Con uno de sus mínimos de audiencia

“BuenAgente” se despidió, 'a la francesa', en laSexta

"BuenAgente" se despidió, 'a la francesa', en laSexta

Sin hacer ruido, de puntillas, por la puerta de atrás o 'a la francesa'. Así se despidió para siempre, el pasado viernes en laSexta, BuenAgente, la comedia protagonizada por Antonio Molero, Malena Alterio y Arturo Valls, entre otros.

La serie producida por Globomedia (Aída, Águila Roja), que en su día se convirtió en el mejor estreno de ficción nacional en la historia de la cadena (9.2% y 1.853.000), dijo adiós con uno de los datos más bajos de estas dos temporadas: 4.4% de cuota y 789.000 incondicionales.

Patricia Conde no fue el revulsivo esperado para una serie que 'viajó' por la parrilla

El final de BuenAgente, que en sus últimos seis capítulos ha contado con la incorporación de Patricia Conde como la policía novata Paula, no fue anunciado por laSexta, que se limitó a comunicar las tramas de este último capítulo en su nota de prensa.

En su acumulado definitivo de este curso, y tras probar suerte en hasta cuatro días diferentes durante su vida -en jueves, domingo, lunes y viernes-, la comedia cierra su periplo con una discreta media del 5.1% de share y 878.000 televidentes.

En el último capítulo, Sebas pidió matrimonio a Oli

En cuanto a las tramas de esta última entrega, resurgieron los sentimientos entre Sebas y Oli. Esta vez, Sebas se tomó la relación muy en serio y pidió matrimonio a Oli. Además, en la comisaría, éste consiguió cerrar la trama de corrupción policial que estaba investigando con la ayuda de Paula y Jorge.

Pese a ello, el policía sospechó que el verdadero cerebro andaba suelto y que era alguien de las altas esferas. Al seguir investigando, se encontró con algún susto y un final muy inesperado.

Por su parte, Oli se llevó una desagradable sorpresa cuando se enteró de que su amiga Ana se marchaba a Miami para protagonizar un culebrón. Algo que no agradó a Jorge, que, después de acostarse con ella en un momento de debilidad, hizo todo lo posible para evitar que se fuera. La situación disgustaba a Nata, que seguía enamorada del joven policía y al que pidió perdón por su comportamiento infantil.

Por último, Agus se sentía muy presionado en lo laboral, pero su vida personal comenzaba a funcionar mejor. Paula le confesó que haberse acostado con su hermano no significaba nada para ella. Todo parecía ir de maravilla entre ellos hasta que apareció Joaquín, un ex de Paula con un carácter complicado que se interpudo entre los dos.

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