Imágenes inéditas de Rosito y collares del veto

El 'Debate de las Tentaciones' descubrió el primer minuto de la hoguera de confrontación con... Melyssa

Melyssa en su hoguera de confrontación

Paula Hergar

El nuevo Debate de las tentaciones tuvo como plato fuerte la emisión del primer minuto de la hoguera de confrontación más esperada: la de Melyssa y Tom. Es lo que había avanzado el último programa y en el próximo veremos si el francés acude o no a la cita.

Además, Carlos Sobera mostró imágenes inéditas de lo que le ocurrirá a Rosito por parte de las solteras de la villa de los chicos, la gran bronca entre Marta y Mayka y un nuevo edredoning, esta vez por parte de Lester y Patricia.

También mostraron las reacciones al collar del veto que, ellas le dedicaron a Lía y ellos a Óscar.

En el aire la asistencia de Tom a la hoguera

El programa emitió el primer minuto de la segunda hoguera de confrontación, desvelando así a sus protagonistas: “Ayer en la hoguera de las chicas una de vuestras novias no pudo más”, decía Sandra Barneda para dar paso a la siguiente imagen dando la bienvenida a Melyssa.

“Estás aqui porque estás al límte después de todo lo que has vivido y necesitas hablar con Tom” reflexionaba la presentadora y la joven aclaraba sus razones: “Estoy nerviosa pero me siento más fuerte que nunca, necesito una respuesta o una explicación porque no me merezco esto. Si no aparece abandonaré pero no quiero que tenga ningún contacto conmigo”.

Preguntada por si había alguna opción de perdonar a Tom: “Para perdonarle debería no ver más imágenes de besos y que quisiera conquistarme. Necesito que luche por mí”, afirmó Melyssa. Y en el aire dejaron si el novio accedió a acudir o no a la hoguera.

Sobera también aclaró que el momento se grabó de día y no de noche, como ocurría hasta ahora porque “estaba a punto de llegar un huracán”.

Las reacciones a los collares del veto

Las reacciones a los collares del veto también fueron las imágenes inéditas que mostraron a los espectadores. El primer fue Aless Livi que se quedó sorprendido al ver que las chicas habían impedido que tuviera más citas con Lía: “No me lo esperaba para nada, tan solo con una cita, no ha podido ver nada que le molestara tanto. Es celosa compulsiva pero no le veo sentido a este veto tan rápido. Me molesta un poco. Mi opción era seguir teniendo una cita con ella”, confesó.

A la vez, la perjudicada no pudo reprimir el llanto: “Me hubieses gustado seguir conociéndolo. No quiero sentirme desplazada”, explicó. A la vez que Tom también se mostraba asombrado de que no fuera Sandra quien recibiera el collar.

En cuanto a las chicas, para Mayka no fue ninguna sorpresa descubrir que ellos se lo ponían a Óscar. En cambio, él se lo tomó como síntoma de miedo hacia él: “Lo veo un acto de inseguridad por su parte, si estamos teniendo feeling vamos a seguir teniéndolo”, aseguró.

Las confesiones de Tom y Marta que no habían contado

Tom quiso empezar bien su relación con Sandra y para ello le confesó que sí había tenido un beso con Liseth. Tras ello, fue a hablar con esta segunda para disculparse: “Liseth te doy la razón, lo he negado porque me dio vergüenza, pero me pareció feo que lo dijeras en la gala. Para mí fue un beso y nada más”.

La tentadora aceptó las disculpas: “Para mí también lo fue. Reconozco que en la gala fue un momento incómodo”.

En la casa de las chicas, también Marta quiso confesarse y habló con Patry sobre su relación con Aless Livi: “Nunca me he liado con tu novio, pero sí que hubo un pequeño tonteo, muy pequeño. Cuando lo dejamos con mi novio”.

Algo que no sorprendió a Patry que le contó que venía mucha gente a hablarle cosas de Aless: “Sé que no es ningún santo”. Ambas acabaron abrazándose.

Rosito, colgado de la lámpara

Otra de las imágenes más esperadas era la del futuro de Rosito en la villa de los chicos donde Pablo le tiró al suelo tras ver a Mayka con Óscar. Entonces, las chicas, decidieron demostrarle el cariño que le tienen al novio llenando de besitos a Rosito.

Y cuando pusieron todas la marca de sus labios por el cuerpo del peluche, acabaron colgándolo de la lámpara por una de sus patas.

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