran Hermano” americano sorprende a la audiencia con el factor “Ex”

Con este giro de tuerca, la cadena norteamericana CBS pretende sorprender a la audiencia en la cuarta edición de Big Brother, que se estrena hoy martes, 8 de julio. El programa sigue la convivencia de un grupo de concursantes en una casa de California, con la ya conocida mecánica del formato de Endemol: los huéspedes se nominan entre ellos para expulsar a uno cada semana. El premio para el ganador, al final de los tres meses, son 500.000 dólares. La CBS confía en que el “factor ex” hará que esta edición sea única y original para los espectadores. “Ningún reality show ha hecho esto antes”, dice el productor ejecutivo, Arnold Shapiro, a la revista Zap2it. “El resultado es totalmente imprevisible; lo único seguro es que será un shock para los participantes, que tendrán que replantearse su estrategia”. Cuatro de los concursantes seleccionados descubrirán hoy, en el estreno del programa, que sus ex novios o ex novias también están allí, preparados para competir durante tres meses por el premio de 500.000 dólares. Los concursantes se encuentran aislados en un hotel hasta el comienzo del programa, por lo que desconocen la sorpresa que les tiene preparada el concurso. A Allison Grodner, una de las productoras, se le ocurrió esta idea como una manera de asegurarse “el conflicto” desde el mismo comienzo del programa. Ninguna de las parejas de ex llegaron a estar casadas o a tener hijos, y los motivos de su separación son diferentes en cada caso. “Algunos terminaron bien su relación, otros no quieren volver a verse en la vida, a otros les gustaría darse una segunda oportunidad.. etc”.

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