Aviso: Spoilers

'Olmos y Robles' se despidió con disparos, sangre, amor y venganza

'Olmos y Robles' se despidió con disparos, sangre, amor y venganza

La serie de La 1 de TVE 'Olmos y Robles' cerró anoche su segunda temporada con un capítulo en el que resuelve los orígenes de Olmos y vuelve a demostrar el buen equipo que finalmente ha formado con Robles.

La ficción ha tenido una segunda temporada correcta, pero sin lograr liderar por la fuerte competencia a la que ha tenido que hacer frente. En su último capítulo, se conformó con un 11.2% de cuota de pantalla y 1.921.000 espectadores, como tercera opción de la noche.

((Aviso: spoilers)) Así acabó 'Olmos y Robles'

El gran giro inicial del capítulo de despedida de la serie estuvo provocado por la aparición en escena de padre de Olmos, que se presentó a su hijo al más puro estilo Darth Vader en 'Star Wars'.

Su personalidad malvada quedó más que patente, aunque no se sabía si sería capaz de llevarla hasta tal punto de matar a su hijo, ya que le tenía apresado para contarle por qué desapareció.

Mientras él permanecía apresado, Robles y Atiza Jr. le buscan, aunque lo que acaban encontrando es el cadáver de Gaspar Miñambres, junto a una bomba-trampa dirigida a ellos que logran desactivar.

Nora e Isa, secuestradas a punta de pistola

Nora e Isa tampoco lo están pasando mucho mejor. Otro de los comandos, con dos hombreas armados, les tienden una trampa para que se reúnan y así sorprenderlas y retenerlas a punta de pistola.

Cuando los dos secuestradores se las llevan en el maletero del coche amordazadas, Braulio se interpone en su camino y, por casualidad, consigue darle esa pista a Robles y sus compañeros de la Guardia Civil, que seguían buscando a Olmos.

Garrido se pone en contacto con Robles para plantearles sus exigencias y decirle que si cumple, las dos mujeres sobrevivirán.

Encuentran el “cadáver” de Olmos en el bosque

Atiza aparece de repente, recién llegado de sus vacaciones, y el teniente le ordena uniformarse para sumarse al equipo de forma inmediata.

Mientras Nora e Isa permanecen retenidas, Olmos es amenazado de muerte por su padre en el bosque. Le obliga a ponerse de rodillas y le dispara. O eso parece, puesto que la cámara no muestra si la bala le impacta.

Inmersos en su campaña electoral, Damián y Cata salen juntos al campo, y allí se encuentran el cuerpo de un Guardia Civil tumbado y tapado con ramas y rastrojos. Aparentemente, es el cadáver de Olmos.

Cuando sus compañeros de la Guardia Civil llegan, la escena se convierte en un drama de llantos. Pero de repente y por sorpresa, Olmos aparece a las espaldas de todos ellos para decirle: “Ese no soy yo”. Todos le abrazan y se alegran de verle vivo.

Olmos resulta herido de bala

Tras la reaparición de Olmos, todos se centran en buscar a Nora e Isa. Y logran encontrarlas tras abatir a un hombre armado que las vigila. Las liberan, y plantean cómo pueden salir de allí.

Los dos agentes ponen a Nora e Isa a salvo, y vuelven para buscar a Garrido. Cuando se encuentran cara a cara con él, está junto al padre de Olmos y a su mujer de confianza. Se produce un intercambio de disparos que mata a la mujer y a Garrido y hiere a Olmos, mientras su padre escapa.

Robles sale en su persecución, mientras Olmos a duras penas puede salir del lugar. Sin saberlo, uno de los hombres de Garrido le encañona, y cuando va a matarle Arrea usa su rifle de francotirador y demuestra su puntería.

Robles, ante la oportunidad de vengarse

Cuando Robles consigue dar caza a Muro, padre de Olmos y asesino de sus propios padres, le tiene en el suelo y está listo para dispararle y cumplir su venganza. Pero le dice que “soy Guardia Civil, y ni tú me vas a hacer romper mi juramento”.

Cuando le levanta para detenerle, Muro saca una pistola de su calcetín y dispara a Robles en el vientre. En ese momento aparece Olmos, que apunta a su padre y le dice que no dispare, mientras desvela delante de Robles que Muro es su padre.

Olmos intenta que su padre baje el arma y no mate a Robles con un emotivo discurso explicándole que él es su hermano, su familia, mientras que él nunca ha estado y ahora tiene la oportunidad de hacer algo bueno por su hijo. Tras lograr desarmarle, le detiene.

Un final feliz para todos

La acción se traslada al pueblo, donde Cata le gana la batalla por la alcaldía a Damián y va a “echarle” del Ayuntamiento. Pero entonces ambos dan rienda suelta a su tensión sexual no resuelta, y se besan sobre la mesa del despacho.

Mientras, se ve a Olmos y a Isa vivir juntos su bonita historia de amor. En la casa cuartel, la jueza Nora hace una visita a Olmos, pero éste no está y en ese momento aparece Robles, que ha pedido el alta voluntaria del hospital.

La jueza le explica que el caso de Globaltech se ha resuelto con más de 40 detenciones, y tras eso se acerca a él y acaban besándose, en otro final feliz. Olmos irrumpe entonces en escena, y les ve. Los dos compañeros tienen una pequeña conversación en la que Olmos le dice que no puede ver a su padre por lo que le hizo, mientras Olmos le responde que le respetará haga lo que haga.

Domi, la madre de Olmos, se lleva a ambos como si fuesen una familia, y Robles uno más de sus hijos, poniendo el broche final perfecto al episodio y a la temporada.

Etiquetas
stats