Telecinco estrena la nueva entrega de “7 Vidas” con Lolita y Kempes como invitados

Esta noche, a partir de las 22:00 horas, 7 Vidas estrena sus nuevos capítulos con un episodio en el que intervienen la cantante Lolita -interpretando a una simpática pitonisa- y el futbolista Mario Kempes -que se interpreta así mismo como ídolo deporivo de Gonzalo- como actores invitados. Esta nueva entrega prolonga la décima temporada de la serie -actualmente en antena- que, desde el inicio de su emisión el pasado 5 de febrero, ha cosechado una media de 3.893.000 espectadores y un 24,7% de share, datos que suponen el mejor registro de audiencia de la serie desde su estreno. A pesar de competir directamente con la Liga de Campeones en varias ocasiones, el primer capítulo de 7 vidas (emitido a las 22:00 horas) ha computado una media de 4.158.000 espectadores y un 23’6% de cuota de pantalla, mientras que el segundo episodio de la serie (emitido a las 23:00 horas) ha registrado una media de 3.623.000 espectadores y un 26’1% de share. La serie de Globomedia batió su récord histórico de audiencia durante tres semanas consecutivas en la presente temporada, fijando en 4.842.000 seguidores su récord de audiencia en miles de espectadores y en un 31,5% su mejor registro de share. Nuevas tramas Están hechos el uno para el otro, pero no terminan de darse cuenta. Carlota y Gonzalo podrían ser la pareja ideal si el destino no se empeñara en ponerle trabas, dudas, manías y malos entendidos de por medio. Ahora que habían superado sus distintos puntos de vista sobre la paternidad y justo cuando habían decidido intentarlo de nuevo, Carlota pierde su empleo en avanzado estado de gestación y la economía familiar empieza a hacer aguas. Si todos los niños vienen con un pan debajo del brazo, el retoño de Carlota y Gonzalo viene con una carpeta repleta de facturas. Un nuevo problema -el económico- se interpone en la felicidad de la pareja, que tendrá que emplearse a fondo para superar las dificultades. Aída sigue buscando un hombre con el que compartir su vida después de un fracaso sentimental que le ha bajado completamente la autoestima. El frutero vive un matrimonio infeliz con una mujer a la que no soporta, y hace tiempo que siente el vacío de una vida sentimental que ha tocado fondo con su pareja. Sus carencias afectivas le han llevado a aproximarse y ambos empiezan a sentir una admiración mutua muy cercana al enamoramiento: Aída no es muy agraciada, pero el frutero -más allá del físico- ve en ella a una mujer extraordinaria. El frutero, por su parte, es un auténtico machista y no siempre goza de las simpatías de su entorno, pero Aída ha visto en él a un ser humano de gran calidad humana. Algo especial está surgiendo entre ambos...¿Será el amor? Verpo y Sergio. Ambos presumen de su abultado historial sentimental y alardean de que no hay presa que se les resista. Sergio y Vero se gustan, pero temen que su orgullo se resienta con una de las negativas con las que de una forma tan eficaz han sabido castigar a sus conquistas. En el transcurso de ese “tira y afloja” que tanto morbo ha creado en la relación, y justo cuando Vero ha decidido dar el primer paso, una nueva chica aparece en la vida de Sergio y parece dispuesta a ir a por todas. Sole acusa más que nunca el “síndrome del nido vacío” y su casa parece más grande desde que sus hijos no están a su lado. Diana, por su parte, suma a la decepción de su matrimonio fracasado su reciente despido en la serie “Aulas vacías, corazones llenos” y su trabajo poco gratificante como presentadora de un programa horrendo para la televisión local. A los problemas de convivencia entre ambas amigas se añade el sentimiento de culpabilidad de Sole por haber provocado el despido de Diana de la serie. Además, la matriarca de los Gimeno empieza a cuestionarse su rol entre un grupo de gente joven, cuando piensa que quizás debería estar en una residencia de ancianos. Gonzalo se muda a casa de Carlota En el capítulo de esta noche, tras la reconciliación, Gonzalo se instala de nuevo en casa de Carlota. Con el traslado comienzan a salir viejos recuerdos que Gonzalo aprecia mucho, pero de los que Carlota se quiere deshacer. Mientras Gonzalo tiene un ataque de nostalgia, Carlota hace desaparecer una camiseta firmada por el ex-jugador de fútbol argentino Mario Kempes, a la que él tiene mucho cariño. Cuando Carlota intenta arreglarlo ya es demasiado tarde pero, a cambio, conseguirá que el máximo goleador del Mundial del 78 con la selección Argentina, ganadora además de aquel campeonato, se pase por el “Casi Ké No” para animar a Gonzalo. Aída quiere consultar a una pitonisa para saber cómo le va ir en el amor. Sole trata de persuadirla de que todo es una superchería para sacar dinero a los ignorantes, pero como Aída sigue empeñada, decide acompañarla para que no le engañen. Una vez allí, las protestas de Sole reciben como castigo una terrible predicción: tres señales le anunciarán su muerte. Aunque Sole es completamente escéptica, comienza a angustiarse tras descubrir unas viejas cartas de su marido que pensaba perdidas. Sólo una nueva visita a la futuróloga podrá acabar con su intranquilidad. Vero, despechada, no presta atención a las demostraciones de amor de Sergio

Sergio descubre que Vero se quedó dormida antes de que pudiera escuchar su declaración de amor y su oferta de matrimonio. Ella sólo recuerda que por culpa de él fueron descalificados del concurso de baile. En un intento desesperado para demostrar su amor, Sergio prepara una estupenda cena para regalarle un anillo a Vero, pero ésta, enfadada y agobiada por su próximo viaje de trabajo, no le da ninguna oportunidad. Será Carlota la que, ejerciendo de celestina, intente que Vero se de cuenta de lo que Sergio está haciendo por ella. Noticias relacionadas

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