“Perdidos en la Tribu” de guerreros y polígamos: la 'extreme edition' llega este miércoles a Cuatro
El miércoles es el día escogido por Cuatro para iniciar su “guerra tribal” en las audiencias. La cadena de Mediaset estrenará el 18 de este mes a las 22:30 horas la tercera edición de Perdidos en la tribu, con la conducción esta vez de Raquel Sánchez Silva, que sustituye a Nuria Roca y hará “doblete” junto a El Cubo.
El programa, que como avanzó Vertele ofrecerá su versión más radical, incluyendo a dos tribus que fueron rechazadas anteriormente por “duras”; sustituirá a la habitual apuesta cinematográfica de Cuatro y competirá con CSI en su “hermana” Telecinco, Comando Actualidad en La 1, el cine de Antena 3 y La 2, y Alcatraz en laSexta.
Las tribus de los ‘Suri’, los ‘Shiwiar’ y los 'Tamberma', protagonistas
Los Suri viven en el sudoeste de Etiopía (África) y son considerados como una de las tribus guerreras más fieras de la región. Viven en pequeñas chozas, generalmente hechas con ramas, se dedican principalmente al pastoreo y se alimentan de leche de vaca, carne y de los cereales que cultivan. En la comida, la tradición dicta que el hombre come primero y come todo lo que puede y quiere. Después, y respetando la jerarquía, las mujeres y los niños pueden comer lo que ha quedado. Una de sus tradiciones exige provocarse el vómito después de ciertas comidas, así consiguen purificarse tanto por dentro como por fuera.
Los Suri mantienen con orgullo sus tradiciones, entre las que se encuentra el extraordinario plato que lucen las mujeres en labios y orejas, una vez dilatados estos miembros del cuerpo. Estos platos reflejan el poder de quien los lleva y les permite obtener una dote matrimonial más suculenta. Algunos pueden llegar a medir hasta 40 centímetros de diámetro. Los Suri practican la poligamia y son muy sensibles al arte, sensibilidad que suelen mostrar a través de su cuerpo o de pequeños ornamentos: les gusta grabar dibujos hechos con cicatrices en su propia piel, llevar pinturas corporales o adornarse con anillos, brazaletes, cinturones…
Los 'Suri': guerreros, polígamos y artistas con un agresivo rito
Sus dibujos y tocados son espectacularmente bellos y con ellos expresan todo tipo de sentimientos, desde el amor o el poder hasta el deseo o el estatus social. Esta deslumbrante variedad de dibujos corporales es una expresión cultural más importante para los Suri que la música o la danza. Los hombres suri muestran una total desinhibición a la hora de tocarse: muestra de ellos es que a la hora de realizar sus grabados en la piel, se pintan unos a otros completamente desnudos. Las escarificaciones y mutilaciones que se infligen son también signos de elegancia, de fortaleza y de valor.
Uno de sus ritos más característicos es el llamado “Donga”. Después de la cosecha los jóvenes se juntan para una serie de luchas violencias con bastones que simbolizan la masculinidad, la rivalidad personal, el prestigio o la búsqueda de una esposa. Los participantes luchan de dos en dos y van quedando eliminados hasta que tan sólo quedan dos luchadores. De ahí saldrá el vencedor. El “Donga” es un torneo agresivo en el que los golpes son fuertes y violentos.
Los ‘Shiwiar’: bromistas y espirituales que escupen para fermentar su comida
La tribu Shiwiar vive en la selva del Amazonas. Los hombres visten con faldas hechas de paja y las mujeres se cubren además los pechos con hojas de palmera. Son un pueblo muy afable y divertido al que le encanta estar de broma. Aunque su forma de ser es muy particular: no suelen mirar a la cara cuando hablan, sin embargo no dejan de ser risueños y accesibles.
Su comida diaria consiste en una papilla llamada ‘chicha’ que se elabora de una forma sorprendente: las mujeres golpean una planta de yuca, escupen sobre ella y la dejan fermentar. Sólo entonces está preparada para comer. Los Shiwiar también comen monos, caimanes, tortugas o unos enormes gusanos algo difíciles para el paladar occidental.
En los poblados existen unas hormigas cuyo picotazo duele como una bala y puede llegar a provocar alucinaciones, así como una especie de peces cuya mordedura puede llegar a paralizar una parte del cuerpo. Además conviven con enormes tarántulas. Los Shiwiar son muy espirituales y supersticiosos, y mantienen una estrecha relación con el medio ambiente y la vida natural. Es por eso que utilizan los recursos naturales para hacer medicinas y para fabricar venenos con los que matar animales y poder comer. Una de sus habilidades más elaboradas es la extracción del curare, una potente neurotoxina que utilizan en dardos para cerbatanas.
Los 'Tamberma': sólo las mujeres cogen excrementos de vaca para construir sus casas
El pueblo Tamberma vive en Togo, al oeste de África. En esta tribu, la arquitectura es muy peculiar. Viven en curiosas construcciones con forma de torres, unidas entre sí por unas paredes que parecen de barro pero que en realidad son de excrementos de vaca. Y duermen en pequeños agujeros en lo alto de las casas, a los que tienen que acceder de espaldas, de modo defensivo. Estas especies de castillos fortificados fueron muy efectivos en su momento a la hora de defenderse de otras tribus dispuestas a atacarles.
Además, les protegen del calor de la región y de la humedad en época de aguaceros. Maestros del barro, las cañas y las piedras, los Tamberma viven en una sociedad algo ruda en la que las mujeres trabajan muy duro pero en la que no tienen ni voz ni voto. Por ejemplo, la recogida de excrementos de vaca para las paredes de las casas es una tarea sólo reservada a ellas.
Los Tamberma fuman en pipas de calabaza y subsisten gracias a la agricultura, la caza y la pesca. Entre sus alimentos se incluyen los murciélagos y, en ocasiones, hasta los perros, considerados casi una delicatessen. El agua es un tema muy serio para la tribu, se trata de un bien sagrado y escaso con el que no se debe jugar. Cuando los jóvenes se convierten en hombres la tradición dicta que tienen que adentrarse en el bosque sagrado completamente desnudos. El chamán del poblado es lo más parecido a un médico local: cura a través de ‘sanaciones’ y para ellas suele necesitar hacer ofrendas y sacrificios, generalmente con animales.
El estreno de “El Número 1” y la gala especial de “GH” retrasó su estreno
Para la nueva edición del formato de Eyeworks Cuatro Cabezas (Mujeres ricas, Caiga quien caiga), en el que la presentadora de El Cubo o Acorralados releva a Nuria Roca, la cadena Mediaset barajó el lunes 26 como fecha de estreno, con la intención de heredar la audiencia que dejaba Quién quiere casarse con mi hijo.
No obstante, y a causa de los movimientos de programación de las cadenas, Cuatro decidió posponer el estreno de su reality para evitar así el estreno de El Número Uno y el lanzamiento de la gala de Gran Hermano con motivo de la huelga general del 29-M.
Rescate de dos tribus rechazadas en la primera edición por “duras”
Habrá importantes novedades que caracterizarán a la cuarta edición –si contamos dos de Perdidos en la tribu (2009, 2010) y el spin-off inverso, Perdidos en la ciudad (2011). En primer lugar, al dar un giro hacia lo más extremo, la productora ha decidido que no participen menores de 18 años, por lo que todos los participantes serán mayores de edad debido a las duros retos o experiencias que puedan tener a lo largo de su trayectoria en el formato que conducirá Raquel Sánchez Silva.
El motivo de esa decisión se debe a que la organización ha decidido rescatar de la primera temporada a dos tribus que fueron rechazadas en su día por su corte radical y que, sin embargo, ahora sí que ajustarían a los requisitos. Así, las tribus protagonistas de lo nuevo de 'Perdidos' serán dos clanes procedentes del continente africano y una de Latinoamérica.
Familias atípicas, más historia personal y los lazos entre ellos, a prueba
Junto a estas novedades, otro de los cambios notorios es que Perdidos en la tribu no va a tener familias tradicionales como venían apareciendo en las anteriores ediciones. En esta nueva temporada no sería extraño, por ejemplo, ver a un abuelo con un nieto, una suegra con su nuera o una pareja de novios; junto a la intención que tiene Cuatro de que en el programa se sumerja más en las historias personales de los participantes, poniendo a prueba la fortaleza de los lazos familiares.
Raquel Sánchez Silva: “'Perdidos en la tribu' tiene una pinta espectacular”
“Estamos en ello. Tiene una pinta espectacular. Será la edición más extrema y con más sorpresas”, explicó la propia Raquel Sánchez Silva en una entrevista a Vertele.
La conductora de El Cubo, que recoge el testigo a Nuria Roca tras su marcha de Mediaset, está impaciente e ilusionada ante este nuevo reto. La presentadora está curtida en programas aventureros después de las experiencias en Acorralados, Supervivientes o Pekín Express, antes de que fuera relevada por Jesús Vázquez.
“Perdidos en la tribu”, una de las revelaciones del curso 08/09
Recordar que Perdidos en la tribu se posicionó en su primera edición como una de las revelaciones de la temporada en Cuatro, cuya final, celebrada el 5 de julio de 2009, fue seguida por casi 2 millones de espectadores y un 14% de share.
La segunda edición, emitida en invierno (de enero a abril de 2010) tuvo un seguimiento medio menor en la noche dominical (7.7% y 1.253.000), si bien se situó casi medio punto por encima del promedio de Cuatro por entonces (7.3%).
*Vídeo de 'Perdidos en la ciudad'
Buena acogida al spin-off “Perdidos en la ciudad”
La pasada edición de Perdidos en la ciudad se despidió el pasado mes de junio de 2011 con buena acogida de audiencia en el prime time dominical de Cuatro (en torno al 11% de share, con récord del 13% en su final).
