Entrevista presentadoras de informativos

'No somos tres mujeres guapas pegadas a un buen comunicador'

Silvia Intxaurrondo (Noticias Cuatro 2), Mónica Sanz (Noticias Cuatro 1) y Marta Reyero (Noticias Cuatro Fin de semana) son las tres principales caras femeninas de los informativos de la cadena de Tres Cantos.

Las tres periodistas, que trabajan junto a Iñaki Gabilondo, Javier Ruiz y Miguel Ángel Oliver respectivamente, han hablado con Enrique Alejandro Garde, director de la nueva revista digital Cyan Mag, en esta entrevista cedida a Vertele.com:

¿Cómo llevan la conciliación de la vida profesional con la personal?

Marta Reyero: Trabajo en fin de semana y tengo un hijo pequeño y, claro, lo notas mucho. Hay un sacrificio personal importante, pero también es una etapa más de la vida profesional, no todo el mundo está en el mismo horario siempre.

Creo que es bueno ir rotando y probar formatos, equipos y compañeros diferentes, es algo que enriquece, aunque siempre cuesta cuando llega el fin de semana, es verdad que la familia se resiente, mi pareja y mi hijo notan que no estoy los fines de semana, es casi como una vida de separados.

Pero me considero una persona bastante positiva y creo que he conseguido sacarle el lado bueno a casi todo. El fin de semana ofrece posibilidades y formas de trabajar que no tienes entre semana. Todo tiene sus compensaciones. También tengo un día más de descanso, que puedo aprovechar para aprender y hacer otras cosas y, por supuesto, para estar con mi familia.

Algunas noticias son de una crudeza considerable. ¿Intentan leerla como una novela de ficción o es mejor intentar sentir lo que se dice? Pongamos, como ejemplo, el 11-M.

Mónica Sanz: Lo ideal sería contarlo como una novela de ficción, pero es imposible. A mí me tocó trabajar la mañana del 11-M y claro que te implicas. Es muy duro, pero es tu trabajo, tienes que actuar profesionalmente y permanecer sereno, intentando contar las cosas con la mayor tranquilidad posible.

Marta: Hay situaciones, como ésta, que son tan dramáticas que no las has vivido nunca. Hemos visto muchos accidentes y situaciones difíciles, pero el 11-M superó cualquier cosa. Somos humanos: hay que intentar ser profesional y alejarse, pero es inevitable sentir.

Silvia Intxaurrondo: Le pasa también a los médicos; si un médico va a operar a corazón abierto no puede pensar en lo que está haciendo continuamente; antes o después sí, pero en ese momento, si piensa lo que está haciendo, corre el riesgo de cometer un error.

Marta

: ¡Pero sentir la emoción no es malo!

Silvia: No, no, ni transmitirla.

Marta

: Claro, pero cuando estás contando una historia demasiado poderosa muchas veces, aunque quieras hacerlo con la mayor profesionalidad y tranquilidad, hay algo por dentro que te está afectando y necesitas decirte que tienes que aguantar.

Silvia: Sí, hay historias que te obligan a contenerte. Cuando estás contando una cosa muy dura para todos, puedes transmitir emoción, pero sin llegar a romperte.

Sobre las noticias políticas ¿Han llegado a sentir presión política, indicaciones sobre si una noticia hay que contarla de una u otra manera?

Mónica: Llevo muchos años en este grupo -Sogecable-, las tres llevamos mucho tiempo –más de diez años-, y, en contra de lo que crea la gente, yo no he recibido consignas de ningún tipo a la hora de contar una noticia política. Bien es cierto que trabajamos en una empresa privada y los intereses económicos y empresariales están ahí, como es lógico.

Pero, consignas de tipo ideológico o político, te puedo asegurar que no he recibido desde ningún despacho. En el caso de Silvia, el informativo empieza con un editorial, que marca una opinión…

Silvia: Pero eso es diferente. A mí me hace gracia cuando colocan al informativo de la noche el cartel de político, porque parece que el resto de los informativos de ésta y otras cadenas no tienen ninguna intención política. Me provoca mucho asombro.

Los informativos de todas las cadenas cuentan con un determinado punto de vista. Nosotros lo que hacemos es decir: nuestra opinión es esta, y la recuadramos. El resto lo que hacen es diluir su opinión en las informaciones. A mí me parece más correcto lo que hacemos nosotros. Los demás, al diluir la opinión en las informaciones, no la eliminan, todo lo contrario, sólo que no te dicen dónde está.

Cuatro es una cadena muy joven, en la que se permite la experimentación, como en el caso de los deportes. ¿Os aporta flexibilidad o comodidad?

Marta: Sí. Ha entrado un aire fresco maravilloso y yo creo que se ha notado incluso en los informativos. En el fin de semana, por la parte que nos toca a Miguel Ángel (Oliver) y a mí, nos ha venido fenomenal estar con gente como Juanma (Castaño) y Nico (Abad), porque nos ha contagiado hasta en la forma de contar las cosas y de plantear el informativo, sin perder, eso sí, la seriedad de la información pura y dura.

Pero nos hemos relajado un poco más, estamos muy a gusto y esa forma nueva de trabajar es algo que ha traído Cuatro.

Mónica: Sí, yo creo que es verdad que se produce en todos los informativos y es la prueba de que para ser riguroso o profesional no hace falta ser aburrido.

Es una forma más desenfadada, más informal, más cercana al espectador, que agradece sobre todo el público más joven, que agradece ese formato menos frío.

Silvia: Hemos roto, en parte, ese concepto del informativo como un busto parlante, estoy de acuerdo.

Afortunadamente los tiempos han cambiado. ¿Notan que se ha roto el estereotipo de la mujer como cara bonita al lado de un comunicador, un gran periodista al que le toca toda la responsabilidad?

Silvia: Creo que esa mirada depende más de la audiencia…

Claro, pero esa mirada antes existía. Ha cambiado el papel de la mujer en los medios.

Silvia: ¡Hombre, y tanto!

Marta: Claro que ha cambiado. La mujer que se sienta ahora a presentar el informativo es una periodista. Antes eran locutoras. La figura de la locutora no tiene nada que ver con la de la periodista que elabora sus historias, tiene su guión, etc.

Mónica: Nosotras tres somos un claro ejemplo de que, además de hacer televisión, sabemos hacer periodismo en otros medios. Las tres hemos estado previamente en la radio, donde no se nos exigía ninguna “cara”, y ejercíamos igualmente la profesión. Afortunadamente, hay muchas más mujere, que ejercen su profesión al igual que los hombres y no creo que haya distinciones.

Marta: Creo que es más la percepción del que mira…

Mónica: Probablemente, cuando miras a Iñaki Gabilondo o a Miguel Ángel Oliver no estás juzgando si son guapos o no, que lo son. Sin embargo, a la mujer parece que se le exige ser guapa. Hasta parece que tener un físico agradable puede ser un inconveniente para ser un buen profesional y no veo por qué. Iñaki y Miguel Ángel son guapos y nadie les pregunta por ello. La imagen, supongo, que es importante, aunque no necesariamente.

Silvia: Cuando Cuatro nació y se planteó la idea que presentasen un hombre y una mujer, parejas de presentadores, si a alguien se le ocurrió que nosotras tres éramos tres tías pegadas a tres grandes comunicadores porque éramos tres caras bonitas, creo que hemos demostrado de sobra en todo este tiempo que la realidad es totalmente distinta.

Marta: (risas) ¡Qué seguridad aplastante! Ya me gustaría a mí haber dicho eso...

Silvia: Quiero decir, si alguien tuvo el prejuicio de mirarnos como la chica guapa al lado del gran comunicador, creo que su mirada es así si no ha cambiado aún, y va a seguir siendo así sobre todos los aspectos de la realidad que impliquen a un hombre y una mujer en un mismo puesto. Pero insisto, creo que ha habido tiempo de sobra para ver que no es así.

Mónica: El que quiera verlo lo verá, por la trayectoria y los años que llevamos en esto. No acabamos de salir de la facultad y nos han hecho un casting. Llevamos diez años trabajando.

Marta: Sí que es verdad que nos cuesta mucho más tiempo demostrarlo.

Mónica: Sí, pero precisamente por ese prejuicio. Esperemos en que el tiempo consiga romperlo y avancemos un poco.

Silvia: Y si la gente se deja, porque hay gente que tiene ese prejuicio tan enquistado que no puedes cambiarlo.

Marta: Pero le pasará con todo en la vida.

Mónica: Es que, en la televisión, la mente es machista en algunos aspectos, y éste es uno de ellos.

¿Qué recuerdan de la primera vez que se pusieron frente a una cámara?

Mónica: ¡Taquicardias!

Silvia: Yo temblaba como una hoja... La primera vez fue en CNN+, en 2004, pero el directo en Cuatro, un año después, me siguió impresionando igual.

¿Y ahora?

Silvia: Ahora no, porque es mi trabajo, mi oficio. Mónica: Bueno, hay un punto de tensión que no se pierde nunca, y además no se debe perder, te ayuda a estar alerta.

Marta: Yo ya ni me acuerdo del día en que empecé (risas). Estaba en Asturias, en TVE, y el primer día me tuvieron que dar una pastilla para que me tranquilizase. Bueno, y tanto me tranquilicé que salí todo el programa con los ojos entrecerrados. ¡Mejor no recordarlo! Fue un poco traumático... (risas)

Una persona que trabaja con la información, que es el día a día de mucha gente, ¿sabe desconectar de ello cuando sale de trabajar?

Mónica: Es muy difícil, hay que hacer el esfuerzo. Pero porque es una profesión muy vocacional, estamos en esto porque nos gusta, y cuando sales de aquí te sigue importando...

Marta: Y además la actualidad no se para, yo sigo escuchando la radio, veo el informativo de Iñaki y Silvia por la noche...

Mónica: Somos consumidoras compulsivas de información.

Marta: Habrá gente que sepa desconectar, pero como puedes estar en casa pendiente de la radio y haciendo otras cosas... Yo me he acostumbrado a estar siempre al tanto.

Silvia: De todas formas, hay gente que piensa que esto es enfermizo. Yo no veo los informativos con una mirada profesional, sólo para ver qué me cuentan, no estoy pendiente de cómo entran las noticias o las escaletas.

Mónica: Pero es inevitable, es parte de tu trabajo. Al final, tenemos que estar al tanto de la información siempre. Nos debemos a ello.

Etiquetas
stats