La parábola del rating en televisión y las cloacas

Los críticos hablan de...

La parábola del rating y las cloacas

“La forma de medir las audiencias de la televisión responde a una época en la que no existían las tecnologías personales ni las redes sociales.”

Espoiler (El Diario.es)- Crítica completa

“Masterchef”: el punto justo de cocción para un reality

“Eso sí, solamente triunfará si el casting funciona. De momento, los nuevos aspirantes a ‘chef’ ya apuntaron anoche maneras para el espectáculo. Lo hicieron en una emisión impoluta a nivel televisivo, aunque con una seria contraindicación: los programas de casting (con su lluvia de tópicos) ya están muy manoseados y, como consecuencia, desgastados en nuestra pequeña pantalla. No sorprenden, parecen hechos todos con el mismo molde. Y eso es un problema que tiene la tele actual. Ha llegado el momento de revolucionar este género.”

Borja Terán, blog 'Telediaria' (lainformacion.com) -Crítica completa

“Estamos acostumbrados a platós donde la gente se insulta, se grita, se humilla… con MasterChef se recupera una televisión blanca, de calidad y principalmente para toda la familia. Se tiene muy en cuenta a las personas y los valores de los futuros cocineros. Su presentadora Eva González –regular comunicadora- destacó que ”hay que creer lo que uno puede conseguir“ y eso opinamos también, en otra forma de hacer las cosas con un programa como éste que enseña, entretiene y forma a una audiencia mal acostumbrada en los últimos años.”

Ocio Gay -Crítica completa

Y nos dieron las doce. Y las dos.

“Masterchef es un buen programa, pero sus dos horas de duración son un exceso. Si lo recortáramos a una, sus editores y guionistas podrían hacer con él maravillas. Aquí la comparación entre las ediciones española y estadounidense de 'Top Chef' es nuevamente obligatoria. Y ganan ellos, claro. Una hora es, para mi gusto, la duración ”mágica“ en televisión. La regla de oro. El metro de platino e iridio. Dos es demasiado. Tres es un exceso. Y cuatro, un insulto. Me gusta Masterchef, pero me gusta más poder madrugar sin quererme suicidar cuando suena el despertador. Ya véis, soy así de aburrido.”

Alberto Rey (El Mundo.es) - Crítica completa

Contraelapagón: ¡Sí se puede!

“No solo cine, sino series, programas, divulgativos, especiales, programadores, redactores, guionistas, dobladores, y un sin fin de profesionales que caerán de nuevo en esta ofensa contra el sector. Ha nacido una nueva marea ciudadana, la de la audiencia. La marea televisiva tiene que revelarse, hay que salir al plató y llenarlo de pancartas. Que en Sálvame, en Zappeando, en el Hormiguero... y en el resto de programas en directo hagan algo. Nos tocan a uno, nos tocan a todos, compañeros.”

Tele de Cristal - Crítica completa

Paz Vega, que no para de trabajar, y el tipazo de Elsa Pataky tres semanas después de parir mellizos

“Elsa Pataky ya se ha echado a las calles de Los Ángeles. Y no penséis que lo ha hecho con un pantalón ancho y una camiseta oversize para disimular. No tiene nada que disimular, está más buena que un queso y su cuerpo ha vuelto a su sitio en tres semanas. ¿Qué es lo que ha hecho? En primer lugar, y digan lo que digan, pasar mucha hambre. En segundo lugar, tener un código genético de primera. Y, en tercer lugar, salir a correr por Venice Beach cada día. Tengo una amiga fotógrafa estos días en la meca del cine y me cuenta que la actriz sale cada día religiosamente a correr por la playa. Pero que incluso estando embarazada lo hacía. ¡Eso es tener ganas! Yo salgo un día a correr y me siento tan orgullosa que me regalo diez de siesta y bollería industrial.”

Blog Rosy Runrún (20 Minutos.es) - Crítica completa

Cinco lobitas 'cheerleaders'

“Faltaba todavía un minuto para que acabase el capítulo de El Príncipe (T-5), y ya nos incrustaron en la pantalla a las cinco señoras de Hable con ellas comiendo palomitas. Consiguieron con esta estrategia arrancar su debut con los 5 millones de personas que estaban viendo El Príncipe. ¡Ah! Es un método, una colonización, que solo a productoras como La fábrica de la tele permiten, una empresa muy esencial y muy deluxe para Tele 5. Cinco señoras con pretensiones de panteras han irrumpido en el late night. A medida que transcurría el programa hemos visto que no eran panteras. Eran lobitas buenas, alegres y espumosas, con aire de cheerleaders. Primero una entrevista ...”

Ferran Monegal (El Periódico) - Crítica completa