'Making a Murderer': nuevas pruebas apuntan a otro culpable que podría liberar a Steven Avery

'Making a Murderer' es la serie de Netflix que revolucionó a Estados Unidos el año pasado por el caso judicial de Steven Avery. Desde entonces el público sigue con mucha atención todos los pasos que se están dando por parte de los abogados del encarcelado.

La historia que cuenta 'Making a Murderer' es la de un joven Avery que fue encarcelado durante 18 años por una supuesta violación y en 2003 se confirmó su inocencia tras pruebas de ADN. Poco tiempo después, cuando ya era adulto, fue nuevamente acusado por el asesinato de la fotógrafa Teresa Halbach. La duda de si vuelve a ser un error judicial planea sobre él, sobre todo desde el estreno de la serie.

Teresa abandonó viva la propiedad de Avery

En la actualidad, Avery tiene una nueva abogada, Kathleen Zellnere que ha encontrado nuevas pruebas que podrían demostrar la inocencia de su víctima. En declaraciones a Newsweek, la abogada asegura que el rastro de su teléfono móvil puede demostrar que Teresa abandonó viva la propiedad de Steven: “Muestra la ruta de ella abandonando la propiedad. Se fue por el mismo camino que llegó y su último registro se encuentra a 19 kilómetros de la finca”.

Además, Zellnere ha desvelado que dos días antes de su muerte, Teresa realizó un par de llamadas a un hombre de Arizona con historial de abusos sexuales. “Teresa podría haber estado sufriendo acoso y este es el tipo de persona a por la que tendrían que haber ido”.

Zellner critica el trabajo de los anteriores abogados - aplaudidos por el público - por pasar por alto estas pruebas, que contradicen la versión de que Teresa fue asesinada en el desguace de Steven. En los próximos meses la abogada presentará su teoría en el juzgado del Condado de Manitowoc asegurando que puede acusar directamente a un culpable: “Tenemos a un par de sospechosos. Yo diría que hay uno que tiene todas las papeletas, pero no quiero asustarle y que huya”.

'Making a Murderer' podría tener una 2ª temporada

Laura Ricciardi y Moira Demos, las directoras de la serie de Netflix, ya han declarado su interés por realizar una segunda temporada de 'Making a Murderer' con los avances del caso.

El nuevo material estaría garantizado, ya que Zellner ha asegurado que al entrar a formar parte de la defensa de Steve ha tenido “acceso a documentos que no son públicos” y muchos informes policiales. De realizarse, sin duda la personalidad de Zellner acapararía gran parte del protagonismo, ya que la abogada es conocida en Chicago por su carácter directo y sin tapujos y por su historial de liberación de presos condenados erróneamente.